'Rostro' en la Biblia
Abner volvió a decirle a Asael: ``Deja de perseguirme. ¿Por qué he de derribarte en tierra? ¿Cómo podría entonces levantar mi rostro ante tu hermano Joab?"
Y David respondió: ``Muy bien. Haré pacto contigo, pero una cosa demando de ti: No verás mi rostro a menos de que cuando vengas a verme traigas a Mical, la hija de Saúl."
Y Mefiboset, hijo de Jonatán, hijo de Saúl, vino a David, y cayendo sobre su rostro, se postró. Y David dijo: ``Mefiboset." ``Su siervo," respondió él.
Cuando la mujer de Tecoa habló al rey, cayó sobre su rostro en tierra, y postrándose, dijo: `` ¡Ayúdeme, oh rey!"
Joab cayó rostro en tierra, y postrándose, bendijo al rey. Entonces Joab dijo: ``Oh rey mi señor, hoy su siervo sabe que he hallado gracia ante sus ojos, puesto que el rey ha concedido la petición de su siervo."
Pero el rey dijo: ``Que vuelva a su casa y no vea mi rostro." Y Absalón volvió a su casa, y no vio el rostro del rey.
Absalón residió dos años completos en Jerusalén sin ver el rostro del rey.
Y Absalón respondió a Joab: ``Mira, mandé a decirte: `Ven acá, para enviarte al rey a decir{le:} `` ¿Para qué vine de Gesur? Mejor me hubiera sido estar aún allá."' Ahora pues, vea yo el rostro del rey; y si hay iniquidad en mí, que me dé muerte."
Cuando Joab vino al rey y le hizo saber {esto,} llamó a Absalón, quien vino ante el rey y se postró sobre su rostro en tierra delante del rey. Y el rey besó a Absalón.
Y Ahimaas dio voces, y dijo al rey: ``Todo está bien." Se postró rostro en tierra delante del rey, y dijo: ``Bendito es el SEÑOR su Dios, que ha entregado a los hombres que levantaron sus manos contra mi señor el rey."
Y el rey con su rostro cubierto, clamaba en alta voz: `` ¡Oh hijo mío Absalón, oh Absalón, hijo mío, hijo mío!"
Entonces Joab entró en la casa del rey, y dijo: ``Hoy usted ha cubierto de vergüenza el rostro de todos sus siervos que han salvado hoy su vida, la vida de sus hijos e hijas, la vida de sus mujeres y la vida de sus concubinas,
Y Arauna miró y vio al rey y a sus siervos que venían hacia él; y saliendo Arauna, se postró rostro en tierra delante del rey.