'Gritando' en la Biblia
Cada uno se mantuvo en su lugar alrededor del campamento; y todo el ejército {de los Madianitas} echó a correr gritando mientras huían.
Al llegar él a Lehi, los Filisteos salieron a su encuentro gritando. Y el Espíritu del SEÑOR vino sobre él con poder, y las sogas que estaban en sus brazos fueron como lino quemado con fuego y las ataduras cayeron de sus manos.
Entonces Tamar se puso ceniza sobre la cabeza, rasgó el vestido de manga larga que llevaba puesto, y se fue gritando con las manos sobre la cabeza.
"Porque él ha descendido hoy y ha sacrificado bueyes, animales cebados y ovejas en abundancia, ha invitado a todos los hijos del rey, a los jefes del ejército y al sacerdote Abiatar, y allí están comiendo y bebiendo en su presencia, y gritando: ` ¡Viva el rey Adonías!'
Al irse Jesús de allí, dos ciegos Lo siguieron, gritando: `` ¡Hijo de David, ten misericordia de nosotros!"
Pero El no le contestó nada. Y acercándose Sus discípulos, Le rogaban: ``Atiéndela, pues viene gritando tras nosotros."
y gritando a gran voz, dijo: `` ¿Qué tengo yo que ver contigo, Jesús, Hijo del Dios Altísimo? Te imploro por Dios que no me atormentes."
También de muchos salían demonios, gritando: `` ¡Tú eres el Hijo de Dios!" Pero, reprendiéndolos, no les permitía hablar, porque sabían que El era el Cristo (el Mesías).
"Y gritando, dijo: `Padre Abraham, ten misericordia de mí, y envía a Lázaro para que moje la punta de su dedo en agua y refresque mi lengua, pues estoy en agonía en esta llama.'
pero ellos continuaban gritando: `` ¡Crucifícalo! ¡Crucifícalo!"
Porque {de} muchos que tenían espíritus inmundos, {éstos} salían {de ellos} gritando a gran voz; y muchos que habían sido paralíticos y cojos eran sanados.
Pero cuando lo oyeron los apóstoles Bernabé y Pablo, rasgaron sus ropas y se lanzaron en medio de la multitud, gritando:
Al no encontrarlos, arrastraron a Jasón y a algunos de los hermanos ante las autoridades de la ciudad, gritando: ``Esos que han trastornado al mundo han venido acá también;
Pero cuando se dieron cuenta de que era Judío, un clamor se levantó de todos ellos, gritando como por dos horas: `` ¡Grande es Diana de los Efesios!"
gritando: `` ¡Hombres de Israel, ayúdennos! Este es el hombre que enseña a todos, por todas partes, contra nuestro pueblo, la Ley y este lugar. Además, incluso ha traído Griegos al templo, y ha profanado este lugar santo."
porque la multitud del pueblo {lo} seguía, gritando: `` ¡Muera!"