'Prendió' en la Biblia

Estas palabras las pronunció en el {lugar del} tesoro, cuando enseñaba en el templo; y nadie le prendió, porque todavía no había llegado su hora.

Entonces el comandante llegó y lo prendió, y ordenó que lo ataran con dos cadenas; y preguntaba quién era y qué había hecho.

Pero cuando Pablo recogió una brazada de leña y la echó al fuego, una víbora salió huyendo del calor y se le prendió en la mano.

Prendió al dragón, la serpiente antigua, que es el Diablo y Satanás, y lo ató por mil años;