'Visión' en la Biblia
Después de estas cosas vino la palabra de Jehová a Abram en visión, diciendo: No temas, Abram; yo soy tu escudo, y soy tu galardón sobremanera grande.
Y Moisés dijo: Iré yo ahora, y veré esta grande visión, por qué causa la zarza no se quema.
Y Él les dijo: Oíd ahora mis palabras: Si entre vosotros hubiere profeta de Jehová, yo le apareceré en visión, en sueños hablaré con él.
dijo el que oyó las palabras de Dios, el que vio la visión del Omnipotente, cayendo en éxtasis, pero con sus ojos abiertos:
dijo el que oyó las palabras de Dios y entendió el conocimiento del Altísimo; el que vio la visión del Omnipotente, cayendo en éxtasis, pero con sus ojos abiertos:
Y el joven Samuel ministraba a Jehová delante de Elí; y la palabra de Jehová era preciada en aquellos días; pues no había visión manifiesta.
Y Samuel estuvo acostado hasta la mañana, y abrió las puertas de la casa de Jehová. Y Samuel temía descubrir la visión a Elí.
Conforme a todas estas palabras, y conforme a toda esta visión, así habló Natán a David.
Conforme a todas estas palabras, y conforme a toda esta visión, así habló Natán a David.
Como sueño volará, y no será hallado; y se disipará como visión nocturna.
Por sueño de visión nocturna, cuando el sueño cae sobre los hombres, cuando se adormecen sobre el lecho;
Entonces hablaste en visión a tu santo, y dijiste: He puesto el socorro sobre uno que es poderoso; he enaltecido a un escogido de mi pueblo.
Donde no hay visión el pueblo perece; mas el que guarda la ley, es bienaventurado.
Visión de Isaías hijo de Amoz, la cual vio acerca de Judá y Jerusalén, en días de Uzías, Jotam, Acaz y Ezequías, reyes de Judá.
Visión dura me ha sido mostrada. El prevaricador prevarica, y el destructor destruye. Sube, oh Elam; sitia, oh Media. Todo su gemido hice cesar.
Carga del valle de la visión. ¿Qué tienes ahora, que toda tú te has subido sobre los terrados?
Porque día es de alboroto, de atropello y de confusión, de parte del Señor, Jehová de los ejércitos en el valle de la visión, para derribar el muro, y clamar a las montañas.
Mas también éstos erraron con el vino; y con el licor se entontecieron; el sacerdote y el profeta han errado a causa del licor, fueron trastornados por el vino, han divagado a causa del licor, erraron en la visión, tropezaron en el juicio.
Y será como sueño de visión nocturna la multitud de todas las naciones que pelean contra Ariel, y todos los que pelean contra ella y su fortaleza, y los que la ponen en apretura.
Y os será toda visión como palabras de libro sellado, el cual si dieren al que sabe leer, y le dijeren: Lee ahora esto; él dirá: No puedo, porque está sellado.
Ve, pues, ahora, y escribe esta visión en una tabla delante de ellos, y anótala en un libro, para que quede hasta el día postrero, para siempre por todos los siglos.
Me dijo entonces Jehová: Los profetas profetizan mentiras en mi nombre: Yo no los envié, ni les mandé, ni les hablé; os profetizan visión mentirosa, adivinación y vanidad, y el engaño de su corazón.
Así dice Jehová de los ejércitos: No escuchéis las palabras de los profetas que os profetizan: os hacen vanos; hablan visión de su corazón, no de la boca de Jehová.
Sus puertas fueron echadas por tierra, destruyó y quebrantó sus cerrojos: Su rey y sus príncipes están entre los gentiles donde no hay ley; sus profetas tampoco hallaron visión de Jehová.
Como la apariencia del arco iris que está en las nubes el día que llueve, así era el parecer del resplandor alrededor. Ésta fue la visión de la semejanza de la gloria de Jehová. Y luego que yo la vi, caí sobre mi rostro, y oí la voz de uno que hablaba.
Porque el que vende no volverá a lo vendido, aunque queden vivos: porque la visión sobre toda su multitud no será revocada; y ninguno podrá, a causa de su iniquidad, amparar su vida.
Y he aquí, allí estaba la gloria del Dios de Israel, como la visión que yo había visto en el campo.
Luego me levantó el Espíritu, y me volvió a llevar en visión del Espíritu de Dios a la tierra de los caldeos, a los cautivos. Y se fue de mí la visión que había visto.
Hijo de hombre, ¿qué refrán es éste que tenéis vosotros en la tierra de Israel, diciendo: Se prolongan los días, y toda visión desaparece?
Diles por tanto: Así dice Jehová el Señor: Haré cesar este refrán, y no repetirán más este dicho en Israel. Diles pues: Se han acercado aquellos días, y la palabra de toda visión.
Porque no habrá más visión vana, ni habrá adivinación de lisonjeros en medio de la casa de Israel.
Hijo de hombre, he aquí que los de la casa de Israel dicen: La visión que éste ve es para muchos días, y para lejanos tiempos profetiza éste.
¿No habéis visto visión vana, y no habéis dicho adivinación de mentira, por cuanto decís: Dice Jehová; no habiendo yo hablado?
los profetas de Israel que profetizan a Jerusalén, y ven para ella visión de paz, no habiendo paz, dice Jehová el Señor.
Y el aspecto de la visión que vi era como aquella visión que vi cuando vine para destruir la ciudad; y las visiones eran como la visión que vi junto al río de Quebar; y caí sobre mi rostro.
Y a estos cuatro muchachos Dios les dio conocimiento e inteligencia en todas las letras y sabiduría; mas Daniel tuvo entendimiento en toda visión y sueños.
Entonces el secreto fue revelado a Daniel en visión de noche; por lo cual bendijo Daniel al Dios del cielo.
Habló Daniel y dijo: Veía yo en mi visión de noche, y he aquí que los cuatro vientos del cielo combatían en el gran mar.
Miraba yo en la visión de la noche, y he aquí en las nubes del cielo uno como el Hijo del Hombre que venía, y llegó hasta el Anciano de días, y le hicieron llegar delante de Él.
En el año tercero del reinado del rey Belsasar, me apareció una visión a mí, Daniel, después de aquella que me había aparecido antes.
Vi en visión, y sucedió cuando la vi, que yo estaba en Susán, que es cabecera del reino en la provincia de Elam; vi, pues, en visión, estando junto al río Ulai.
Y oí a un santo que hablaba; y otro de los santos dijo a aquél que hablaba: ¿Hasta cuándo durará la visión del continuo sacrificio, y la prevaricación asoladora que pone el santuario y el ejército para ser hollados?
Y aconteció que mientras yo Daniel consideraba la visión, y buscaba su significado, he aquí uno con apariencia de hombre se puso delante de mí.
Y oí una voz de hombre entre las riberas de Ulai, que gritó y dijo: Gabriel, enseña a éste la visión.
Vino luego cerca de donde yo estaba; y con su venida me asombré, y caí sobre mi rostro. Pero él me dijo: Entiende, hijo de hombre, porque la visión será para el tiempo del fin.
Y la visión de la tarde y la mañana que está dicha, es verdadera; y tú guarda la visión, porque es para muchos días.
Y yo Daniel fui quebrantado, y estuve enfermo algunos días; y cuando convalecí, atendí el asunto del rey; mas estaba espantado acerca de la visión, y no había quien la entendiese.
y todavía estaba yo hablando en oración, cuando aquel varón Gabriel, al cual había visto en visión al principio, volando con presteza, me tocó como a la hora del sacrificio de la tarde.
Al principio de tus súplicas fue dada la orden, y yo he venido para enseñártela, porque tú eres muy amado. Entiende, pues, el asunto, y considera la visión.
Setenta semanas están determinadas sobre tu pueblo y sobre tu santa ciudad, para acabar la prevaricación, y concluir el pecado, y expiar la iniquidad; y para traer la justicia eterna, y sellar la visión y la profecía, y ungir al Santo de los santos.
En el tercer año de Ciro rey de Persia, fue revelada palabra a Daniel, cuyo nombre era Beltsasar; y la palabra era verdadera, mas el tiempo fijado era largo; pero él comprendió la palabra, y tuvo inteligencia en la visión.
Y sólo yo, Daniel, vi aquella visión, y no la vieron los hombres que estaban conmigo; sino que cayó sobre ellos un gran temor y huyeron a esconderse.
Quedé, pues, yo solo, y vi esta gran visión, y no quedó fuerza en mí; antes mi fuerza se me cambió en debilidad, sin retener vigor alguno.
Yo he venido para hacerte saber lo que ha de venir a tu pueblo en los postreros días; porque la visión es aún para muchos días;
Mas he aquí, como una semejanza de hijo de hombre tocó mis labios. Entonces abrí mi boca, y hablé, y dije a aquel que estaba delante de mí: Señor mío, con la visión se revolvieron mis dolores sobre mí, y no me quedó fuerza.
Visión de Abdías. Así dice Jehová el Señor en cuanto a Edom: Hemos oído el pregón de Jehová, y mensajero es enviado a las gentes. Levantaos, y levantémonos contra ella en batalla.
Por tanto, noche será para vosotros, no tendréis visión; os será oscuridad, de manera que no adivinéis, y sobre los profetas se pondrá el sol, y el día se oscurecerá sobre ellos.
Carga de Nínive. Libro de la visión de Nahúm de Elcos.
Y Jehová me respondió, y dijo: Escribe la visión, y declárala en tablas, para que corra el que leyere en ella.
Aunque la visión tardará aún por tiempo, mas al fin hablará, y no mentirá; aunque se tardare, espéralo, que sin duda vendrá; no tardará.
Y será en aquel tiempo, que todos los profetas se avergonzarán de su visión cuando profetizaren; y nunca más se vestirán de manto velloso para mentir.
Resultados de Búsqueda por Versiones
Resultados de Búsqueda por Libro
Artículos Relacionados
- Aquellos que vieron Visiones
- Debilidad en la división
- Dios, revelación de
- Divisiones de opinión
- Divisiones, contrariamente a
- División de las aguas
- Gabriel
- La división entre los cristianos
- La primera visión de Cristo
- La voz de Dios
- Las previsiones meteorológicas
- Las subdivisiones
- No Visiones
- Oscurecimiento de la visión
- Previsión
- Provisión de Dios
- Provisión de día y de noche
- Provisión de noche
- Provisión para el cuerpo
- Sueños y visiones en la escritura
- Visiones
- Visiones de Dios
- Visiones de noche
- Visiones falsas
- Visiones proféticas
- Visión
- Visión defectuosa
- La división
- La división de la comida
- La división del botín
- La división del mar
- La provisión de Dios para los ancianos
- La provisión de los utensilios del templo
- La revelación a través de las visiones y los sueños
- La visión celestial
- La visión de inspiración de Jesús
- La visión de inspiración de Juan
- La visión dichosa en el cielo