'Muchos' en la Biblia
Puesto que ya muchos han intentado poner en orden la historia de las cosas que entre nosotros son ciertísimas,
Y tendrás gozo y alegría, y muchos se regocijarán de su nacimiento.
Y a muchos de los hijos de Israel convertirá al Señor Dios de ellos.
Y los bendijo Simeón, y dijo a su madre María: He aquí, Éste es puesto para caída y levantamiento de muchos en Israel; y por señal a la que será contradicho
(Y una espada traspasará también tu misma alma), para que sean revelados los pensamientos de muchos corazones.
Y muchos leprosos había en Israel en tiempo del profeta Eliseo; pero ninguno de ellos fue limpiado, sino Naamán el sirio.
Y también salían demonios de muchos, dando voces y diciendo: Tú eres Cristo, el Hijo de Dios. Pero Él les reprendía y no les dejaba hablar; porque sabían que Él era el Cristo.
Y aconteció el siguiente día, que Él iba a la ciudad que se llama Naín, e iban con Él muchos de sus discípulos, y una gran multitud.
Y en la misma hora sanó a muchos de enfermedades y plagas, y de malos espíritus; y a muchos ciegos dio la vista.
Por lo cual te digo que sus muchos pecados le han sido perdonados; porque amó mucho; mas a quien se le perdona poco, poco ama.
Y Jesús le preguntó, diciendo: ¿Cómo te llamas? Y él dijo: Legión. Porque muchos demonios habían entrado en él.
Y había allí un hato de muchos puercos que pacían en el monte; y le rogaron que los dejase entrar en ellos; y los dejó.
Porque os digo que muchos profetas y reyes desearon ver lo que vosotros veis, y no lo vieron; y oír lo que oís, y no lo oyeron.
Pero Marta se distraía en muchos servicios; y vino a Él, diciendo: Señor, ¿no tienes cuidado que mi hermana me deja servir sola? Dile, pues, que me ayude.
Pues aun los cabellos de vuestra cabeza están todos contados. No temáis, pues; de más estima sois vosotros que muchos pajarillos.
y diré a mi alma: Alma, muchos bienes tienes almacenados para muchos años; repósate, come, bebe, regocíjate.
Y aquel siervo que sabía la voluntad de su señor y no se preparó, ni hizo conforme a su voluntad, recibirá muchos azotes.
Porfiad a entrar por la puerta angosta; porque os digo que muchos procurarán entrar, y no podrán.
Él entonces le dijo: Un hombre hizo una gran cena, y convidó a muchos.
Y no muchos días después, juntándolo todo el hijo menor, partió lejos a una provincia apartada; y allí desperdició sus bienes viviendo perdidamente.
Él entonces dijo: Mirad que no seáis engañados; porque vendrán muchos en mi nombre, diciendo: Yo soy el Cristo; y: El tiempo está cerca. No vayáis, pues, en pos de ellos.