2 Reyes 22:19

y tu corazón se enterneció, y te humillaste delante de Jehová, cuando oíste lo que yo he pronunciado contra este lugar y contra sus moradores, que vendrían a ser asolados y malditos, y rasgaste tus vestiduras, y lloraste en mi presencia, también yo te he oído, dice Jehová.

1 Reyes 21:29

¿No has visto como Acab se ha humillado delante de mí? Pues por cuanto se ha humillado delante de mí, no traeré el mal en sus días; en los días de su hijo traeré el mal sobre su casa.

Salmos 51:17

Los sacrificios de Dios son el espíritu quebrantado; al corazón contrito y humillado no despreciarás tú, oh Dios.

Jeremías 26:6

Yo pondré esta casa como Silo, y daré esta ciudad en maldición a todas las gentes de la tierra.

Éxodo 10:3

Entonces Moisés y Aarón vinieron a Faraón, y le dijeron: Jehová, el Dios de los hebreos dice así: ¿Hasta cuándo no querrás humillarte delante de mí? Deja ir a mi pueblo para que me sirvan.

Isaías 57:15

Porque así dice el Alto y Sublime, el que habita la eternidad, y cuyo nombre es el Santo: Yo habito en la altura y la santidad, y con el quebrantado y humilde de espíritu, para hacer vivir el espíritu de los humildes, y para vivificar el corazón de los quebrantados.

Jeremías 44:22

Y no pudo soportar más Jehová a causa de la maldad de vuestras obras, a causa de las abominaciones que habíais hecho: por tanto vuestra tierra fue en asolamiento, y en espanto, y en maldición, hasta no quedar morador, como hoy.

Levítico 26:31-32

Y tornaré vuestras ciudades en ruinas, y asolaré vuestros santuarios, y no oleré la fragancia de vuestro suave perfume.

1 Samuel 24:5

Sucedió después de esto que el corazón de David le golpeaba, por haber cortado la orilla del manto de Saúl.

Miqueas 6:8

Oh hombre, Él te ha declarado lo que es bueno, y ¿qué pide Jehová de ti? Solamente hacer justicia, y amar misericordia, y caminar humildemente con tu Dios.

Levítico 26:40-41

Y confesarán su iniquidad, y la iniquidad de sus padres, por su prevaricación con que prevaricaron contra mí; y también porque anduvieron conmigo en oposición,

Números 25:6

Y he aquí un varón de los hijos de Israel vino y trajo una madianita a sus hermanos, a ojos de Moisés y de toda la congregación de los hijos de Israel, que estaban llorando a la puerta del tabernáculo de la congregación.

Deuteronomio 29:23

(Azufre y sal, calcinada está toda su tierra; no será sembrada, ni producirá, ni crecerá en ella hierba alguna, como en la destrucción de Sodoma y de Gomorra, de Adma y de Zeboim, que Jehová destruyó en su furor y en su ira);

Jueces 2:4-5

Y aconteció que cuando el Ángel de Jehová habló estas palabras a todos los hijos de Israel, el pueblo lloró en alta voz.

Jueces 20:26

Entonces subieron todos los hijos de Israel, y todo el pueblo, y vinieron a la casa de Dios; y lloraron, y se sentaron allí delante de Jehová, y ayunaron aquel día hasta la tarde; y sacrificaron holocaustos y ofrendas de paz delante de Jehová.

2 Reyes 19:20

Entonces Isaías hijo de Amoz envió a decir a Ezequías: Así dice Jehová, Dios de Israel: Lo que me rogaste acerca de Senaquerib rey de Asiria, he oído.

2 Reyes 20:5

Vuelve, y di a Ezequías, príncipe de mi pueblo: Así dice Jehová, el Dios de David tu padre: Yo he oído tu oración, y he visto tus lágrimas; he aquí yo te sano; al tercer día subirás a la casa de Jehová.

2 Reyes 22:11

Y sucedió que cuando el rey hubo oído las palabras del libro de la ley, rasgó sus vestiduras.

2 Crónicas 33:12

Mas luego que fue puesto en angustias, oró a Jehová su Dios, humillado grandemente en la presencia del Dios de sus padres.

2 Crónicas 33:19

Su oración también, y cómo fue oído, todos sus pecados, y su prevaricación, los lugares donde edificó lugares altos y había puesto imágenes de Asera e ídolos antes que se humillase, he aquí estas cosas están escritas en las palabras de los videntes.

2 Crónicas 33:23

Pero nunca se humilló delante de Jehová, como se humilló Manasés su padre; antes bien Amón aumentó el pecado.

Esdras 9:3-4

Lo cual oyendo yo, rasgué mi vestidura y mi manto, y arranqué pelo de mi cabeza y de mi barba, y me senté atónito.

Esdras 10:1

Y orando Esdras y confesando, llorando y postrándose delante de la casa de Dios, se juntó a él una muy grande multitud de Israel, hombres, mujeres y niños; y lloraba el pueblo con gran llanto.

Nehemías 1:4

Y sucedió que, cuando yo oí estas palabras, me senté y lloré, e hice duelo por algunos días, y ayuné y oré delante del Dios del cielo.

Nehemías 8:9

Y Nehemías el Tirsata, y el sacerdote Esdras, escriba, y los levitas que hacían entender al pueblo, dijeron a todo el pueblo: Día santo es a Jehová nuestro Dios; no os entristezcáis, ni lloréis: porque todo el pueblo lloraba oyendo las palabras de la ley.

Salmos 119:120

Mi carne se ha estremecido por temor de ti; y de tus juicios tengo miedo.

Salmos 119:136

Ríos de agua descendieron de mis ojos, porque no guardaban tu ley.

Isaías 46:12

Oídme, duros de corazón, que estáis lejos de la justicia.

Isaías 66:2

Mi mano hizo todas estas cosas, y así todas estas cosas fueron, dice Jehová; pero miraré a aquel que es pobre y humilde de espíritu, y que tiembla a mi palabra.

Isaías 66:5

Oíd palabra de Jehová, vosotros los que tembláis a su palabra: Vuestros hermanos que os aborrecen, y os echan fuera por causa de mi nombre, dijeron: Jehová sea glorificado. Mas Él se mostrará para alegría vuestra, y ellos serán confundidos.

Jeremías 9:1

¡Oh si mi cabeza se hiciese aguas, y mis ojos fuentes de lágrimas, para que llore día y noche los muertos de la hija de mi pueblo!

Jeremías 13:17

Mas si no oyereis esto, en secreto llorará mi alma a causa de vuestra soberbia; y llorando amargamente, se desharán mis ojos en lágrimas, porque el rebaño de Jehová es llevado cautivo.

Jeremías 14:17

Les dirás, pues, esta palabra: Derramen mis ojos lágrimas noche y día, y no cesen; porque de gran quebranto es quebrantada la virgen hija de mi pueblo, de muy grave herida.

Jeremías 36:24

Y no tuvieron temor, ni rasgaron sus vestiduras, ni el rey ni ninguno de sus siervos que oyeron todas estas palabras.

Jeremías 36:29-32

Y dirás a Joacim rey de Judá: Así dice Jehová: Tú quemaste este rollo, diciendo: ¿Por qué escribiste en él, diciendo: De cierto, vendrá el rey de Babilonia, y destruirá esta tierra, y hará que no queden en ella hombres ni animales?

Ezequiel 9:4

y le dijo Jehová: Pasa por medio de la ciudad, por medio de Jerusalén, y pon una señal en la frente a los hombres que gimen y que claman a causa de todas las abominaciones que se hacen en medio de ella.

Lucas 19:41

Y cuando llegó cerca de la ciudad, al verla, lloró sobre ella,

Romanos 2:4-5

¿O menosprecias las riquezas de su benignidad, y paciencia y longanimidad, ignorando que la bondad de Dios te guía al arrepentimiento?

Romanos 9:2-3

Que tengo gran tristeza y continuo dolor en mi corazón.

Santiago 4:6-10

Mas Él da mayor gracia. Por esto dice: Dios resiste a los soberbios, y da gracia a los humildes.

1 Pedro 5:5-6

Igualmente, jóvenes, sujetaos a los ancianos; y todos sujetaos unos a otros, y vestíos de humildad; porque Dios resiste a los soberbios, y da gracia a los humildes.

Tesoro del Conocimiento Bíblico no añadido

Reina Valera Gómez (© 2010)