136 casos

'Contra' en la Biblia

Y yo pronunciaré mis juicios contra ellos por toda su maldad, porque me abandonaron, ofrecieron sacrificios a otros dioses y adoraron la obra de sus manos.

He aquí, yo te he puesto hoy como ciudad fortificada, como columna de hierro y como muro de bronce contra toda esta tierra: contra los reyes de Judá, sus príncipes, sus sacerdotes y el pueblo de la tierra.

Los sacerdotes no dijeron: `` ¿Dónde está el SEÑOR?" Los que se ocupaban de la ley no me conocieron, los gobernantes se rebelaron contra mí, y los profetas profetizaban por Baal, y andaban tras cosas que no aprovechan.

Contra él rugieron los leoncillos, rugieron fuertemente, y han hecho de su tierra una desolación; sus ciudades están quemadas, sin habitantes.

¿Por qué contendéis conmigo? Todos vosotros os habéis rebelado contra mí --declara el SEÑOR.

``Sólo reconoce tu iniquidad, pues contra el SEÑOR tu Dios te has rebelado, has repartido tus favores a los extraños bajo todo árbol frondoso, y no has obedecido mi voz" --declara el SEÑOR.

Acostémonos en nuestra vergüenza, y que nos cubra nuestra humillación; porque hemos pecado contra el SEÑOR nuestro Dios, nosotros y nuestros padres desde nuestra juventud hasta hoy, y no hemos obedecido la voz del SEÑOR nuestro Dios.

un viento demasiado fuerte para esto, vendrá a mi mandato. Ahora yo pronunciaré juicios contra ellos.

Avisad{lo} a las naciones: ¡Aquí están! Proclamad sobre Jerusalén: ``Sitiadores vienen de tierra lejana y alzan sus voces contra las ciudades de Judá.

``Como guardas de campo están apostados contra ella por todos lados, porque se ha rebelado contra mí" --declara el SEÑOR.

He aquí, voy a traer de lejos una nación contra vosotros, oh casa de Israel --declara el SEÑOR. Es una nación fuerte, es una nación antigua, una nación cuya lengua no conoces, y no podrás entender lo que hable.

Preparad guerra contra ella; levantaos y ataquemos al mediodía. ¿Ay de nosotros, porque el día declina, porque se extienden las sombras del anochecer!

Porque así dice el SEÑOR de los ejércitos: Cortad sus árboles, y poned sitio contra Jerusalén. Esta es la ciudad que ha de ser castigada, todo dentro de ella es opresión.

Y sus casas serán entregadas a otros, juntamente con sus campos y sus mujeres; porque extenderé mi mano contra los habitantes de esta tierra --declara el SEÑOR.

Empuñan arco y jabalina, crueles son, no tienen misericordia; sus voces braman como el mar, y montan a caballo como hombres dispuestos para la guerra contra ti, hija de Sion.

¿Por qué estamos {aún} sentados? Congregaos, y entremos en las ciudades fortificadas, y perezcamos allí, pues el SEÑOR nuestro Dios nos hace perecer y nos ha dado a beber agua envenenada, porque hemos pecado contra el SEÑOR.

Porque he aquí, yo envío contra vosotros serpientes, áspides contra los cuales no hay encantamiento, y os morderán --declara el SEÑOR.

El SEÑOR de los ejércitos, que te plantó, ha decretado una calamidad contra ti a causa de la maldad que la casa de Israel y la casa de Judá han hecho, provocándome al ofrecer sacrificios a Baal.

Pero yo era como un cordero manso llevado al matadero, y no sabía que tramaban intrigas contra mí, {diciendo:} Destruyamos el árbol con su fruto, y cortémoslo de la tierra de los vivientes, para que no se recuerde más su nombre.

Mas, oh SEÑOR de los ejércitos, que juzgas rectamente, que examinas los sentimientos y el corazón, vea yo tu venganza contra ellos, porque a ti he expuesto mi causa.

Mi heredad vino a ser para mí como león en la selva; rugió contra mí; por tanto, la aborrecí.

¿Es acaso mi heredad para mí como ave de rapiña de varios colores? ¿Están las aves de rapiña por todos lados contra ella? Id, reunid a todas las bestias del campo, traedlas para que {la} devoren.

y los estrellaré unos contra otros, los padres con los hijos por igual' --declara el SEÑOR. `No tendré piedad, ni lástima, ni compasión, {para dejar} de destruirlos.'"

Aunque nuestras iniquidades testifican contra nosotros, oh SEÑOR, obra por amor de tu nombre. En verdad han sido muchas nuestras apostasías, contra ti hemos pecado.

Reconocemos, oh SEÑOR, nuestra impiedad, la iniquidad de nuestros padres, pues hemos pecado contra ti.

Por mí sus viudas serán más numerosas que la arena de los mares. Traeré contra la madre de sus jóvenes, al destructor en pleno mediodía; de repente traeré sobre ella angustia y pavor.

Y te pondré para este pueblo por muralla de bronce inexpugnable; lucharán contra ti, pero no te vencerán, porque contigo estoy yo para salvarte y librarte --declara el SEÑOR.

Y sucederá que cuando anuncies a este pueblo todas estas palabras, ellos te dirán: `` ¿Por qué el SEÑOR ha pronunciado toda esta gran calamidad contra nosotros? ¿Cuál es nuestra iniquidad y cuál es nuestro pecado que hemos cometido contra el SEÑOR nuestro Dios?"

En un momento yo puedo hablar contra una nación o contra un reino, de arrancar, de derribar y de destruir;

pero si esa nación contra la que he hablado se vuelve de su maldad, me arrepentiré del mal que pensaba traer sobre ella.

Ahora pues, habla a los hombres de Judá y a los habitantes de Jerusalén, diciendo: ``Así dice el SEÑOR: `He aquí, estoy preparando una calamidad contra vosotros y tramando un plan contra vosotros. Volveos, pues, cada uno de su mal camino y enmendad vuestros caminos y vuestras obras.'"

Entonces dijeron: Venid y urdamos planes contra Jeremías. Ciertamente la ley no le faltará al sacerdote, ni el consejo al sabio, ni la palabra al profeta. Venid e hirámoslo con la lengua, y no hagamos caso a ninguna de sus palabras.

Pero tú, oh SEÑOR, conoces todos sus planes de muerte contra mí. No perdones su iniquidad ni borres de tu vista su pecado; sean derribados delante de ti, en el tiempo de tu ira actúa contra ellos.

Así dice el SEÑOR de los ejércitos, el Dios de Israel: ``He aquí, voy a traer sobre esta ciudad y sobre todas sus aldeas la calamidad que he declarado contra ella, porque han endurecido su cerviz para no escuchar mis palabras."

Porque he oído las murmuraciones de muchos: ¿Terror por todas partes! ¿Denunciad{le,} denunciémosle! Todos mis amigos de confianza, esperando mi caída, {dicen:} Tal vez será persuadido, prevaleceremos contra él y tomaremos de él nuestra venganza.

``Así dice el SEÑOR, Dios de Israel: `He aquí, yo haré volver atrás las armas de guerra que {tenéis} en vuestras manos, con las cuales peleáis contra el rey de Babilonia y contra los caldeos que os sitian fuera de los muros, y las reuniré en medio de esta ciudad.

`Y yo pelearé contra vosotros con mano extendida y brazo poderoso, y con ira, furor y gran enojo.

`Porque he puesto mi rostro contra esta ciudad para mal, y no para bien' --declara el SEÑOR--. `Será entregada en manos del rey de Babilonia, quien le prenderá fuego.'"

`He aquí, yo estoy contra ti, moradora del valle, roca de la llanura' --declara el SEÑOR-- `los que decís: `` ¿Quién descenderá contra nosotros? ¿Quién entrará en nuestras moradas?"

Designaré contra ti destructores, cada uno con sus armas, y cortarán tus cedros más selectos y {los} echarán al fuego.

Por tanto, he aquí, estoy contra los profetas --declara el SEÑOR-- que se roban mis palabras el uno al otro.

He aquí, estoy contra los profetas --declara el SEÑOR-- que usan sus lenguas y dicen: ``{El} {S{EÑOR}} declara."

He aquí, estoy contra los que profetizan sueños falsos --declara el SEÑOR-- y los cuentan y hacen errar a mi pueblo con sus mentiras y sus presunciones, cuando yo no los envié ni les di órdenes, ni son de provecho alguno para este pueblo --declara el SEÑOR.

he aquí, mandaré a buscar a todas las familias del norte --declara el SEÑOR-- y a Nabucodonosor, rey de Babilonia, siervo mío, y los traeré contra esta tierra, contra sus habitantes y contra todas estas naciones de alrededor; los destruiré por completo y los haré objeto de horror, de burla y de eterna desolación.

``Y traeré sobre esa tierra todas las palabras que he hablado contra ella, todo lo que está escrito en este libro que Jeremías ha profetizado contra todas las naciones.

`Porque he aquí que comienzo a causar mal en {esta} ciudad que se llama por mi nombre, ¿y quedaréis vosotros sin castigo alguno? No quedaréis sin castigo, porque llamo a la espada contra todos los habitantes de la tierra' --declara el SEÑOR de los ejércitos."

Tú, pues, profetizarás contra ellos todas estas palabras, y les dirás: ``El SEÑOR rugirá desde lo alto, y dará su voz desde su santa morada; rugirá fuertemente contra su rebaño. Dará gritos como los que pisan {las uvas} contra todos los habitantes de la tierra.

``Ha llegado el estruendo hasta el fin de la tierra, porque el SEÑOR tiene un pleito contra las naciones; entra en juicio contra toda carne; a los impíos, los entrega a la espada" --declara el SEÑOR.

¿Por qué has profetizado en nombre del SEÑOR, diciendo: ``Esta casa será como Silo y esta ciudad quedará desolada sin habitante alguno?" Y todo el pueblo se congregó contra Jeremías en la casa del SEÑOR.

Y los sacerdotes y los profetas hablaron a los jefes y a todo el pueblo, diciendo: ¡Sentencia de muerte para este hombre!, porque ha profetizado contra esta ciudad, como habéis oído con vuestros propios oídos.

Entonces Jeremías habló a todos los jefes y a todo el pueblo, diciendo: El SEÑOR me ha enviado a profetizar contra esta casa y contra esta ciudad todas las palabras que habéis oído.

¿Acaso le dieron muerte Ezequías, rey de Judá, y todo Judá? ¿No temió él al SEÑOR y suplicó el favor del SEÑOR, y el SEÑOR se arrepintió del mal que había pronunciado contra ellos? Nosotros, pues, estamos cometiendo un gran mal contra nosotros mismos.

Y hubo también un hombre que profetizó en el nombre del SEÑOR, Urías, hijo de Semaías de Quiriat-jearim, el cual profetizó contra esta ciudad y contra esta tierra palabras semejantes a todas las de Jeremías.

Los profetas que fueron antes de mí y antes de ti desde la antigüedad, profetizaron guerra, calamidad y pestilencia contra muchas tierras y contra grandes reinos.

Por tanto, así dice el SEÑOR: ``He aquí, te voy a quitar de sobre la faz de la tierra. Este año morirás, porque has aconsejado la rebelión contra el SEÑOR."

así dice el SEÑOR de los ejércitos: ``He aquí, yo envío contra ellos la espada, el hambre y la pestilencia, y los pondré como higos reventados que de podridos no se pueden comer.

por tanto, así dice el SEÑOR: `He aquí, voy a castigar a Semaías el nehelamita y a su descendencia; no tendrá a nadie que habite en medio de este pueblo, ni verá el bien que voy a hacer a mi pueblo' --declara el SEÑOR-- `porque ha predicado rebelión contra el SEÑOR.'"

¿No es Efraín mi hijo amado? ¿No es un niño encantador? Pues siempre que hablo contra él, lo recuerdo aún más; por eso mis entrañas se conmueven por él, ciertamente tendré de él misericordia --declara el SEÑOR.

y él llevará a Sedequías a Babilonia, y allí estará hasta que yo lo visite' --declara el SEÑOR-- `si peleáis contra los caldeos, no tendréis éxito'"?

``He aquí, los terraplenes de asalto han llegado a la ciudad para tomarla, y la ciudad va a ser entregada en manos de los caldeos que pelean contra ella, por causa de la espada, el hambre y la pestilencia; lo que habías hablado ha venido a ser, y he aquí, tú {lo} estás viendo.

Porque así dice el SEÑOR, Dios de Israel, acerca de las casas de esta ciudad y acerca de las casas de los reyes de Judá que han sido derribadas {para hacer defensas} contra los terraplenes de asalto y contra la espada:

``Mientras {ellos} vienen a pelear contra los caldeos y a llenarlas con los cadáveres de los hombres que herí en mi ira y en mi furor, pues yo había escondido mi rostro de esta ciudad a causa de toda su maldad,

``Los limpiaré de toda la maldad que cometieron contra mí, y perdonaré todas las iniquidades con que pecaron contra mí y con las que se rebelaron contra mí.

Palabra que vino a Jeremías de parte del SEÑOR, cuando Nabucodonosor, rey de Babilonia, y todo su ejército y todos los reinos de la tierra que estaban bajo su dominio y todos los pueblos peleaban contra Jerusalén y contra todas sus ciudades, diciendo:

mientras el ejército del rey de Babilonia peleaba contra Jerusalén y contra todas las ciudades que quedaban en Judá, {es decir,} Laquis y Azeca, pues {sólo} éstas quedaban como ciudades fortificadas entre las ciudades de Judá.

Por tanto, así dice el SEÑOR: ``Vosotros no me habéis obedecido proclamando libertad cada uno a su hermano y cada uno a su prójimo. He aquí, proclamo contra vosotros libertad" --declara el SEÑOR-- ``a la espada, a la pestilencia y al hambre; y haré de vosotros motivo de espanto para todos los reinos de la tierra.

``He aquí, daré órdenes" --declara el SEÑOR-- ``y los haré volver a esta ciudad, y pelearán contra ella, la tomarán y le prenderán fuego; y haré de las ciudades de Judá una desolación sin habitantes."

Pero sucedió que cuando Nabucodonosor, rey de Babilonia, subió contra la tierra, dijimos: ``Venid y huyamos a Jerusalén ante el ejército de los caldeos y ante el ejército de Aram." Por eso habitamos en Jerusalén.

Por tanto así dice el SEÑOR, Dios de los ejércitos, el Dios de Israel: ``He aquí, traigo sobre Judá y sobre todos los habitantes de Jerusalén toda la calamidad que he pronunciado contra ellos, porque les hablé, pero no escucharon, y los llamé, pero no respondieron."

Tal vez su súplica llegue delante del SEÑOR, y todos se vuelvan de su mal camino, porque grande es la ira y el furor que el SEÑOR ha pronunciado contra este pueblo.

`Y volverán los caldeos y pelearán contra esta ciudad, la capturarán y le prenderán fuego.'"

``Pues aunque hubierais derrotado a todo el ejército de los caldeos que peleaba contra vosotros, y {sólo} quedaran heridos entre ellos, se levantaría cada uno en su tienda, y prenderían fuego a esta ciudad."

Y los oficiales se enojaron contra Jeremías y lo azotaron, y lo encarcelaron en la casa del escriba Jonatán, la cual habían convertido en prisión.

Dijo también Jeremías al rey Sedequías: ¿{En} qué he pecado contra ti, o contra tus siervos, o contra este pueblo para que me hayas puesto en prisión?

¿Dónde, pues, están vuestros profetas que os profetizaban, diciendo: ``El rey de Babilonia no vendrá contra vosotros, ni contra esta tierra"?

Y el rey Sedequías dijo: He aquí, él está en vuestras manos; pues el rey nada puede {hacer} contra vosotros.

``He aquí, todas las mujeres que quedan en el palacio del rey de Judá, serán llevadas a los oficiales del rey de Babilonia, y ellas dirán: `Te han engañado y han prevalecido contra ti; tus buenos amigos, mientras tus pies estaban hundidos en el lodo, se volvieron atrás.'

Y aconteció que Jerusalén fue tomada en el año noveno de Sedequías, rey de Judá, en el décimo mes, cuando vino Nabucodonosor, rey de Babilonia, con todo su ejército contra Jerusalén, y la sitiaron.

Pero el ejército de los caldeos los persiguió, y alcanzaron a Sedequías en los llanos de Jericó; lo apresaron y lo llevaron a Ribla en la tierra de Hamat, donde Nabucodonosor, rey de Babilonia, dictó sentencia contra él.

Tomó, pues, el capitán de la guardia a Jeremías, y le dijo: El SEÑOR tu Dios decretó esta calamidad contra este lugar,

y el SEÑOR {la} ha traído y hecho tal como había dicho. Porque vosotros pecasteis contra el SEÑOR y no escuchasteis su voz, por tanto os ha sucedido esto.

Entonces tomaron a todos sus hombres y fueron a pelear contra Ismael, hijo de Netanías, y lo encontraron junto al gran estanque que está en Gabaón.

Y ellos dijeron a Jeremías: Que el SEÑOR sea un testigo veraz y fiel contra nosotros si no obramos conforme a toda palabra que el SEÑOR tu Dios te mande para nosotros.

El SEÑOR os ha hablado, remanente de Judá: No entréis en Egipto. Sabedlo bien, que hoy {lo} he declarado contra vosotros.

sino que Baruc, hijo de Nerías, te incita contra nosotros para entregarnos en mano de los caldeos, a fin de que nos maten o nos deporten a Babilonia.

Por tanto, así dice el SEÑOR de los ejércitos, el Dios de Israel: ``He aquí, volveré el rostro contra vosotros para mal, y para destruir a todo Judá.

Porque quemasteis sacrificios y pecasteis contra el SEÑOR y no obedecisteis la voz del SEÑOR ni anduvisteis en su ley, ni en sus estatutos, ni en sus testimonios, por tanto, os ha sobrevenido esta calamidad, como {sucede} hoy.

``Y esta será la señal para vosotros" --declara el SEÑOR-- ``de que os voy a castigar en este lugar, para que sepáis que ciertamente mis palabras permanecerán para mal contra vosotros."

Se oye su sonido como el de una serpiente, pues {el enemigo} avanza como un ejército; con hachas, como leñadores, vienen contra ella.

¿Cómo puede estar quieta, cuando el SEÑOR {le} ha dado órdenes? Contra Ascalón y contra la costa del mar, allí la ha asignado.

Ya no hay alabanza para Moab, en Hesbón han tramado mal contra ella: ``Venid y quitémosla de entre las naciones." También tú, Madmena, serás silenciada, la espada te seguirá.

Desciende de {tu} gloria, siéntate en tierra reseca, moradora hija de Dibón, porque el destructor de Moab ha subido contra ti, para destruir tus fortalezas.

También ha venido juicio sobre la llanura, sobre Holón, sobre Jahaza y contra Mefaat,

contra Dibón, contra Nebo y contra Bet-deblataim,

contra Quiriataim, contra Bet-gamul y contra Bet-meón,

contra Queriot, contra Bosra y contra todas las ciudades de la tierra de Moab, las lejanas y las cercanas.

Porque así dice el SEÑOR: He aquí, como águila volará veloz, y extenderá sus alas contra Moab.

Las citas Bíblicas son tomadas de La Biblia de las Américas © 1986, 1995, 1997 by The Lockman Foundation, La Habra, Calif, http://www.lockman.org. Usadas con permiso