'Espinos' en la Biblia
Espinos y abrojos te producirá, y comerás de las plantas del campo.
Si estalla un incendio y se extiende a los espinos, de modo que las mieses, amontonadas o en pie, o el campo {mismo} se consuman, el que encendió el fuego ciertamente hará restitución.
Y Gedeón respondió: Muy bien, cuando el SEÑOR haya entregado en mi mano a Zeba y a Zalmuna, trillaré vuestras carnes con espinos del desierto y con abrojos.
Entonces tomó a los ancianos de la ciudad, y espinos del desierto y abrojos, y con ellos castigó a los hombres de Sucot.
Mas los indignos, todos ellos serán arrojados como espinos, porque no pueden ser tomados con la mano;
Su cosecha devoran los hambrientos, la toman aun de {entre} los espinos, y el intrigante ansía su riqueza.
Antes que vuestras ollas puedan sentir {el fuego de} los espinos, tanto los verdes como los que arden, los barrerá El con torbellino.
Me rodearon como abejas; fueron extinguidas como fuego de espinos; en el nombre del SEÑOR ciertamente las destruí.
El camino del perezoso es como un seto de espinos, mas la senda de los rectos es una calzada.
Espinos {y} lazos hay en el camino del perverso; el que cuida su alma se alejará de ellos.
Porque como crepitar de espinos bajo la olla, así es la risa del necio. Y también esto es vanidad.
Como el lirio entre los espinos, así es mi amada entre las doncellas.
Y haré que quede desolada; no será podada ni labrada, y crecerán zarzas y espinos. También mandaré a las nubes que no derramen lluvia sobre ella.
y todas ellas vendrán y se posarán en los precipicios de las barrancas, en las hendiduras de las peñas, en todos los espinos y en todos los abrevaderos.
En aquel día, {en} todo lugar donde había mil vides {valoradas} en mil {siclos} de plata, habrá zarzas y espinos.
Se irá allá con arcos y flechas, porque toda la tierra será zarzas y espinos.
Y en cuanto a todas las colinas que eran cultivadas con la azada, no irás allá por temor de las zarzas y espinos; se convertirán en lugar para soltar los bueyes y para ser hollado por las ovejas.
Porque arde como fuego la impiedad, zarzas y espinos consume, y enciende la espesura del bosque; como remolino suben en columna de humo.
La luz de Israel se convertirá en fuego y su Santo en llama, y quemará y consumirá sus espinos y sus zarzas en un solo día.
No tengo furor. Si alguien me da zarzas {y} espinos en batalla, los pisotearé, los quemaré completamente,
por el suelo de mi pueblo {donde} crecerán espinos {y} zarzas; sí, por todas las casas alegres {y por} la ciudad divertida.
Y los pueblos serán calcinados, {como} espinos cortados que son quemados en el fuego.
Espinos crecerán en sus palacios, ortigas y cardos en sus ciudades fortificadas; será también guarida de chacales {y} morada de crías de avestruz.
Porque así dice el SEÑOR a los hombres de Judá y de Jerusalén: Romped el barbecho, y no sembréis entre espinos.
Han sembrado trigo y han segado espinos, se han esforzado sin provecho alguno. Avergonzaos, pues, de vuestras cosechas a causa de la ardiente ira del SEÑOR.
Por tanto, he aquí, cercaré su camino con espinos, y levantaré un muro contra ella para que no encuentre sus senderos.
También serán destruidos los lugares altos de Avén, el pecado de Israel; espinos y abrojos crecerán sobre sus altares. Entonces dirán a los montes: ¿Cubridnos!, y a los collados: ¡Caed sobre nosotros!
El mejor de ellos es como un zarzal, {y} el más recto como un seto de espinos. El día {que pongas} tus centinelas, tu castigo llegará. ¿Entonces será su confusión!
Porque ellos {como} espinos enmarañados, y ebrios con su bebida, serán consumidos como paja totalmente seca.
Por sus frutos los conoceréis. ¿Acaso se recogen uvas de los espinos o higos de los abrojos?
Otra parte cayó entre espinos; y los espinos crecieron y la ahogaron.
Y aquel en quien se sembró la semilla entre espinos, éste es el que oye la palabra, mas las preocupaciones del mundo y el engaño de las riquezas ahogan la palabra, y se queda sin fruto.
Otra {parte} cayó entre espinos, y los espinos crecieron y la ahogaron, y no dio fruto.
Otros son aquellos en los que se sembró la semilla entre los espinos; éstos son los que han oído la palabra,
Pues cada árbol por su fruto se conoce. Porque {los hombres} no recogen higos de los espinos, ni vendimian uvas de una zarza.
Otra {parte} cayó en medio de los espinos; y los espinos, al crecer con ella, la ahogaron.
Y la {semilla} que cayó entre los espinos, éstos son los que han oído, y al continuar su camino son ahogados por las preocupaciones, las riquezas y los placeres de la vida, y su fruto no madura.
pero si produce espinos y abrojos no vale nada, está próxima a ser maldecida, y termina por ser quemada.