'Judá' en la Biblia
Los demás hechos de Joás que hizo, y sus valentías, y cómo peleó contra Amasías rey de Judá, ¿no está todo escrito en el libro de las crónicas de los reyes de Israel?
Y Amasías hijo de Joás rey de Judá, vivió después de la muerte de Joás hijo de Joacaz rey de Israel, quince años.
Los demás hechos de Amasías, ¿no está todo escrito en el libro de las crónicas de los reyes de Judá?
Entonces todo el pueblo de Judá tomó a Azarías, que era de dieciséis años, y lo hicieron rey en lugar de Amasías su padre.
Edificó él a Elat, y la restituyó a Judá, después que el rey durmió con sus padres.
El año quince de Amasías hijo de Joás rey de Judá, comenzó a reinar Jeroboam hijo de Joás sobre Israel en Samaria; y reinó cuarenta y un años.
Y los demás hechos de Jeroboam, y todas las cosas que hizo, y su valentía, y todas las guerras que hizo, y cómo restituyó a Judá en Israel a Damasco y a Hamat, ¿no está escrito en el libro de las crónicas de los reyes de Israel?
En el año veintisiete de Jeroboam, rey de Israel, comenzó a reinar Azarías hijo de Amasías rey de Judá.
Los demás hechos de Azarías, y todas las cosas que hizo, ¿no está todo escrito en el libro de las crónicas de los reyes de Judá?
En el año treinta y ocho de Azarías rey de Judá, reinó Zacarías hijo de Jeroboam sobre Israel seis meses.
Salum hijo de Jabes comenzó a reinar en el año treinta y nueve de Azarías rey de Judá, y reinó el tiempo de un mes en Samaria;
En el año treinta y nueve de Azarías rey de Judá, reinó Manahem hijo de Gadi sobre Israel diez años, en Samaria.
En el año cincuenta de Azarías rey de Judá, reinó Pekaía hijo de Manahem sobre Israel en Samaria, dos años.
En el año cincuenta y dos de Azarías rey de Judá, reinó Peka hijo de Remalías sobre Israel en Samaria; y reinó veinte años.
En el segundo año de Peka hijo de Remalías rey de Israel, comenzó a reinar Jotam hijo de Uzías rey de Judá.
Los demás hechos de Jotam, y todas las cosas que hizo, ¿no está escrito en el libro de las crónicas de los reyes de Judá?
En aquel tiempo comenzó el SEÑOR a enviar contra Judá a Rezín rey de Siria, y a Peka hijo de Remalías.
En el año diecisiete de Peka hijo de Remalías, comenzó a reinar Acaz hijo de Jotam rey de Judá.
Los demás hechos de Acaz que hizo, ¿no está todo escrito en el libro de las crónicas de los reyes de Judá?
En el año duodécimo de Acaz rey de Judá, comenzó a reinar Oseas hijo de Ela en Samaria sobre Israel; y reinó nueve años.
El SEÑOR protestaba entonces contra Israel y contra Judá, por mano de todos los profetas, y de todos los videntes, diciendo: Volveos de vuestros malos caminos, y guardad mis mandamientos, y mis ordenanzas, conforme a todas las leyes que yo mandé a vuestros padres, y que os he enviado por mano de mis siervos los profetas.
Y el SEÑOR se airó en gran manera contra Israel, y los quitó de delante de su rostro; que no quedó sino sólo la tribu de Judá.
Mas ni aun Judá guardó los mandamientos del SEÑOR su Dios; antes anduvieron en los estatutos de Israel, los cuales ellos mismos hicieron.
En el tercer año de Oseas hijo de Ela rey de Israel, comenzó a reinar Ezequías hijo de Acaz rey de Judá.
En el SEÑOR Dios de Israel puso su esperanza; después ni antes de él no hubo otro como él entre todos los reyes de Judá.
Y a los catorce años del rey Ezequías, subió Senaquerib rey de Asiria contra todas las ciudades fuertes de Judá, y las tomó.
Entonces Ezequías rey de Judá envió a decir al rey de Asiria en Laquis: Yo he pecado; retírate de mí, y yo aceptaré todo lo que me impusieres. Entonces el rey de Asiria impuso a Ezequías rey de Judá trescientos talentos de plata, y treinta talentos de oro.
Y si me decís: Nosotros confiamos en el SEÑOR nuestro Dios, ¿no es aquel cuyos lugares altos y altares ha quitado Ezequías, y ha dicho a Judá y a Jerusalén: Delante de este altar adoraréis en Jerusalén?
Así diréis a Ezequías rey de Judá: No te engañe tu Dios en quien tú confías, para decir: Jerusalén no será entregada en mano del rey de Asiria.
Y lo que hubiere escapado, lo que habrá quedado de la casa de Judá, volverá a echar raíz abajo, y hará fruto arriba.
Los demás hechos de Ezequías, y toda su valentía, y cómo hizo el estanque y el conducto, y metió las aguas en la ciudad, ¿no está todo escrito en el libro de las crónicas de los reyes de Judá?
Por cuanto Manasés rey de Judá ha hecho estas abominaciones, y ha hecho más mal que todo lo que hicieron los amorreos que fueron antes de él, y también ha hecho pecar a Judá con sus ídolos;
por tanto, así dice el SEÑOR Dios de Israel: He aquí yo traigo tal mal sobre Jerusalén y sobre Judá, que el que lo oyere, le retiñirán ambos oídos.
Fuera de esto, derramó Manasés mucha sangre inocente en gran manera, hasta llenar a Jerusalén de extremo a extremo, además de su pecado con que hizo pecar a Judá, para que hiciera lo malo ante los ojos del SEÑOR.
Los demás hechos de Manasés, y todas las cosas que hizo, y su pecado que cometió, ¿no está todo escrito en el libro de las crónicas de los reyes de Judá?
Los demás hechos de Amón, ¿no está todo escrito en el libro de las crónicas de los reyes de Judá?
Id, y preguntad al SEÑOR por mí, y por el pueblo, por todo Judá, acerca de las palabras de este libro que se ha hallado; porque grande ira del SEÑOR es la que ha sido encendida contra nosotros, por cuanto nuestros padres no oyeron las palabras de este libro, para hacer conforme a todo lo que nos fue escrito.
Así dice el SEÑOR: He aquí yo traigo mal sobre este lugar, y sobre los que en él moran, a saber, todas las palabras del libro que ha leído el rey de Judá;
Mas al rey de Judá que os ha enviado para que preguntaseis al SEÑOR, diréis así: Así dice el SEÑOR Dios de Israel: Por cuanto oíste las palabras del libro,
Entonces el rey envió, y juntaron a él todos los ancianos de Judá y de Jerusalén.
Y subió el rey a la Casa del SEÑOR con todos los varones de Judá, y con todos los moradores de Jerusalén, con los sacerdotes y profetas y con todo el pueblo, desde el más chico hasta el más grande; y leyó, a oídos de todos, todas las palabras del libro del pacto que había sido hallado en la Casa del SEÑOR.
Y quitó a los religiosos, que habían puesto los reyes de Judá para que quemaran incienso en los lugares altos en las ciudades de Judá, y en los alrededores de Jerusalén; y asimismo a los que quemaban incienso a Baal, al sol, y a la luna, y a los signos, y a todo el ejército del cielo.
E hizo venir todos los sacerdotes de las ciudades de Judá, y profanó los lugares altos donde los sacerdotes quemaban incienso, desde Gabaa hasta Beerseba; y derribó los lugares altos de las puertas y los que estaban a la entrada de la puerta de Josué, gobernador de la ciudad; y los que estaban a la mano izquierda, a la puerta de la ciudad.
Asimismo quitó los caballos que los reyes de Judá habían dedicado al sol a la entrada del templo del SEÑOR, junto a la cámara de Natán-melec, el eunuco, el cual tenía cargo del Parbar; y quemó al fuego los carros del sol.
Asimismo derribó el rey los altares que estaban sobre la techumbre de la sala de Acaz, que los reyes de Judá habían hecho, y los altares que había hecho Manasés en los dos atrios de la Casa del SEÑOR; y de allí corrió y arrojó el polvo en el arroyo de Cedrón.
Y después dijo: ¿Qué título es éste que veo? Y los de la ciudad le respondieron: Este es el sepulcro del varón de Dios que vino de Judá, y proclamó estas cosas que tú has hecho sobre el altar de Bet-el.
No fue hecha tal pascua desde los tiempos de los jueces que gobernaron a Israel, ni en todos los tiempos de los reyes de Israel, y de los reyes de Judá.
Asimismo quemó Josías los espiritistas, adivinos, y terafines, y todas las abominaciones que se veían en la tierra de Judá y en Jerusalén, para confirmar las palabras de la ley que estaban escritas en el libro que el sacerdote Hilcías había hallado en la Casa del SEÑOR.
Con todo eso el SEÑOR no se volvió del furor de su gran ira, con que se había encendido su ira contra Judá, por todas las provocaciones con que Manasés le había provocado a ira.
Y dijo el SEÑOR: También tengo que quitar de mi presencia a Judá, como quité a Israel, y tengo que rechazar a esta ciudad que había escogido, a Jerusalén, y a la Casa de la cual yo había dicho: Mi nombre será allí.
Los demás hechos de Josías, y todas las cosas que hizo, ¿no está todo escrito en el libro de las crónicas de los reyes de Judá?
Y el SEÑOR envió contra él ejércitos de caldeos, y ejércitos de sirios, y ejércitos de moabitas, y ejércitos de amonitas; los cuales envió contra Judá para que la destruyeran, conforme a la palabra del SEÑOR que había hablado por sus siervos los profetas.
Ciertamente vino esto contra Judá por dicho del SEÑOR, para quitarla de delante de su presencia, por los pecados de Manasés, conforme a todo lo que hizo;
Los demás hechos de Joacim, y todas las cosas que hizo, ¿no está todo escrito en el libro de las crónicas de los reyes de Judá?
Entonces salió Joaquín rey de Judá al rey de Babilonia, él, y su madre, y sus siervos, y sus príncipes, y sus eunucos; y lo prendió el rey de Babilonia en el octavo año de su reinado.
Porque la ira del SEÑOR era contra Jerusalén y Judá, hasta que los echó de delante de su presencia. Y Sedequías se rebeló contra el rey de Babilonia.
Y el rey de Babilonia los hirió y mató en Ribla, en tierra de Hamat. Así fue transportado Judá de sobre su tierra.
Y al pueblo que Nabucodonosor rey de Babilonia dejó en tierra de Judá, puso por gobernador a Gedalías, hijo de Ahicam hijo de Safán.
Y aconteció a los treinta y siete años de la transportación de Joaquín rey de Judá, en el mes duodécimo, a los veintisiete del mes, que Evil-merodac rey de Babilonia, en el primer año de su reinado, levantó la cabeza de Joaquín rey de Judá, sacándolo de la casa de la cárcel;
Estos son los hijos de Israel: Rubén, Simeón, Leví, Judá, Isacar, Zabulón,
Los hijos de Judá: Er, Onán, y Sela. Estos tres le nacieron de la hija de Súa, la cananea. Y Er, primogénito de Judá, fue malo delante del SEÑOR; y El lo mató.
Y Tamar su nuera le dio a luz a Fares y a Zera; y así todos los hijos de Judá fueron cinco.
Y Ram engendró a Aminadab; y Aminadab engendró a Naasón, príncipe de los hijos de Judá;
Los hijos de Sela, hijo de Judá: Er, padre de Leca, y Laada, padre de Maresa, y de la familia de la casa del oficio del lino en la casa de Asbea;
Los hijos de Simei fueron dieciséis, y seis hijas; mas sus hermanos no tuvieron muchos hijos, ni multiplicaron toda su familia como los hijos de Judá.
Y éstos que han sido escritos por sus nombres, vinieron en días de Ezequías rey de Judá, e hirieron sus tiendas y estancias que allí hallaron, y los destruyeron, hasta hoy, y habitaron allí en lugar de ellos; por cuanto había allí pastos para sus ganados.
Porque Judá fue el mayorazgo sobre sus hermanos, y el príncipe de ellos; mas el derecho de primogenitura fue de José).
Todos éstos fueron contados por sus generaciones en días de Jotam rey de Judá, y en días de Jeroboam rey de Israel.
Y Josadac fue cautivo cuando el SEÑOR transportó a Judá y a Jerusalén, por mano de Nabucodonosor.
que les dieron a Hebrón en tierra de Judá, y sus ejidos alrededor de ella.
Y a los hijos de Aarón dieron las ciudades de Judá de acogimiento, es a saber, a Hebrón, a Libna con sus ejidos;
Y dieron por suerte de la tribu de los hijos de Judá, y de la tribu de los hijos de Simeón, y de la tribu de los hijos de Benjamín, las ciudades que nombraron por sus nombres.
Y contado todo Israel por sus genealogías, fueron escritos en el libro de los reyes de Israel y los de Judá, y fueron transportados a Babilonia por su rebelión.
Y habitaron en Jerusalén de los hijos de Judá, de los hijos de Benjamín, de los hijos de Efraín y de Manasés:
Utai hijo de Amiud, hijo de Omri, hijo de Imri, hijo de Bani, de los hijos de Fares hijo de Judá.
Asimismo algunos de los hijos de Benjamín y de Judá vinieron a David a la fortaleza.
De los hijos de Judá que traían escudo y lanza, seis mil ochocientos, a punto de guerra.
Y subió David con todo Israel a Baala de Quiriat-jearim, que es en Judá, para pasar de allí el arca del SEÑOR Dios que habita entre los querubines, sobre la cual su nombre es invocado.
Y se halló en todo Israel que sacaban espada, once veces cien mil; y de Judá cuatrocientos setenta mil hombres que sacaban espada.
Sobre Judá, Eliú, uno de los hermanos de David. Sobre los de Isacar, Omri hijo de Micael.
Pero el SEÑOR el Dios de Israel me eligió de toda la casa de mi padre, para que perpetuamente fuera rey sobre Israel; porque de Judá escogió el capitán; y de la casa de Judá la casa de mi padre; y de entre los hijos de mi padre en mí tomó contentamiento para ponerme por rey sobre todo Israel;
Envíame, pues, ahora un hombre sabio, que sepa obrar en oro, y en plata, en bronce, y en hierro; en púrpura, y en grana, y en cárdeno, y que sepa esculpir figuras con los maestros que están conmigo en Judá y en Jerusalén, los cuales previno mi padre.
E hizo el rey de la madera de brasil gradas en la Casa del SEÑOR, y en las casas reales, y arpas y salterios para los cantores; nunca en tierra de Judá se había visto madera semejante.
Mas reinó Roboam sobre los hijos de Israel que habitaban en las ciudades de Judá.
Y cuando vino Roboam a Jerusalén, juntó la casa de Judá y de Benjamín, ciento ochenta mil hombres escogidos de guerra, para pelear contra Israel y volver el reino a Roboam.
Habla a Roboam hijo de Salomón, rey de Judá, y a todos los Israelitas que están en Judá y Benjamín, diciéndoles:
Y habitó Roboam en Jerusalén, y edificó ciudades para fortificar a Judá.
a Zora, a Ajalón, y a Hebrón, que eran en Judá y en Benjamín, ciudades fuertes.
y en todas las ciudades, escudos y lanzas. Las fortificó, pues, en gran manera, y Judá y Benjamín estuvieron de parte de él.
Porque los levitas dejaban sus ejidos y sus posesiones, y venían a Judá y a Jerusalén; pues Jeroboam y sus hijos los expulsaron para que no ejercieran el sacerdocio del SEÑOR.
Así fortificaron el reino de Judá, y confirmaron a Roboam hijo de Salomón por tres años, porque tres años anduvieron en el camino de David, y de Salomón.
Y le hizo instruir, y esparció todos sus hijos por todas las tierras de Judá y de Benjamín, y por todas las ciudades fuertes, y les dio provisiones en abundancia, y fue dado a muchas mujeres.
Y tomó las ciudades fuertes de Judá, y llegó hasta Jerusalén.
Entonces vino Semeías profeta a Roboam y a los príncipes de Judá, que estaban reunidos en Jerusalén por causa de Sisac, y les dijo: Así ha dicho el SEÑOR: Vosotros me habéis dejado, y yo también os he dejado en manos de Sisac.
Y cuando él se humilló, la ira del SEÑOR se apartó de él, para no destruirlo del todo; y también en Judá las cosas fueron bien.
A los dieciocho años del rey Jeroboam, reinó Abías sobre Judá.
Pero Jeroboam hizo girar una emboscada para venir a ellos por la espalda; y estando así delante de ellos, la emboscada estaba a espaldas de Judá.
Entonces cuando miró Judá, he aquí que tenía batalla por delante y a las espaldas; por lo que clamaron al SEÑOR, y los sacerdotes tocaron las trompetas,
y los de Judá gritaron. Y cuando ellos gritaron, Dios desbarató a Jeroboam y a todo Israel delante de Abías y de Judá.