'Monte' en la Biblia
Y yo envestí mi rey sobre Sion, el monte de mi santidad.
Con mi voz clamé al SEÑOR, y él me respondió desde el monte de su santidad. (Selah.)
En el SEÑOR he confiado. ¿Cómo decís a mi alma: Escapa al monte cual ave?
El SEÑOR, ¿quién habitará en tu tabernáculo? ¿Quién residirá en el monte de tu santidad?
¿Quién subirá al monte del SEÑOR? ¿Y quién estará en el lugar de su santidad?
porque tú, SEÑOR, por tu benevolencia has asentado mi monte con fortaleza. Escondiste tu rostro, fui conturbado.
Dios mío, mi alma está en mí abatida; por tanto me acordaré de ti desde la tierra del Jordán, y de los hermonitas, desde el monte de Mizar.
Envía tu luz y tu verdad; éstas me guiarán; me conducirán al monte de tu santidad, y a tus tabernáculos.
Grande es el SEÑOR y digno de ser en gran manera alabado en la ciudad de nuestro Dios, en el monte de su santidad.
Hermosa provincia, el gozo de toda la tierra es el monte de Sion, a los lados del aquilón, la ciudad del gran Rey.
Se alegrará el monte de Sion; se gozarán las hijas de Judá por tus juicios.
Porque mía es toda bestia del monte; millares de animales en los montes.
¿Por qué saltasteis, oh montes altos? Este monte amó Dios para su asiento; ciertamente el SEÑOR habitará en él para siempre.
Acuérdate de tu congregación, que adquiriste de antiguo, cuando redimiste la vara de tu heredad; este monte de Sion, donde has habitado.
Nombrado era, como si lo llevara al cielo, el que metía las hachas en el monte de la madera espesa para el edificio del santuario.
Los metió después en los términos de su santidad, en este monte que ganó su mano derecha.
Sino que escogió la tribu de Judá, el monte de Sion, al cual amó.
Como fuego que quema el monte, como llama que abrasa el bosque.
Ensalzad al SEÑOR nuestro Dios, y adorad al monte de su santidad; porque el SEÑOR nuestro Dios es santo.
Pones las tinieblas, y es la noche; en ella corren todas las bestias del monte.
Los que confían en el SEÑOR son como el monte de Sion que no deslizará; estará para siempre.