'Jerusalén' en la Biblia
Después de nacer Jesús en Belén (Casa del Pan) de Judea, en tiempos del rey Herodes (el Grande), unos sabios (magos) del oriente llegaron a Jerusalén (Ciudad de Paz), preguntando:
Cuando {lo} oyó el rey Herodes (el Grande), se turbó, y toda Jerusalén con él.
Entonces Jerusalén, toda Judea y toda la región alrededor del Jordán, acudían a él,
Y Lo siguieron grandes multitudes de Galilea, Decápolis, Jerusalén y Judea, y {del} otro lado del Jordán.
ni por la tierra, porque es el estrado de Sus pies; ni por Jerusalén, porque es LA CIUDAD DEL GRAN REY.
Entonces se acercaron a Jesús {algunos} escribas y Fariseos de Jerusalén, diciendo:
Desde entonces Jesucristo comenzó a declarar a Sus discípulos que debía ir a Jerusalén y sufrir muchas cosas de parte de los ancianos, de los principales sacerdotes y de los escribas, y ser muerto, y resucitar al tercer día.
Cuando Jesús iba subiendo a Jerusalén, tomó aparte a los doce {discípulos,} y por el camino les dijo:
``Ahora subimos a Jerusalén, y el Hijo del Hombre será entregado a los principales sacerdotes y escribas, y Lo condenarán a muerte;
Cuando se acercaron a Jerusalén y llegaron a Betfagé, {junto} al Monte de los Olivos, Jesús entonces envió a dos discípulos,
Cuando Jesús entró en Jerusalén, toda la ciudad se agitó, y decían: `` ¿Quién es Este?"
Por la mañana, cuando regresaba a la ciudad (Jerusalén), Jesús tuvo hambre.
`` ¡Jerusalén, Jerusalén, la que mata a los profetas y apedrea a los que son enviados a ella! ¡Cuántas veces quise juntar a tus hijos, como la gallina junta sus pollitos debajo de sus alas, y no quisiste!
Acudía a él toda la región de Judea, y toda la gente de Jerusalén (Ciudad de Paz), y confesando sus pecados, eran bautizados por él en el río Jordán.
de Jerusalén, de Idumea, del otro lado del Jordán, y de los alrededores de Tiro y Sidón, una gran multitud, {que} al oír todo lo que Jesús hacía, vino a El.
Y los escribas que habían descendido de Jerusalén decían: ``Tiene a Beelzebú; y expulsa los demonios por medio del príncipe de los demonios."
Los Fariseos, y algunos de los escribas que habían venido de Jerusalén, se reunieron alrededor de El;
Iban por el camino subiendo a Jerusalén, y Jesús iba delante de ellos. Los discípulos estaban perplejos, y los que Lo seguían tenían miedo. Y tomando aparte de nuevo a los doce, comenzó a decirles lo que Le iba a suceder:
``Ahora subimos a Jerusalén, y el Hijo del Hombre será entregado a los principales sacerdotes y a los escribas, y Lo condenarán a muerte y Lo entregarán a los Gentiles.
Cuando se acercaban a Jerusalén, por Betfagé y Betania, cerca del Monte de los Olivos, Jesús envió a dos de Sus discípulos,
Jesús entró en Jerusalén, {fue} al templo, y después de mirar todo alrededor, salió para Betania con los doce {discípulos,} siendo ya avanzada la hora.
Llegaron a Jerusalén; y entrando Jesús en el templo, comenzó a echar fuera a los que vendían y compraban en el templo; volcó las mesas de los que cambiaban el dinero y los asientos de los que vendían las palomas,
Llegaron de nuevo a Jerusalén; y cuando Jesús andaba por el templo, se acercaron a El los principales sacerdotes, los escribas y los ancianos,
las cuales cuando Jesús estaba en Galilea, Lo seguían y Le servían; y {había} muchas otras que habían subido con El a Jerusalén.
Al cumplirse los días para la purificación de ellos, según la ley de Moisés, Lo trajeron a Jerusalén (Ciudad de Paz) para presentar al Niño al Señor,
Había en Jerusalén un hombre que se llamaba Simeón. Este hombre, justo y piadoso, esperaba la consolación de Israel, y el Espíritu Santo estaba sobre él.
Llegando ella en ese preciso momento, daba gracias a Dios y hablaba del Niño a todos los que esperaban la redención de Jerusalén.
Los padres de Jesús acostumbraban ir a Jerusalén todos los años a la fiesta de la Pascua.
Al regresar ellos, después de haber pasado todos los días {de la fiesta}, el niño Jesús se quedó en Jerusalén sin que lo supieran Sus padres,
Cuando no Lo encontraron, volvieron y Lo buscaron en Jerusalén.
Entonces {el diablo} Lo llevó a Jerusalén y Lo puso sobre el pináculo del templo, y Le dijo: ``Si eres Hijo de Dios, lánzate abajo desde aquí,
Y un día que El estaba enseñando, estaban {allí} sentados {algunos} Fariseos y maestros de la ley que habían venido de todas las aldeas de Galilea y Judea, y {de} Jerusalén; y el poder del Señor estaba con El para sanar.
Descendió con ellos y se detuvo en un lugar llano. {Había} una gran multitud de Sus discípulos y una gran muchedumbre del pueblo, de toda Judea, de Jerusalén y de la región costera de Tiro y Sidón,
quienes apareciendo en gloria, hablaban de la partida de Jesús que El estaba a punto de cumplir en Jerusalén.
Sucedió que cuando se cumplían los días de Su ascensión, Jesús, con determinación, afirmó Su rostro para ir a Jerusalén.
Pero no Lo recibieron, porque sabían que había determinado ir a Jerusalén.
Jesús le respondió: ``Cierto hombre bajaba de Jerusalén a Jericó, y cayó en manos de salteadores, los cuales después de despojarlo y de darle golpes, se fueron, dejándolo medio muerto.
" ¿O piensan que aquellos dieciocho, sobre los que cayó la torre en Siloé y los mató, eran {más} deudores que todos los hombres que habitan en Jerusalén?
Pasaba Jesús por ciudades y aldeas, enseñando, mientras proseguía camino a Jerusalén.
"Sin embargo, debo seguir Mi camino, hoy, mañana y pasado mañana; porque no puede ser que un profeta muera fuera de Jerusalén.
" ¡Jerusalén, Jerusalén, la que mata a los profetas y apedrea a los que le son enviados! ¡Cuántas veces quise juntar a tus hijos, como la gallina a sus pollitos debajo de sus alas, y no quisiste!
Aconteció que mientras Jesús iba camino a Jerusalén, pasaba entre Samaria y Galilea,
Tomando aparte a los doce {discípulos,} Jesús les dijo: ``Miren, subimos a Jerusalén, y se cumplirán todas las cosas que están escritas por medio de los profetas acerca del Hijo del Hombre.
Estando ellos oyendo estas cosas, Jesús continuó diciendo una parábola, porque El estaba cerca de Jerusalén y ellos pensaban que el reino de Dios iba a aparecer de un momento a otro.
Habiendo dicho esto, Jesús iba delante, subiendo hacia Jerusalén.
``Pero cuando ustedes vean a Jerusalén rodeada de ejércitos, sepan entonces que su desolación está cerca.
"Caerán a filo de espada y serán llevados cautivos a todas las naciones. Jerusalén será pisoteada por los Gentiles, hasta que los tiempos de los Gentiles se cumplan.
Al saber que Jesús pertenecía a la jurisdicción de Herodes (Antipas), Lo remitió a Herodes, que también estaba en Jerusalén en aquellos días.
Pero Jesús, volviéndose a ellas, dijo: ``Hijas de Jerusalén, no lloren por Mí; lloren más bien por ustedes mismas y por sus hijos.
Aquel mismo día dos de los discípulos iban a una aldea llamada Emaús, que estaba como a once kilómetros de Jerusalén.
Uno {de ellos,} llamado Cleofas, Le dijo: `` ¿Eres Tú el único visitante en Jerusalén que no sabe las cosas que en ella han acontecido en estos días?"
Levantándose en esa misma hora, regresaron a Jerusalén, y hallaron reunidos a los once {apóstoles} y a los que estaban con ellos,
y que en Su nombre se predicará el arrepentimiento para el perdón de los pecados a todas las naciones, comenzando desde Jerusalén.
Ellos, después de adorar a Jesús, regresaron a Jerusalén con gran gozo,
Este es el testimonio de Juan, cuando los Judíos enviaron sacerdotes y Levitas de Jerusalén (Ciudad de Paz) a preguntarle: `` ¿Quién eres tú?"
La Pascua de los Judíos estaba cerca, y Jesús subió a Jerusalén.
Cuando Jesús estaba en Jerusalén durante la fiesta de la Pascua, muchos creyeron en Su nombre al ver las señales que hacía.
"Nuestros padres adoraron en este monte, y ustedes dicen que en Jerusalén está el lugar donde se debe adorar."
Jesús le dijo: ``Mujer, cree lo que te digo: la hora viene cuando ni en este monte ni en Jerusalén adorarán ustedes al Padre.
Así que cuando llegó a Galilea, los Galileos Lo recibieron, {pues} habían visto todo lo que El hizo en Jerusalén durante la fiesta; porque ellos también habían ido a la fiesta.
Después de esto, se celebraba una fiesta de los Judíos, y Jesús subió a Jerusalén.
Hay en Jerusalén, junto a la {Puerta} de las Ovejas, un estanque que en Hebreo se llama Betesda que tiene cinco pórticos.
Entonces algunos de Jerusalén decían: `` ¿No es Este al que procuran matar?
En esos días se celebraba en Jerusalén la fiesta de la Dedicación.
Betania estaba cerca de Jerusalén, como a tres kilómetros;
Estaba cerca la Pascua de los Judíos, y muchos de la región subieron a Jerusalén antes de la Pascua para purificarse.
Al día siguiente, cuando la gran multitud que había venido a la fiesta, oyó que Jesús venía a Jerusalén,
Y reuniéndolos, les mandó que no salieran de Jerusalén (Ciudad de Paz), sino que esperaran la promesa del Padre: ``La cual," {les dijo,} ``oyeron de Mí;
pero recibirán poder cuando el Espíritu Santo venga sobre ustedes; y serán Mis testigos en Jerusalén, en toda Judea y Samaria, y hasta los confines de la tierra."
Entonces los discípulos regresaron a Jerusalén desde el monte llamado de los Olivos, que está cerca de Jerusalén, camino de un día de reposo (1.2 km).
{Esto} llegó al conocimiento de todos los que habitaban en Jerusalén, de manera que aquel terreno se llamó en su propia lengua Acéldama, es decir, campo de sangre.
Había Judíos que moraban en Jerusalén, hombres piadosos, procedentes de todas las naciones bajo el cielo.
Entonces Pedro, poniéndose en pie con los once {apóstoles}, alzó la voz y les declaró: ``Hombres de Judea y todos los que viven en Jerusalén, sea esto de su conocimiento y presten atención a mis palabras.
Sucedió que al día siguiente se reunieron en Jerusalén sus gobernantes, ancianos y escribas.
`` ¿Qué haremos con estos hombres?" decían. ``Porque el hecho de que un milagro (una señal) notable ha sido realizado por medio de ellos es evidente a todos los que viven en Jerusalén, y no podemos negarlo.
También la gente (la multitud) de las ciudades en los alrededores de Jerusalén acudía trayendo enfermos y atormentados por espíritus inmundos, y todos eran sanados.
``Les dimos órdenes estrictas de no continuar enseñando en este Nombre, y han llenado a Jerusalén con sus enseñanzas, y quieren traer sobre nosotros la sangre de este Hombre."
Y la palabra de Dios crecía, y el número de los discípulos se multiplicaba en gran manera en Jerusalén, y muchos de los sacerdotes obedecían a la fe.
Y Saulo (Pablo) estaba de completo acuerdo con {ellos} en su muerte. En aquel día se desató una gran persecución en contra de la iglesia en Jerusalén, y todos fueron esparcidos por las regiones de Judea y Samaria, excepto los apóstoles.
Cuando los apóstoles que {estaban} en Jerusalén oyeron que Samaria había recibido la palabra de Dios, les enviaron a Pedro y a Juan,
Y ellos, después de haber testificado solemnemente y hablado la palabra del Señor, iniciaron el regreso a Jerusalén anunciando el evangelio (las buenas nuevas) en muchas aldeas de los Samaritanos.
Un ángel del Señor le dijo a Felipe: ``Levántate y ve hacia el sur, al camino que desciende de Jerusalén a Gaza." Este es un {camino} desierto.
El se levantó y fue. Y había un eunuco Etíope, alto oficial de Candace, reina de los Etíopes, el cual estaba encargado de todos sus tesoros, que había venido a Jerusalén para adorar.
y le pidió cartas para las sinagogas de Damasco, para que si encontraba algunos que pertenecieran al Camino (de Jesús), tanto hombres como mujeres, los pudiera llevar atados a Jerusalén.
Pero Ananías respondió: ``Señor, he oído de muchos acerca de este hombre, cuánto mal ha hecho a Tus santos en Jerusalén,
Y todos los que {lo} escuchaban estaban asombrados y decían: `` ¿No es éste el que en Jerusalén destruía a los que invocaban este nombre, y {el que} había venido aquí con este propósito: para llevarlos atados ante los principales sacerdotes?"
Cuando Saulo llegó a Jerusalén, trataba de juntarse con los discípulos; pero todos le temían, no creyendo que era discípulo.
Y estaba con ellos moviéndose libremente en Jerusalén, hablando con valor en el nombre del Señor.
``Nosotros somos testigos de todas las cosas que hizo en la tierra de los Judíos y en Jerusalén. Y también Le dieron muerte, colgándolo en una cruz (un madero).
Cuando Pedro subió a Jerusalén, los que eran de la circuncisión (Judíos Cristianos) le reprocharon:
La noticia de esto llegó a oídos de la iglesia de Jerusalén y enviaron a Bernabé a Antioquía,
Por aquellos días unos profetas descendieron de Jerusalén a Antioquía.
Bernabé y Saulo regresaron de Jerusalén después de haber cumplido su misión (ministerio), llevando {consigo} a Juan, llamado también Marcos.
Pablo y sus compañeros navegaron desde Pafos y llegaron a Perge de Panfilia; pero Juan se apartó de ellos y regresó a Jerusalén;
"Pues los que habitan en Jerusalén y sus gobernantes, sin reconocer a Jesús ni las palabras (las voces) de los profetas que se leen todos los días de reposo, cumplieron {estas escrituras,} cuando {Lo} condenaron.
y por muchos días se apareció a los que habían subido con El de Galilea a Jerusalén, los cuales ahora son Sus testigos ante el pueblo.
Como Pablo y Bernabé tuvieran gran disensión y debate con ellos, {los hermanos} determinaron que Pablo y Bernabé, y algunos otros de ellos subieran a Jerusalén a los apóstoles y a los ancianos para tratar esta cuestión.
Cuando llegaron a Jerusalén, fueron recibidos por la iglesia, los apóstoles y los ancianos, e informaron de todo lo que Dios había hecho con ellos.
Según pasaban por las ciudades, entregaban los acuerdos tomados por los apóstoles y los ancianos que estaban en Jerusalén, para que los observaran.
Al llegar a Cesarea, subió {a Jerusalén} para saludar a la iglesia, y {luego} descendió a Antioquía.
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