'Jehová' en la Biblia
En el año segundo del rey Darío en el mes sexto, en el primer día del mes, vino palabra de Jehová, por medio del profeta Hageo, a Zorobabel hijo de Salatiel, gobernador de Judá, y a Josué hijo de Josadac, el sumo sacerdote, diciendo:
Así habla Jehová de los ejércitos, diciendo: Este pueblo dice: El tiempo aún no ha venido, el tiempo de que la casa de Jehová sea reedificada.
Pues así dice Jehová de los ejércitos: Considerad vuestros caminos.
Así dice Jehová de los ejércitos: Considerad vuestros caminos.
Subid al monte, y traed madera, y reedificad la casa; y pondré en ella, mi voluntad, y seré glorificado, dice Jehová.
Buscáis mucho, y halláis poco; y encerráis en casa, y soplo en ello. ¿Por qué? dice Jehová de los ejércitos. Por cuanto mi casa está desierta, y cada uno de vosotros corre a su propia casa.
Y oyó Zorobabel hijo de Salatiel, y Josué hijo de Josadac, el sumo sacerdote, y todo el resto del pueblo, la voz de Jehová su Dios, y las palabras del profeta Hageo, como lo había enviado Jehová el Dios de ellos; y temió el pueblo delante de Jehová.
Entonces Hageo, mensajero de Jehová, habló el mensaje de Jehová al pueblo, diciendo: Yo estoy con vosotros, dice Jehová.
Y despertó Jehová el espíritu de Zorobabel hijo de Salatiel, gobernador de Judá, y el espíritu de Josué hijo de Josadac, sumo sacerdote, y el espíritu de todo el resto del pueblo; y vinieron y trabajaron en la casa de Jehová de los ejércitos, su Dios,
En el mes séptimo, a los veintiún días del mes, vino palabra de Jehová por medio del profeta Hageo, diciendo:
Pues ahora, Zorobabel, esfuérzate, dice Jehová; esfuérzate también, Josué, hijo de Josadac, sumo sacerdote; y esforzaos, pueblo todo de la tierra, dice Jehová, y trabajad; porque yo estoy con vosotros, dice Jehová de los ejércitos.
Porque así dice Jehová de los ejércitos: De aquí a poco aún yo haré temblar los cielos y la tierra, y el mar y la tierra seca;
y haré temblar a todas las naciones, y vendrá el Deseado de todas las naciones; y llenaré de gloria esta casa, dice Jehová de los ejércitos.
Mía es la plata, y mío es el oro, dice Jehová de los ejércitos.
La gloria de esta casa postrera será mayor que la de la primera, dice Jehová de los ejércitos; y daré paz en este lugar, dice Jehová de los ejércitos.
El día veinticuatro del noveno mes, en el segundo año de Darío, vino palabra de Jehová por medio del profeta Hageo, diciendo:
Así dice Jehová de los ejércitos: Pregunta ahora a los sacerdotes acerca de la ley, diciendo:
Y respondió Hageo y dijo: Así es este pueblo, y esta nación delante de mí, dice Jehová; y así es toda obra de sus manos; y todo lo que aquí ofrecen es inmundo.
Ahora, pues, Considerad esto en vuestro corazón desde este día en adelante, antes que pongáis piedra sobre piedra en el templo de Jehová.
Os herí con viento solano, y con tizoncillo, y con granizo en toda obra de vuestras manos; mas no os convertisteis a mí, dice Jehová.
Considerad, pues, ahora en vuestro corazón desde este día en adelante, desde el día veinticuatro del noveno mes, desde el día que se echó el cimiento del templo de Jehová; Consideradlo.
Y vino otra vez palabra de Jehová a Hageo, el día veinticuatro del mes, diciendo:
En aquel día, dice Jehová de los ejércitos, te tomaré, oh Zorobabel, hijo de Salatiel, siervo mío, dice Jehová, y te pondré como anillo de sellar; porque yo te escogí, dice Jehová de los ejércitos.