'Altos' en la Biblia
Y las aguas prevalecieron mucho en gran manera sobre la tierra; y todos los montes altos que había debajo de todos los cielos, fueron cubiertos.
Y destruiré vuestros altos, y talaré vuestras imágenes, y pondré vuestros cuerpos muertos sobre los cuerpos muertos de vuestros ídolos, y mi alma os abominará.
que fuego salió de Hesbón, y llama de la ciudad de Sehón, y consumió a Ar de Moab, a los señores de los altos de Arnón.
Y el día siguiente Balac tomó a Balaam, y lo hizo subir a los altos de Baal, y desde allí vio la extremidad del pueblo.
echaréis a todos los moradores de la tierra de delante de vosotros, y destruiréis todas sus pinturas, y todas sus imágenes de fundición destruiréis, y destruiréis todos sus altos;
Destruiréis enteramente todos los lugares donde los gentiles de quienes vosotros heredaréis sirvieron a sus dioses, sobre los montes altos, y sobre los collados, y debajo de todo árbol espeso;
Y te pondrá cerco en todas tus ciudades, hasta que caigan tus muros altos y encastillados en que tú confías, en toda tu tierra; te cercará, pues, en todas tus ciudades y en toda tu tierra, que el SEÑOR tu Dios te habrá dado.
Hasta entonces el pueblo sacrificaba en los lugares altos; porque aún no había casa edificada al nombre del SEÑOR hasta aquellos tiempos.
Mas Salomón amó al SEÑOR, andando en los estatutos de su padre David; solamente sacrificaba y quemaba perfumes en los lugares altos.
Hizo también casa de lugares altos, e hizo sacerdotes de entre lo más bajo del pueblo, que no eran de los hijos de Leví.
Entonces instituyó Jeroboam solemnidad en el mes octavo, a los quince del mes, conforme a la solemnidad que se celebraba en Judá; y sacrificó sobre un altar. Así hizo en Bet-el, sacrificando a los becerros que había hecho. Ordenó también en Bet-el sacerdotes de los lugares altos que él había fabricado.
él clamó contra el altar por palabra del SEÑOR, y dijo: Altar, altar, así dijo el SEÑOR: He aquí que a la casa de David nacerá un hijo, llamado Josías, el cual sacrificará sobre ti a los sacerdotes de los lugares altos que queman sobre ti incienso; y sobre ti quemarán huesos de hombres.
Porque sin duda vendrá lo que él dijo a voces por palabra del SEÑOR contra el altar que está en Bet-el, y contra todas las casas de los lugares altos que están en las ciudades de Samaria.
Después de esto no se tornó Jeroboam de su mal camino; antes volvió a hacer sacerdotes de los lugares altos de entre lo más bajo del pueblo, y quien quería se consagraba, y era de los sacerdotes de los lugares altos.
Porque ellos también se edificaron lugares altos, estatuas, y bosques, en todo collado alto, y debajo de todo árbol frondoso;
Mas los lugares altos no se quitaron; pero el corazón de Asa fue perfecto para con el SEÑOR toda su vida.
Y anduvo en todo el camino de Asa su padre, sin declinar de él, haciendo lo recto ante los ojos del SEÑOR. Con todo eso, los lugares altos no fueron quitados; porque aún el pueblo sacrificaba, y quemaba incienso en los lugares altos.
Con todo eso los lugares altos no se quitaron; que aún el pueblo sacrificaba y quemaba incienso en los lugares altos.
Con todo eso los lugares altos no fueron quitados; porque el pueblo aun sacrificaba y quemaba incienso en los lugares altos.
Con todo eso los lugares altos no se quitaron; que el pueblo sacrificaba aún y quemaba incienso en los lugares altos.
Con todo eso los lugares altos no fueron quitados; pues el pueblo sacrificaba aún, y quemaba incienso en los lugares altos. Este también edificó la puerta más alta de la Casa del SEÑOR.
Asimismo sacrificó, y quemó incienso en los altos, y sobre los collados, y debajo de todo árbol umbroso.
y como los hijos de Israel hicieron en secreto cosas no rectas contra el SEÑOR su Dios, edificándose lugares altos en todas sus ciudades, desde las torres de las atalayas hasta las ciudades fuertes,
y quemaran allí incienso en todos los lugares altos a la manera de los gentiles, los cuales el SEÑOR había traspuesto delante de ellos, e hicieron cosas muy malas para provocar a ira al SEÑOR,
Mas cada nación se hizo sus dioses, y los pusieron en las casas de los lugares altos que habían hecho los de Samaria; cada nación en su ciudad donde habitaba.
Y temían al SEÑOR; e hicieron del pueblo bajo sacerdotes para los lugares altos, quienes sacrificaban para ellos en las casas de los lugares altos.
El quitó los lugares altos, y quebró las imágenes, y taló los bosques, e hizo pedazos la serpiente de bronce que había hecho Moisés, porque hasta entonces le quemaban incienso los hijos de Israel; y le llamó por nombre Nehustán (cosa de bronce).
Y si me decís: Nosotros confiamos en el SEÑOR nuestro Dios, ¿no es aquel cuyos lugares altos y altares ha quitado Ezequías, y ha dicho a Judá y a Jerusalén: Delante de este altar adoraréis en Jerusalén?
Por mano de tus mensajeros has proferido injuria contra el Señor, y has dicho: Con la multitud de mis carros he subido a las cumbres de los montes; a las cuestas del Líbano, y cortaré sus altos cedros, sus hayas escogidas; y entraré a la morada de su término, al bosque de su Carmel.
Porque él volvió a edificar los lugares altos que Ezequías su padre había derribado, y levantó altares a Baal, e hizo bosque, como había hecho Acab rey de Israel; y adoró a todo el ejército del cielo, y sirvió a aquellas cosas.
Y quitó a los religiosos, que habían puesto los reyes de Judá para que quemaran incienso en los lugares altos en las ciudades de Judá, y en los alrededores de Jerusalén; y asimismo a los que quemaban incienso a Baal, al sol, y a la luna, y a los signos, y a todo el ejército del cielo.
E hizo venir todos los sacerdotes de las ciudades de Judá, y profanó los lugares altos donde los sacerdotes quemaban incienso, desde Gabaa hasta Beerseba; y derribó los lugares altos de las puertas y los que estaban a la entrada de la puerta de Josué, gobernador de la ciudad; y los que estaban a la mano izquierda, a la puerta de la ciudad.
Pero los sacerdotes de los lugares altos no subían al altar del SEÑOR en Jerusalén, mas comían panes sin levadura entre sus hermanos.
Asimismo profanó el rey los lugares altos que estaban delante de Jerusalén, a la mano derecha del monte de la destrucción, los cuales Salomón rey de Israel había edificado a Astarot, abominación de los sidonios, y a Quemos abominación de Moab, y a Milcom abominación de los hijos de Amón.
Finalmente todas las casas de los lugares altos que estaban en las ciudades de Samaria, las cuales habían hecho los reyes de Israel para provocar a ira, Josías las quitó, e hizo de ellas como había hecho en Bet-el.
Y mató sobre los altares a todos los sacerdotes de los lugares altos que allí estaban, y quemó sobre ellos los huesos de los hombres, y se volvió a Jerusalén.
Y él se hizo sacerdotes para los lugares altos, y para los demonios, y para los becerros que él había hecho.
Porque quitó los altares de los dioses ajenos, y los lugares altos; quebró las imágenes, y taló los bosques;
Quitó asimismo de todas las ciudades de Judá los lugares altos y las imágenes, y el reino tuvo reposo delante de él.
Mas con todo eso los lugares altos no eran quitados de Israel, aunque el corazón de Asa fue perfecto mientras vivió.
Y se animó su corazón en los caminos del SEÑOR, y quitó los lugares altos y los bosques de Judá.
Con todo eso los lugares altos no eran quitados; pues el pueblo aun no había preparado su corazón al Dios de sus padres.
Además de esto hizo lugares altos en los montes de Judá, e hizo que los moradores de Jerusalén fornicaran, y a ello impelió a Judá.
Asimismo sacrificó y quemó incienso en los lugares altos, y en los collados, y debajo de todo árbol espeso.
Hizo también lugares altos en todas las ciudades de Judá, para quemar incienso a los dioses ajenos, provocando a ira al SEÑOR Dios de sus padres.
Hechas todas estas cosas, salió todo Israel, los que se habían hallado allí, por las ciudades de Judá, y quebraron las imágenes y destruyeron los bosques, y derribaron los lugares altos y los altares por todo Judá y Benjamín, y también en Efraín y Manasés, hasta acabarlo todo. Después se volvieron todos los hijos de Israel, cada uno a su posesión y a sus ciudades.
¿No es Ezequías el que ha quitado sus lugares altos y sus altares, y dijo a Judá y a Jerusalén: Delante de este solo altar adoraréis, y sobre él quemaréis incienso?
Porque él reedificó los altos que Ezequías su padre había derribado, y levantó altares a los Baales, e hizo bosques, y adoró a todo el ejército de los cielos, y a él sirvió.
Pero el pueblo aun sacrificaba en los lugares altos, aunque al SEÑOR su Dios.
Su oración también, y cómo fue oído, todos sus pecados, y su prevaricación, los sitios donde edificó lugares altos y había puesto bosques e ídolos antes que se humillara, he aquí estas cosas están escritas en las palabras de los videntes.
A los ocho años de su reinado, siendo aún joven, comenzó a buscar al Dios de David su padre; y a los doce años comenzó a limpiar a Judá y a Jerusalén de los lugares altos, bosques, esculturas, e imágenes de fundición.
Mira a los cielos, y ve, y considera que los cielos son más altos que tú.
¿Por qué saltasteis, oh montes altos? Este monte amó Dios para su asiento; ciertamente el SEÑOR habitará en él para siempre.
Y le enojaron con sus lugares altos, y le provocaron a celo con sus esculturas.
Los montes altos para las cabras monteses; las peñas, madrigueras para los conejos.
En los altos cabezos, junto al camino, a las encrucijadas de las veredas se para;
y sobre todos los cedros del Líbano altos y sublimes; y sobre todos los alcornoques de Basán;
y sobre todos los montes altos, y sobre todos los collados levantados;
He aquí el Señor DIOS de los ejércitos, desgajará el ramo con fortaleza; y los de grande altura serán cortados, y los altos serán humillados.
Y acaecerá, que cuando Moab pareciere que está cansado sobre los lugares altos, entonces vendrá a su Santuario a orar, y no podrá.
Se destruyó, cayó la tierra; enfermó, cayó el mundo; enfermaron los altos pueblos de la tierra.
y allanará la fortaleza de tus altos muros; la humillará y la derribará a tierra, hasta el polvo.
Y si me dijeres: En el SEÑOR nuestro Dios confiamos, ¿no es éste aquel cuyos altos y cuyos altares hizo quitar Ezequías, y dijo a Judá y a Jerusalén: Delante de este altar adoraréis?
Por mano de tus siervos vituperaste al Señor, y dijiste: Yo con la multitud de mis carros subiré a las alturas de los montes, a las laderas del Líbano; cortaré sus altos cedros, sus hayas escogidas; vendré después a lo alto de su límite, al monte de su Carmelo.
Como son más altos los cielos que la tierra, así son más altos mis caminos que vuestros caminos, y mis pensamientos más que vuestros pensamientos.
Alza tus ojos a los altos, y ve en qué lugar no te hayas publicado; para ellos te sentabas en los caminos, como árabe en el desierto; y con tus fornicaciones y con tu malicia has contaminado la tierra.
Y edificaron los altos de Tofet, que es en el valle de Ben-Hinom, para quemar en fuego sus hijos y sus hijas, cosa que yo no les mandé, ni subió en mi corazón.
Sobre todos los lugares altos del desierto vinieron disipadores; porque la espada del SEÑOR devorará desde un extremo de la tierra hasta el otro; no hay paz para ninguna carne.
Y los asnos monteses se ponían en los altos, aspiraban el viento como los dragones; sus ojos se cegaron, porque no había hierba.
para que sus hijos se acuerden de sus altares y de sus bosques, junto a los árboles verdes y en los collados altos.
¡Mi montañés! En el campo son tus riquezas; todos tus tesoros daré a despojo, por el pecado de tus lugares altos en todos tus términos.
y edificaron lugares altos a Baal, para quemar con fuego a sus hijos en holocaustos al mismo Baal; cosa que no les mandé, ni hablé, ni me vino al pensamiento.
Establécete señales, ponte mojones altos; nota atentamente la calzada; el camino por donde viniste, vuélvete, virgen de Israel, vuélvete a éstas tus ciudades.
Y dirás: Montes de Israel, oíd palabra del Señor DIOS: Así dijo el Señor DIOS a los montes y a los collados, a los arroyos y a los valles: He aquí que yo, yo hago venir sobre vosotros espada, y destruiré vuestros altos.
En todas vuestras provincias las ciudades serán desiertas, y los lugares altos serán asolados, para que sean asolados y sean condenados vuestros altares; y vuestros ídolos serán quebrados, y cesarán; y vuestras imágenes del sol serán destruidas, y serán desechas vuestras obras.
En buenos pastos las apacentaré, y en los altos montes de Israel será su majada; allí dormirán en buena majada, y en pastos gruesos serán apacentadas sobre los montes de Israel.
y alcé mis ojos, y miré, y he aquí un carnero que estaba delante del río, el cual tenía dos cuernos: y aunque eran altos, el uno era más alto que el otro; y el más alto subía a la postre.
Todo esto por la rebelión de Jacob, y por los pecados de la casa de Israel. ¿Cuál es la rebelión de Jacob? ¿No es Samaria? ¿Y cuáles son los lugares altos de Judá? ¿No es Jerusalén?