2 Samuel 22:45

Los extraños temblaban ante mi mandamiento; apenas oían algo de mí me obedecían.

Salmos 66:3

Decid a Dios: ¡Cuán terrible eres en tus obras! Por lo grande de tu fortaleza se sujetarán a ti tus enemigos.

Salmos 81:15

Los aborrecedores del SEÑOR se le hubieran sometido; y el tiempo de ellos fuera para siempre.

Deuteronomio 33:29

Bienaventurado tú, oh Israel, ¿Quién como tú, pueblo salvo por el SEÑOR, escudo de tu socorro, y espada de tu excelencia? Así que tus enemigos serán hallados mentirosos ante ti, y tú hollarás sobre sus alturas.

Salmos 18:44-45

Al oír de mí, me obedeció; los hijos de extraños se sometieron a mí aun contra su voluntad;

Isaías 56:3

Y el hijo del extranjero, allegado al SEÑOR, no hable diciendo: Me apartará totalmente el SEÑOR de su pueblo. Ni diga el eunuco: He aquí yo soy árbol seco.

Isaías 56:6

Y a los hijos de los extranjeros, que se allegaren al SEÑOR, para ministrarle, y que amaren el nombre del SEÑOR, para ser sus siervos; todos los que guardaren el Sábado de contaminarlo, y abrazaren mi Pacto,

Hechos 8:13

El mismo Simón creyó también entonces, y bautizándose, se llegó a Felipe; y viendo los milagros y grandes maravillas que se hacían, estaba atónito.

Hechos 8:21-23

No tienes tú parte ni suerte en este negocio; porque tu corazón no es recto delante de Dios.

Tesoro del Conocimiento Bíblico no añadido

Biblia del Jubileo 2000 (Grátis) copyright