'Judá' en la Biblia
y ordenó que enseñaran a los hijos de Judá el {cántico del} arco; el cual está escrito en el Libro de Jaser:
Después de esto David consultó al SEÑOR: `` ¿Subiré a alguna de las ciudades de Judá?" Y el SEÑOR le dijo: ``Sube." `` ¿Adónde subiré?" dijo David. Y El dijo: ``A Hebrón."
Los hombres de Judá vinieron y ungieron allí a David como rey sobre la casa de Judá. Y avisaron a David: ``Fueron los hombres de Jabes de Galaad los que sepultaron a Saúl."
"Fortalezcan, pues, sus manos, y sean valientes porque Saúl su señor ha muerto, y la casa de Judá me ha ungido rey sobre ellos."
Isboset, hijo de Saúl, tenía cuarenta años cuando comenzó a reinar sobre Israel, y reinó dos años. La casa de Judá, sin embargo, siguió a David.
El tiempo que David reinó en Hebrón sobre la casa de Judá fue de siete años y seis meses.
Abner se enojó mucho por las palabras de Isboset, y dijo: `` ¿Acaso soy yo cabeza de perro que pertenece a Judá? Hoy he mostrado bondad hacia la casa de tu padre Saúl, hacia sus hermanos y hacia sus amigos, y no te he entregado en manos de David; sin embargo, tú me acusas hoy de una ofensa con esta mujer.
transferir el reino de la casa de Saúl y establecer el trono de David sobre Israel y sobre Judá desde Dan hasta Beerseba."
En Hebrón reinó sobre Judá siete años y seis meses, y en Jerusalén reinó treinta y tres años sobre todo Israel y Judá.
Y David se levantó y fue con todo el pueblo que {estaba} con él a Baala de Judá, para hacer subir desde allí el arca de Dios, la cual es llamada por el Nombre, el nombre del SEÑOR de los ejércitos, que está sobre los querubines.
Urías respondió a David: ``El arca, Israel y Judá están bajo tiendas, y mi señor Joab y los siervos de mi señor acampan a campo abierto. ¿He de ir yo a mi casa para comer, beber y acostarme con mi mujer? Por su vida y la vida de su alma, que no haré tal cosa."
~`Yo también entregué a tu cuidado la casa de tu señor y las mujeres de tu señor, y te di la casa de Israel y de Judá; y si {eso hubiera sido} poco, te hubiera añadido muchas cosas como éstas.
Entonces el rey David envió {mensaje} a los sacerdotes Sadoc y Abiatar y dijo: ``Hablen a los ancianos de Judá, y díganles: ` ¿Por qué son los últimos en hacer volver al rey a su casa, ya que la palabra de todo Israel ha llegado al rey, a su casa?
Así inclinó el corazón de todos los hombres de Judá como el de un solo hombre, y enviaron {palabra} al rey, {diciendo:} ``Regresa, tú y todos tus siervos."
Volvió el rey y llegó hasta el Jordán. Y Judá vino a Gilgal para ir al encuentro del rey, para conducir al rey al otro lado del Jordán.
Entonces Simei, hijo de Gera, el Benjamita que {era} de Bahurim, se dio prisa y descendió con los hombres de Judá al encuentro del rey David.
El rey siguió hasta Gilgal y Quimam fue con él; y todo el pueblo de Judá y también la mitad del pueblo de Israel acompañaban al rey.
Y todos los hombres de Israel vinieron al rey y le dijeron: `` ¿Por qué te han secuestrado nuestros hermanos, los hombres de Judá, y han hecho pasar el Jordán al rey y a su casa, y a todos los hombres de David con él?"
Entonces todos los hombres de Judá respondieron a los hombres de Israel: ``Porque el rey es pariente cercano nuestro. ¿Por qué, pues, están enojados por esto? ¿Acaso hemos comido algo {a costa} del rey, o se nos ha dado algo?"
Pero los hombres de Israel respondieron a los hombres de Judá: ``Nosotros tenemos diez partes en el rey, y por eso también tenemos más {derecho} que ustedes sobre David. ¿Por qué, pues, nos han despreciado? ¿No fue nuestro consejo el primero que se dio para hacer volver a nuestro rey?" Pero las palabras de los hombres de Judá fueron más duras que las palabras de los hombres de Israel.
Y todos los hombres de Israel dejaron de seguir a David, {y} siguieron a Seba, hijo de Bicri; pero los hombres de Judá permanecieron fieles a su rey, desde el Jordán hasta Jerusalén.
Entonces el rey dijo a Amasa: ``Convócame a los hombres de Judá dentro de tres días, y tú también preséntate aquí."
Amasa fue para convocar a {los hombres de} Judá, pero tardó más que el tiempo que él le había señalado.
Y llamó el rey a los Gabaonitas y les habló. (Los Gabaonitas no eran de los Israelitas, sino del remanente de los Amorreos, y los Israelitas habían hecho un pacto con ellos, pero Saúl había procurado matarlos en su celo por los Israelitas y los de Judá.)
De nuevo la ira del SEÑOR se encendió contra Israel, y provocó a David contra ellos y dijo: ``Ve, haz un censo de Israel y de Judá."
Fueron a la fortaleza de Tiro y a todas las ciudades de los Heveos y de los Cananeos, saliendo {finalmente} hacia el sur de Judá, {a} Beerseba.
Joab dio al rey la cifra del censo del pueblo: había en Israel 800,000 hombres valientes que sacaban espada, y los de Judá {eran} 500,000 hombres.