'No' en la Biblia
Sesán no tuvo hijos, sino hijas. Sesán tenía un siervo Egipcio cuyo nombre {era} Jarha.
Jabes invocó al Dios de Israel, diciendo: `` ¡Oh, si en verdad me bendijeras, ensancharas mi territorio, y Tu mano estuviera conmigo y {me} guardaras del mal para que no me causara dolor!" Y Dios le concedió lo que pidió.
Simei tuvo dieciséis hijos y seis hijas, pero sus hermanos no tuvieron muchos hijos, ni se multiplicaron todas sus familias como los hijos de Judá.
Hijos de Rubén, primogénito de Israel (aunque él era el primogénito, como profanó la cama de su padre, sus derechos de primogenitura fueron dados a los hijos de José, hijo de Israel; de modo que Rubén no está inscrito en la genealogía conforme a los derechos de primogenitura.
Entonces Saúl dijo a su escudero: ``Saca tu espada y traspásame con ella, no sea que vengan estos incircuncisos y hagan burla de mí." Pero su escudero no quiso, porque tenía mucho miedo. Por lo cual Saúl tomó su espada y se echó sobre ella.
Así murió Saúl por la transgresión que cometió contra el SEÑOR por no haber guardado la palabra del SEÑOR, y también porque consultó y pidió consejo a una adivina,
y no consultó al SEÑOR. Por tanto, El le quitó la vida y transfirió el reino a David, hijo de Isaí.
Los habitantes de Jebús dijeron a David: ``Usted no entrará aquí." Pero David capturó la fortaleza de Sion, es decir, la ciudad de David.
Entonces los tres se abrieron paso por el campamento de los Filisteos, y sacando agua del pozo de Belén que {estaba} junto a la puerta, {se la} llevaron y {la} trajeron a David; pero David no quiso beberla, sino que la derramó para el SEÑOR,
y dijo: ``Lejos esté de mí que haga tal cosa delante de mi Dios. ¿Beberé la sangre de estos hombres {que fueron} con riesgo de sus vidas? Porque con riesgo de sus vidas la trajeron." Por eso no quiso beberla. Estas cosas hicieron los tres valientes.
De los treinta en el segundo {grupo,} él fue el más distinguido y llegó a ser capitán de ellos; pero no igualó a los tres {primeros.}
El fue el más distinguido entre los treinta, pero no igualó a los tres; y David lo puso sobre su guardia.
Y David salió a su encuentro, y les dijo: ``Si vienen a mí en paz para ayudarme, mi corazón se unirá con ustedes; pero si {vienen} para entregarme a mis enemigos, ya que no hay maldad en mis manos, que el Dios de nuestros padres {lo} vea y decida."
Algunos de Manasés se pasaron también a David, cuando éste iba con los Filisteos a la batalla contra Saúl. Pero {éstos} no les ayudaron, porque los príncipes de los Filisteos, después de tomar consejo, despidieron a David, diciendo: ``A costa de nuestras cabezas se pasará a su señor Saúl."
y traigamos a nuestro lado el arca de nuestro Dios, porque no la consultamos en los días de Saúl."
Así que David no llevó consigo el arca a la ciudad de David, sino que la hizo llevar a la casa de Obed Edom el Geteo.
David volvió a consultar a Dios, y Dios le dijo: ``No subas contra ellos; dales un rodeo por detrás, y sal a ellos frente a las balsameras.
"Puesto que ustedes no {la llevaron} la primera vez, el SEÑOR nuestro Dios estalló {en ira} contra nosotros, ya que no Lo buscamos conforme a la ordenanza."
El no permitió que nadie los oprimiera, Y por amor a ellos reprendió a reyes, {diciendo:}
``No toquen a Mis ungidos, Ni hagan mal a Mis profetas."
``Ve y dile a Mi siervo David: `Así dice el SEÑOR: ``Tú no Me edificarás casa para que Yo habite en ella.
"No he morado en una casa desde el día en que hice subir a Israel hasta hoy, sino que he ido de tienda en tienda y de morada {en morada}.
"En todos los lugares donde he andado con todo Israel, ¿he hablado alguna palabra con alguien de los jueces de Israel, a quienes mandé apacentar a Mi pueblo, diciéndoles: `Por qué ustedes no Me han edificado una casa de cedro?'"'
"Asignaré también un lugar para Mi pueblo Israel, y lo plantaré {allí} para que habite en su propio lugar y no sea removido más. Tampoco los malvados los oprimirán más como antes,
"Yo seré padre para él y él será hijo para Mí; y no quitaré de él Mi misericordia, como la quité de aquél que estaba antes de ti.
"Oh SEÑOR, no hay nadie como Tú, ni hay Dios fuera de Ti, conforme a todo lo que hemos oído con nuestros oídos.
los príncipes de los Amonitas dijeron a Hanún: `` ¿Cree usted que David está honrando a su padre porque le ha enviado consoladores? ¿No han venido a usted sus siervos para reconocer, para destruir y para espiar la tierra?"
Cuando los siervos de Hadad Ezer vieron que habían sido derrotados por Israel, hicieron la paz con David y le sirvieron. Y los Arameos no quisieron ayudar más a los Amonitas.
Pero Joab dijo: ``Añada el SEÑOR a Su pueblo cien veces más de lo que son. Pero, oh rey, señor mío, ¿no son todos ellos siervos de mi señor? ¿Por qué procura esto mi señor? ¿Por qué ha de ser él motivo de culpa para Israel?"
Pero entre ellos no hizo un censo de Leví ni de Benjamín, porque la orden del rey era detestable para Joab.
``Estoy muy angustiado," David respondió a Gad. ``Te ruego que me dejes caer en manos del SEÑOR, porque Sus misericordias son muy grandes; pero no caiga yo en manos de hombre."
Y David dijo a Dios: `` ¿No soy yo el que ordenó enumerar al pueblo? Ciertamente yo soy el que ha pecado y obrado muy perversamente, pero estas ovejas, ¿qué han hecho? Oh SEÑOR, Dios mío, Te ruego que Tu mano sea contra mí y contra la casa de mi padre, pero no contra Tu pueblo, para que no haya plaga entre ellos."
Pero el rey David dijo a Ornán: ``No, sino que ciertamente {lo} compraré por su justo precio; porque no tomaré para el SEÑOR lo que es tuyo, ni ofreceré un holocausto que no me cueste nada."
Pero David no pudo ir {allá,} delante del altar, para consultar a Dios, porque estaba aterrado a causa de la espada del ángel del SEÑOR.
"Pero vino a mí la palabra del SEÑOR, diciendo: `Tú has derramado sangre en abundancia, y has emprendido grandes guerras. No edificarás una casa a Mi nombre, porque has derramado mucha sangre en la tierra delante de Mí.
"Entonces prosperarás, si te cuidas de observar los estatutos y ordenanzas que el SEÑOR ordenó a Moisés para Israel. Esfuérzate y sé valiente, no temas ni te acobardes.
"Del oro, de la plata, del bronce y del hierro no hay límite. Levántate y trabaja, y que el SEÑOR sea contigo."
`` ¿No está con ustedes el SEÑOR su Dios? ¿Y no les ha dado paz por todos lados? Pues El ha entregado en mi mano a los habitantes de la tierra, y la tierra está sometida delante del SEÑOR y delante de Su pueblo.
Jahat fue el primero y Zina el segundo; pero Jeús y Bería no tuvieron muchos hijos, por lo cual constituyeron una casa paterna, un grupo.
Y el hijo de Eliezer fue Rehabías el jefe; y Eliezer no tuvo más hijos, pero los hijos de Rehabías fueron muchos.
Y Eleazar murió y no tuvo hijos, sino sólo hijas, de modo que sus parientes, los hijos de Cis, las tomaron {por mujeres.}
"Y además los Levitas ya no tendrán que llevar el tabernáculo y todos los utensilios para su servicio."
Pero Nadab y Abiú murieron antes que su padre y no tuvieron hijos. De modo que Eleazar e Itamar sirvieron como sacerdotes.
También Hosa, {uno} de los hijos de Merari, tuvo hijos: Simri el primero (aunque no era el primogénito, su padre lo hizo el primero),
Pero David no enumeró a los de veinte años para abajo, porque el SEÑOR había dicho que El multiplicaría a Israel como las estrellas del cielo.
Joab, hijo de Sarvia, había comenzado a contar{los,} pero no acabó; y debido a esto, la ira cayó sobre Israel, y el número no fue incluido en el registro de las crónicas del rey David.
"Pero Dios me dijo: `No edificarás casa a Mi nombre, porque eres hombre de guerra y has derramado mucha sangre.'
Entonces David dijo a su hijo Salomón: ``Esfuérzate, sé valiente y haz {la obra;} no temas ni te acobardes, porque el SEÑOR Dios, mi Dios, está contigo. El no te fallará ni te abandonará, hasta que toda la obra del servicio de la casa del SEÑOR sea acabada.
Entonces el rey David dijo a toda la asamblea: ``Mi hijo Salomón, el único que Dios ha escogido, es aún joven y sin experiencia, y la obra es grande; porque el templo no es para hombre, sino para el SEÑOR Dios.
"Porque somos extranjeros y peregrinos delante de Ti, como lo fueron todos nuestros padres; como una sombra son nuestros días sobre la tierra, y no hay esperanza.