'Luego' en la Biblia
Y luego fué abierta su boca y su lengua, y habló bendiciendo á Dios.
E inclinándose hacia ella, riñó á la fiebre; y la fiebre la dejó; y ella levantándose luego, les servía.
Entonces, extendiendo la mano, le tocó diciendo: Quiero: sé limpio. Y luego la lepra se fué de él.
Y luego, levantándose en presencia de ellos, y tomando aquel en que estaba echado, se fué á su casa, glorificando á Dios.
Y ninguno que bebiere del añejo, quiere luego el nuevo; porque dice: El añejo es mejor.
Mas el que oyó y no hizo, semejante es al hombre que edificó su casa sobre tierra, sin fundamento; en la cual el río dió con ímpetu, y luego cayó; y fué grande la ruina de aquella casa.
Y los de junto al camino, éstos son los que oyen; y luego viene el diablo, y quita la palabra de su corazón, porque no crean y se salven.
Llegándose por las espaldas, tocó el borde de su vestido; y luego se estancó el flujo de su sangre.
Entonces, como la mujer vió que no se había ocultado, vino temblando, y postrándose delante de él declaróle delante de todo el pueblo la causa por qué le había tocado, y cómo luego había sido sana.
Entonces su espíritu volvió, y se levantó luego: y él mando que le diesen de comer.
Y luego que hubo hablado, rogóle un Fariseo que comiese con él: y entrado Jesús, se sentó á la mesa.
Y vosotros semejantes á hombres que esperan cuando su señor ha de volver de las bodas; para que cuando viniere, y llamare, luego le abran.
Y decía también á las gentes: Cuando veis la nube que sale del poniente, luego decís: Agua viene; y es así.
Y puso las manos sobre ella; y luego se enderezó, y glorificaba á Dios.
Y respondiendo á ellos dijo: ¿El asno ó el buey de cuál de vosotros caerá en algún pozo, y no lo sacará luego en día de sábado?
¿Y quién de vosotros tiene un siervo que ara ó apacienta, que vuelto del campo le diga luego: Pasa, siéntate á la mesa?
Y luego vió, y le seguía, glorificando á Dios: y todo el pueblo como lo vió, dió á Dios alabanza.
Y oyendo ellos estas cosas, prosiguió Jesús y dijo una parábola, por cuanto estaba cerca de Jerusalem, y porque pensaban que luego había de ser manifestado el reino de Dios.
Empero cuando oyereis guerras y sediciones, no os espantéis; porque es necesario que estas cosas acontezcan primero: mas no luego será el fin.
Y Pedro dijo: Hombre, no sé qué dices. Y luego, estando él aún hablando, el gallo cantó.
Y dijeron todos: ¿Luego tú eres Hijo de Dios? Y él les dijo: Vosotros decís que yo soy.
Resultados de Búsqueda por Versiones
- J2000 (20)
- RV (10)
- SEV (20)
- RV1909 (21)
Resultados de Búsqueda por Libro
- Génesis (6)
- Éxodo (7)
- Levítico (20)
- Números (16)
- Deuteronomio (7)
- Josué (10)
- Jueces (20)
- Rut (5)
- 1 Samuel (42)
- 2 Samuel (36)
- 1 Reyes (15)
- 2 Reyes (31)
- 1 Crónicas (9)
- 2 Crónicas (21)
- Esdras (6)
- Nehemías (9)
- Ester (5)
- Job (6)
- Salmos (10)
- Proverbios (2)
- Eclesiastés (3)
- Cantares (1)
- Isaías (9)
- Jeremías (7)
- Ezequiel (22)
- Daniel (12)
- Amós (2)
- Habacuc (1)
- Zacarías (5)
- Malaquías (1)