'Piedras' en la Biblia
Más preciosa es que las piedras preciosas; y todo lo que puedes desear, no se puede comparar a ella.
Porque mejor es la sabiduría que las piedras preciosas; y todas las cosas que se pueden desear, no son de comparar con ella.
Hay oro y multitud de piedras preciosas; mas los labios sabios son vaso precioso.
Alef Mujer valiente, ¿quién la hallará? Porque su valor pasa largamente a la de las piedras preciosas.
tiempo de esparcir las piedras, y tiempo de juntar las piedras; tiempo de abrazar, y tiempo de alejarse de abrazar;
El que mudare las piedras, tribulación tendrá en ellas; el que cortare la leña, en ella peligrará.
y se meterán en las hendiduras de las piedras, y en las cavernas de las peñas, delante de la presencia temerosa del SEÑOR, y del resplandor de su majestad, cuando se levantare para herir la tierra.
Y vendrán, y se asentarán todos en los valles desiertos, y en las cavernas de las piedras, y en todos los zarzales, y en todas las matas.
Por tanto, de esta manera pues, será purgada la iniquidad de Jacob; y éste será todo el fruto, la remoción de su pecado; cuando tornare todas las piedras del altar, como piedras de cal desmenuzadas, para que no se levanten los bosques, ni las imágenes del sol.
Pobre, fatigada con tempestad, sin consuelo, he aquí que yo cimentaré tus piedras sobre carbunclo; y sobre zafiros te fundaré.
Tus ventanas pondré de piedras preciosas, tus puertas de piedras de carbunclo, y todo tu término de piedras de gran precio.
En las pulimentadas piedras del valle está tu parte; ellas, ellas son tu suerte; y a ellas derramaste libación, y ofreciste presente. ¿No me he de vengar de estas cosas?
Por el bronce traeré oro, y por hierro plata, y por madera bronce, y por las piedras hierro; y pondré paz por tu gobierno, y justicia por tus opresores.
Pasad, pasad por las puertas. Barred el camino al pueblo. Allanad, allanad la calzada; quitad las piedras, alzad bandera a los pueblos.
Toma con tu mano piedras grandes, y cúbrelas de barro en un horno de ladrillos que está a la puerta de la casa de Faraón en Tafnes, a vista de hombres judíos;
y diles: Así dijo el SEÑOR de los ejércitos, Dios de Israel: He aquí que yo envío, y tomaré a Nabucodonosor rey de Babilonia, mi siervo, y pondré su trono sobre estas piedras que escondí, y tenderá su dosel sobre ellas.
Alef: ¡Cómo se ha oscurecido el oro! ¡Cómo el buen oro se ha demudado! Las piedras del Santuario están esparcidas por las encrucijadas de todas las calles.
Zain: Sus Nazareos fueron blancos más que la nieve, más resplandecientes que la leche; su compostura más encendida que las piedras preciosas cortadas del zafiro;
di a los pañetadores con lodo suelto, que caerá; vendrá lluvia inundante, y daré piedras de granizo que la hagan caer, y viento tempestuoso la romperá.
Por tanto, así dijo el Señor DIOS: Y haré que la rompa viento tempestuoso con mi ira, y lluvia inundante vendrá con mi furor, y piedras de granizo con mi enojo para consumir.
Y harán subir contra ti reunión de gente, y te apedrearán con piedras, y te atravesarán con sus espadas.
y la compañía las apedrearán con piedras, y las acuchillarán con sus espadas; matarán a sus hijos y a sus hijas, y sus casas consumirán con fuego.
Y robarán tus riquezas, y saquearán tus mercaderías; y arruinarán tus muros, y tus casas preciosas destruirán; y pondrán tus piedras y tu madera y tu tierra en medio de las aguas.
Tú, querubín grande, cubierto, y yo te puse; en el santo monte de Dios estuviste; en medio de piedras de fuego anduviste.
A causa de la multitud de tu contratación fuiste lleno de violencia, y pecaste; y yo te eché del Monte de Dios, y te eché a mal de entre las piedras del fuego, oh querubín cubierto.
Y yo litigaré con él con pestilencia y con sangre; y haré llover sobre él, y sobre sus compañías, y sobre los muchos pueblos que están con él, impetuosa lluvia, y piedras de granizo, fuego y azufre.
Y las cuatro mesas para el holocausto eran de piedras labradas, de un codo y medio de longitud, y codo y medio de ancho, y de altura de un codo; sobre éstas pondrán las herramientas con que degollarán el holocausto y el sacrificio.
Mas honrará en su lugar al dios Mauzim, dios que sus padres no conocieron; lo honrará con oro, plata, y piedras preciosas, y con cosas de gran precio.
¿Correrán los caballos por las piedras? ¿Ararán en ellas con vacas? ¿Por qué habéis vosotros tornado el juicio en veneno, y el fruto de justicia en ajenjo?
Pondré, pues, a Samaria en montones de campo, en tierra de viñas; y derramaré sus piedras por el valle, y descubriré sus fundamentos.
Yo la saqué, dijo el SEÑOR de los ejércitos, y vendrá a la casa del ladrón, y a la casa del que jura falsamente en mi nombre; y permanecerá en medio de su casa, y la consumirá, con sus enmaderamientos y sus piedras.
El SEÑOR de los ejércitos los amparará, y ellos devorarán, y los sujetarán a las piedras de la honda, y beberán y harán estrépito como tomados del vino; y se llenarán como cuenco, o como los lados del altar.
Y los salvará en aquel día el SEÑOR su Dios como a rebaño de su pueblo; porque serán engrandecidos en su tierra como piedras preciosas de corona.
y no penséis decir dentro de vosotros: a Abraham tenemos por padre; porque yo os digo, que puede Dios despertar hijos a Abraham aun de estas piedras.
Y acercándose a él el tentador, dijo: Si eres Hijo de Dios, di que estas piedras se conviertan en pan.
Y he aquí, el velo del Templo se rompió en dos, de alto a bajo; y la tierra tembló, y las piedras se hendieron;
Siempre, de día y de noche, andaba dando voces en los montes y en los sepulcros, e hiriéndose con las piedras.
Y saliendo del Templo, le dice uno de sus discípulos: Maestro, mira qué piedras, y qué edificios.
Haced, pues, frutos dignos de arrepentimiento, y no comencéis a decir en vosotros mismos: Tenemos a Abraham por padre; porque os digo que puede Dios, aun de estas piedras, levantar hijos a Abraham.
Y él respondiendo, les dijo: Os digo que si éstos callaran, las piedras clamarían.
Y a unos que decían del Templo, que estaba adornado de hermosas piedras y dones, dijo:
Tomaron entonces piedras para tirarle; mas Jesús se encubrió, y salió del Templo; y atravesando por en medio de ellos, se fue.
Entonces volvieron a tomar piedras los judíos para apedrearle.
Y si alguno edificare sobre este fundamento oro, plata, piedras preciosas, madera, heno, hojarasca;
Y si el ministerio de muerte en la letra grabado en piedras, fue para gloria, tanto que los hijos de Israel no pudieran poner los ojos en la faz de Moisés a causa de la gloria de su rostro, la cual había de perecer,
vosotros también, como piedras vivas, son edificados una casa espiritual, y un sacerdocio santo, para ofrecer sacrificios espirituales, agradables a Dios por Jesús el Cristo.
Y los reyes de la tierra, y los príncipes, y los ricos, y los capitanes, y los fuertes, y todo siervo y todo libre, se escondieron en las cuevas y entre las piedras de los montes;
y decían a los montes y a las piedras: Caed sobre nosotros, y escondednos de la cara de aquel que está sentado sobre el trono, y de la ira del Cordero;
Y la mujer estaba vestida de púrpura y de grana, y dorada con oro, y adornada de piedras preciosas y de perlas, teniendo un cáliz de oro en su mano lleno de abominaciones y de la suciedad de su fornicación;
La mercadería de oro, y de plata, y de piedras preciosas, y de margaritas, y de lino finísimo, y de escarlata, y de seda, y de grana, y de toda madera olorosa, y de todo vaso de marfil, y de todo vaso de madera preciosa, y de bronce, y de hierro, y de mármol;
y diciendo: ¡Ay, ay, aquella gran ciudad, que estaba vestida de lino finísimo, y de escarlata, y de grana, y estaba dorada con oro, y adornada de piedras preciosas y de perlas!