Éxodo 33:18
El entonces dijo: Ruégote que me muestres tu gloria.
Éxodo 33:20
Dijo más: No podrás ver mi rostro: porque no me verá hombre, y vivirá.
1 Timoteo 6:16
Quien sólo tiene inmortalidad, que habita en luz inaccesible; á quien ninguno de los hombres ha visto ni puede ver: al cual sea la honra y el imperio sempiterno. Amén.
Salmos 4:6
Muchos dicen: ¿Quién nos mostrará el bien? Alza sobre nosotros, oh Jehová, la luz de tu rostro.
Juan 1:18
A Dios nadie le vió jamás: el unigénito Hijo, que está en el seno del Padre, él le declaró.
2 Corintios 3:18
Por tanto, nosotros todos, mirando á cara descubierta como en un espejo la gloria del Señor, somos transformados de gloria en gloria en la misma semejanza, como por el Espíritu del Señor.
2 Corintios 4:6
Porque Dios, que mandó que de las tinieblas resplandeciese la luz, es el que resplandeció en nuestros corazones, para iluminación del conocimiento de la gloria de Dios en la faz de Jesucristo.
Tito 2:13
Esperando aquella esperanza bienaventurada, y la manifestación gloriosa del gran Dios y Salvador nuestro Jesucristo.
Apocalipsis 21:23
Y la ciudad no tenía necesidad de sol, ni de luna, para que resplandezcan en ella: porque la claridad de Dios la iluminó, y el Cordero era su lumbrera.
Tesoro del Conocimiento Bíblico no añadido