'Mi' en la Biblia
Y Adoni Bezec dijo: ``Setenta reyes, con los pulgares de sus manos y de sus pies cortados, recogían {migajas} debajo de mi mesa. Como yo he hecho, así me ha pagado Dios." Lo llevaron a Jerusalén (Ciudad de Paz), y allí murió.
Entonces Caleb dijo: ``Al que ataque a Quiriat Séfer y la tome, yo le daré a mi hija Acsa por mujer."
El ángel del SEÑOR subió de Gilgal a Boquim y dijo {a los Israelitas}: ``Yo los saqué a ustedes de Egipto y los conduje a la tierra que había prometido a sus padres y les dije: `Jamás quebrantaré Mi pacto con ustedes,
Entonces se encendió la ira del SEÑOR contra Israel, y dijo: ``Por cuanto esta nación ha quebrantado Mi pacto que ordené a sus padres, y no ha escuchado Mi voz,
Jael salió al encuentro de Sísara, y le dijo: ``Venga, señor mío, venga a mí; no tema." Y él fue hacia ella a la tienda, y ella lo cubrió con una manta.
Mi corazón está con los jefes de Israel, Los voluntarios entre el pueblo. ¡Bendigan al SEÑOR!
Entonces los sobrevivientes descendieron sobre los nobles. El pueblo del SEÑOR vino a mí como guerreros.
``Ah Señor," le respondió Gedeón, `` ¿cómo libraré a Israel? Mi familia es la más pobre en Manasés, y yo el menor de la casa de mi padre."
"Te ruego que no Te vayas de aquí hasta que yo vuelva a Ti, y traiga mi ofrenda y la ponga delante de Ti." ``Me quedaré hasta que vuelvas," le respondió el SEÑOR.
Al ver Gedeón que era el ángel del SEÑOR, dijo: `` ¡Ay de mí, Señor DIOS! Porque ahora he visto al ángel del SEÑOR cara a cara."
Entonces Gedeón dijo a Dios: ``Si has de librar a Israel por mi mano, como has dicho,
voy a poner un vellón de lana en la era. Si hay rocío solamente en el vellón y toda la tierra queda seca, entonces sabré que librarás a Israel por mi mano, como has dicho."
Y Gedeón dijo a Dios: ``No se encienda Tu ira contra mí si hablo otra vez. Te ruego que me permitas hacer otra vez una prueba con el vellón. Que ahora quede seco el vellón y haya rocío en toda la tierra."
Y el SEÑOR dijo a Gedeón: ``El pueblo que está contigo es demasiado numeroso para que Yo entregue a Madián en sus manos; no sea que Israel se vuelva orgulloso, y diga: `Mi propia fortaleza me ha librado.'
Gedeón respondió: ``Muy bien, cuando el SEÑOR haya entregado en mi mano a Zeba y a Zalmuna, trillaré las carnes de ustedes con espinos y cardos del desierto."
``{Eran} mis hermanos," dijo él, ``hijos de mi madre. Vive el SEÑOR, que si los hubieran dejado con vida, yo no les quitaría la vida a ustedes."
Pero Gedeón les respondió: ``No reinaré sobre ustedes, ni tampoco reinará sobre ustedes mi hijo. El SEÑOR reinará sobre ustedes."
"Pero el olivo les respondió: ` ¿He de dejar mi aceite con el cual se honra a Dios y a los hombres, para ir a ondear sobre los árboles?'
"Pero la higuera les respondió: ` ¿He de dejar mi dulzura y mi buen fruto, para ir a ondear sobre los árboles?'
"Pero la vid les respondió: ` ¿He de dejar mi vino nuevo, que alegra a Dios y a los hombres, para ir a ondear sobre los árboles?'
"Y la zarza dijo a los árboles: `Si en verdad me ungen por rey sobre ustedes, vengan y refúgiense a mi sombra; y si no, salga fuego de la zarza y consuma los cedros del Líbano.'
(pues mi padre peleó por ustedes, y arriesgó su vida y los libró de la mano de Madián,
pero ustedes se han rebelado hoy contra la casa de mi padre y han matado a sus hijos, setenta hombres, sobre una piedra, y han hecho rey sobre los habitantes de Siquem a Abimelec, el hijo de su sierva, porque es pariente de ustedes)
Entonces él llamó apresuradamente al muchacho que era su escudero, y le dijo: ``Saca tu espada y mátame, no sea que se diga de mí: `Una mujer lo mató.'" Y el muchacho lo traspasó, y murió.
"Cuando los Sidonios, los Amalecitas y los Maonitas los oprimían, clamaron a Mí, y Yo los libré de sus manos.
Entonces Jefté contestó a los ancianos de Galaad: `` ¿No me odiaron y me echaron de la casa de mi padre? ¿Por qué, pues, han venido a mí ahora cuando están en apuros?"
Y envió Jefté mensajeros al rey de los Amonitas para que le dijeran: `` ¿Qué hay entre usted y yo, que ha venido a mí para pelear contra mi tierra?"
El rey de los Amonitas dijo a los mensajeros de Jefté: ``Porque Israel tomó mi tierra, cuando subieron de Egipto, desde el Arnón hasta el Jaboc y el Jordán; por tanto devuélvela ahora en paz."
~`Por tanto, yo no he pecado contra usted, pero usted me está haciendo mal al hacer guerra contra mí. Que el SEÑOR, el Juez, juzgue hoy entre los Israelitas y los Amonitas.'"
sucederá que cualquiera que salga de las puertas de mi casa a recibirme cuando yo vuelva en paz de los Amonitas, será del SEÑOR, o lo ofreceré como holocausto."
Al verla, él rasgó sus ropas y dijo: `` ¡Ay, hija mía! Me has abatido y estás entre los que me afligen. Porque he dado mi palabra al SEÑOR, y no me puedo retractar."
Y ella dijo a su padre: ``Que se haga esto por mí; déjame sola por dos meses, para que vaya yo a los montes y llore por mi virginidad, yo y mis compañeras."
Y Jefté les respondió: ``Yo y mi pueblo estábamos en gran lucha con los Amonitas, y cuando los llamé a ustedes, no me libraron de sus manos.
"Viendo, pues, que no {me} iban a librar, arriesgué mi vida y crucé contra los Amonitas, y el SEÑOR los entregó en mi mano. ¿Por qué, pues, han subido hoy a pelear contra mí?"
La mujer fue y se lo dijo a su marido: ``Un hombre de Dios vino a mí, y su aspecto era como el aspecto del ángel de Dios, muy imponente. Yo no le pregunté de dónde {venía,} ni él me hizo saber su nombre.
El ángel del SEÑOR le respondió: `` ¿Por qué preguntas mi nombre, viendo que es maravilloso (incomprensible)?"
Le respondieron su padre y su madre: `` ¿No hay mujer entre las hijas de tus parientes o entre todo nuestro pueblo, para que vayas a tomar mujer de los Filisteos incircuncisos?" Pero Sansón dijo a su padre: ``Tómala para mí, porque ella me agrada."
La mujer de Sansón lloró delante de él, y dijo: ``Sólo me aborreces y no me quieres. Has propuesto una adivinanza a los hijos de mi pueblo, y no me {la} has declarado." Y él le dijo: ``No se {la} he declarado ni a mi padre ni a mi madre. ¿Y te la he de declarar a ti?"
Y al séptimo día, antes de ponerse el sol, los hombres de la ciudad le dijeron: `` ¿Qué es más dulce que la miel? ¿Y qué es más fuerte que un león?" Y Sansón les contestó: ``Si no hubieran arado con mi novilla, No habrían descubierto mi adivinanza."
Después de algún tiempo, en los días de la siega del trigo, sucedió que Sansón fue a visitar a su mujer con un cabrito, y dijo: ``Llegaré a mi mujer en {su} recámara." Pero el padre de ella no lo dejó entrar.
Dalila entonces dijo a Sansón: ``Hasta ahora me has engañado y me has dicho mentiras. Declárame, ¿cómo se te puede atar?" ``Si tejes siete trenzas de mi cabellera con la tela y la aseguras con una clavija," le dijo él, ``entonces me debilitaré y seré como cualquier {otro} hombre."
El le reveló, pues, todo {lo que había} en su corazón, diciéndole: ``Nunca ha pasado navaja sobre mi cabeza, pues he sido Nazareo para Dios desde el vientre de mi madre. Si me cortan el cabello, mi fuerza me dejará y me debilitaré y seré como cualquier {otro} hombre."
Entonces Sansón invocó al SEÑOR y dijo: ``Señor DIOS, Te ruego que Te acuerdes de mí, y Te suplico que me des fuerzas sólo esta vez, oh Dios, para vengarme ahora de los Filisteos por mis dos ojos."
Y él dijo a su madre: ``Las 1,100 {monedas} de plata que te quitaron, acerca de las cuales proferiste una maldición a mis oídos, mira, esa plata está en mi poder; yo la tomé." ``Bendito sea mi hijo por el SEÑOR," le dijo su madre.
Entonces él devolvió las 1,100 {monedas} de plata a su madre, y su madre dijo: ``Yo de corazón dedico la plata de mi mano al SEÑOR por mi hijo, para hacer una imagen tallada y una de fundición; ahora, por tanto, yo te las devuelvo."
Entonces Micaía le dijo: ``Quédate conmigo y sé padre y sacerdote para mí, y yo te daré diez {monedas} de plata por año, el vestido y la comida." Entonces el Levita entró.
Y él le dijo: ``Estamos pasando de Belén de Judá a la parte más remota de la región montañosa de Efraín, {pues} soy de allí. Fui hasta Belén de Judá, y {ahora} voy a mi casa, pero no hay quien me reciba en su casa.
"Sin embargo, tenemos paja y forraje para nuestros asnos, y también pan y vino para mí, para tu sierva y para el joven que está con tu siervo; no {nos} falta nada."
Entonces el hombre, el dueño de la casa, salió a ellos y les dijo: ``No, hermanos míos, no se porten tan vilmente. Puesto que este hombre ha entrado en mi casa, no cometan esta terrible ofensa (infamia).
"Aquí está mi hija virgen y la concubina de él. Permítanme que las saque para que abusen de ellas y hagan con ellas lo que quieran, pero no cometan semejante ofensa contra este hombre."
El Levita, marido de la mujer que había sido asesinada, respondió: ``Vine con mi concubina a pasar la noche en Guibeá de Benjamín.
"Pero los hombres de Guibeá se levantaron contra mí, y rodearon la casa por la noche por causa mía. Tenían intención de matarme. Pero en vez de esto, violaron a mi concubina de tal manera que murió.
"Tomé entonces a mi concubina, la corté en pedazos y la envié por todo el territorio de la heredad de Israel, porque han cometido lascivia y terrible ofensa (infamia) en Israel.
Y subieron los Israelitas y lloraron delante del SEÑOR hasta la noche, y consultaron al SEÑOR, diciendo: `` ¿Nos acercaremos otra vez para combatir contra los hijos de mi hermano Benjamín?" Y el SEÑOR dijo: ``Suban contra él."
y Finees, hijo de Eleazar, hijo de Aarón, estaba delante de ella para {ministrar} en aquellos días y preguntó: `` ¿Volveré a salir otra vez a combatir contra los hijos de mi hermano Benjamín, o desistiré?" Y el SEÑOR respondió: ``Suban, porque mañana lo entregaré en tu mano."