'Ni' en la Biblia
Oh montes de Gilboa, No haya sobre ustedes rocío ni lluvia, ni campos de ofrendas; Porque allí fue deshonrado el escudo de los valientes, El escudo de Saúl, no ungido con aceite.
Asael persiguió a Abner, y no se desvió ni a derecha ni a izquierda de {ir} tras Abner.
Entonces Joab tocó la trompeta y todo el pueblo se detuvo; no persiguieron más a Israel ni continuaron peleando más.
Y él ya no pudo responder a Abner ni una palabra, porque le temía.
"Caiga {su sangre} sobre la cabeza de Joab y sobre toda la casa de su padre, y nunca falte en la casa de Joab quien padezca flujo, ni quien sea leproso, ni quien se sostenga con báculo, ni quien muera a espada, ni quien carezca de pan."
Tus manos no estaban atadas, ni tus pies puestos en grillos; Como el que cae delante de los malvados, has caído." Y todo el pueblo volvió a llorar por él.
Y dijo David aquel día: ``Todo el que quiera herir a los Jebuseos, que suba por el túnel del agua y llegue {adonde están} los cojos y los ciegos, a los cuales el alma de David aborrece." Por eso se dice: ``Ni los ciegos ni los cojos entrarán en la casa."
"Asignaré también un lugar para Mi pueblo Israel, y lo plantaré {allí} a fin de que habite en su propio lugar y no sea perturbado de nuevo, ni los malvados los aflijan más como antes,
"Oh Señor DIOS, por eso Tú eres grande; pues no hay nadie como Tú, ni hay Dios fuera de Ti, conforme a todo lo que hemos oído con nuestros oídos.
Vino un viajero {a visitar} al hombre rico Y éste no quiso tomar de sus ovejas ni de sus vacas Para preparar {comida} para el caminante que había venido a él, Sino que tomó la corderita de aquel hombre pobre y la preparó para el hombre que había venido a visitarlo."
Pero Absalón no le habló a Amnón ni bien ni mal; pues odiaba a Amnón, porque había violado a su hermana Tamar.
Estando aún ellos en el camino, llegó a David el rumor que decía: ``Absalón ha dado muerte a todos los hijos del rey, y no ha quedado ni uno de ellos."
"Y toda la familia se ha levantado contra su sierva, y dicen: `Entrega al que hirió a su hermano, para que le demos muerte por la vida de su hermano a quien mató, y destruyamos al heredero también.' Así extinguirán el ascua que me queda, no dejando a mi marido nombre ni remanente sobre la superficie de la tierra."
Y ella dijo: ``Le ruego, oh rey, que se acuerde del SEÑOR su Dios, {para que} el vengador de sangre no aumente el daño, no sea que destruya a mi hijo." Y él dijo: ``Vive el SEÑOR, ni un pelo de tu hijo caerá a tierra."
Y el rey dijo: `` ¿Está contigo la mano de Joab en todo esto?" Y la mujer respondió: ``Vive su alma, mi señor el rey, nadie {puede desviarse} ni a la derecha ni a la izquierda de todo lo que mi señor el rey ha hablado. En verdad fue su siervo Joab quien me mandó, y fue él quien puso todas estas palabras en boca de su sierva;
En todo Israel no había nadie tan bien parecido ni tan celebrado como Absalón. Desde la planta de su pie hasta su coronilla no había defecto en él.
"Así que iremos a él en cualquiera de los lugares donde se encuentre, y descenderemos sobre él como cae el rocío sobre la tierra. De él y de todos los hombres que están con él no quedará ni uno.
"Si se refugia en una ciudad, todo Israel traerá sogas a aquella ciudad y la arrastraremos al valle hasta que no se encuentre en ella ni una piedra pequeña."
"Ahora pues, levántese, salga y hable bondadosamente a sus siervos, porque juro por el SEÑOR que si no sale, ciertamente ni un solo hombre pasará la noche con usted, y esto le será peor que todo el mal que ha venido sobre usted desde su juventud hasta ahora."
Y dijo al rey: ``No me considere culpable mi señor, ni se acuerde del mal que su siervo hizo el día en que mi señor el rey salió de Jerusalén. Que el rey {no lo} guarde en su corazón.
También Mefiboset, nieto de Saúl, descendió al encuentro del rey; y no se había aseado los pies, ni recortado el bigote, ni lavado la ropa, desde el día en que el rey se marchó hasta el día en que volvió en paz.
Y se encontraba allí un hombre indigno que se llamaba Seba, hijo de Bicri, el Benjamita; y {éste} tocó la trompeta y dijo: ``No tenemos parte con David, Ni tenemos heredad con el hijo de Isaí; ¡Israel, cada uno a sus tiendas!"
Entonces los Gabaonitas le respondieron: ``No nos importa la plata ni el oro de Saúl o de su casa, ni nos corresponde dar muerte a ningún hombre en Israel." ``Haré por ustedes lo que digan," les dijo el rey.
Y Rizpa, hija de Aja, tomó tela de cilicio y lo tendió para sí sobre la roca, desde el comienzo de la cosecha hasta que llovió del cielo sobre ellos; y no permitió que las aves del cielo se posaran sobre ellos de día ni las fieras del campo de noche.