Hechos 24:26
Esperando también con esto, que de parte de Pablo le sería dado dinero para que le soltase; por lo cual, haciéndole venir muchas veces, hablaba con él.
Éxodo 23:8
No recibirás presente; porque el presente ciega a los que ven, y pervierte las palabras del justo.
Deuteronomio 16:19
No tuerzas el derecho; no hagas acepción de personas, ni tomes soborno; porque el soborno ciega los ojos de los sabios, y pervierte las palabras de los justos.
1 Samuel 8:3
Mas sus hijos no anduvieron por sus caminos, antes se desviaron tras la avaricia, recibiendo cohecho y pervirtiendo el derecho.
1 Samuel 12:3
Aquí estoy; atestiguad contra mí delante de Jehová y delante de su ungido, si he tomado el buey de alguno, o si he tomado el asno de alguno, o si he calumniado a alguien, o si he agraviado a alguno, o si de alguien he tomado cohecho por el cual haya cerrado mis ojos: y yo os restituiré.
2 Crónicas 19:7
Sea, pues, con vosotros el temor de Jehová; guardad y haced; porque en Jehová nuestro Dios no hay iniquidad, ni acepción de personas, ni recibir cohecho.
Job 15:34
Porque la congregación de los hipócritas será asolada, y fuego consumirá las tiendas de soborno.
Salmos 26:9-10
No juntes con los pecadores mi alma, ni mi vida con hombres sanguinarios:
Proverbios 17:8
Piedra preciosa es el don a quien lo posee; a dondequiera que se vuelve, prospera.
Proverbios 17:23
El impío toma soborno del seno, para pervertir las sendas del derecho.
Proverbios 19:6
Muchos buscan el favor del príncipe; y todos son amigos del hombre que da.
Proverbios 29:4
El rey con el juicio afirma la tierra; mas el que acepta el soborno la destruye.
Isaías 1:23
Tus príncipes son prevaricadores y compañeros de ladrones; todos aman el soborno, y van tras las recompensas; no oyen en juicio al huérfano, ni llega a ellos la causa de la viuda.
Isaías 33:15
El que camina en justicia, y habla lo recto; el que aborrece la ganancia de violencias, el que sacude sus manos por no recibir cohecho, el que tapa su oído para no oír propuestas sanguinarias, el que cierra sus ojos para no ver cosa mala:
Isaías 56:11
Sí, ellos son perros comilones e insaciables; y son pastores que no pueden entender: todos ellos miran por sus propios caminos, cada uno busca su propio provecho, cada uno por su lado.
Ezequiel 22:27
Sus príncipes en medio de ella como lobos que arrebataban presa, derramando sangre, para destruir las almas, para obtener ganancia deshonesta.
Ezequiel 33:31
Y vendrán a ti como viene el pueblo, y estarán delante de ti como mi pueblo, y oirán tus palabras, y no las pondrán por obra; porque con su boca muestran mucho amor, pero su corazón va en pos de su avaricia.
Oseas 4:18
Su bebida se corrompió; fornicaron pertinazmente; sus príncipes amaron lo que avergüenza.
Oseas 12:7-8
Es mercader que tiene en su mano peso falso, amador de opresión.
Amós 2:6-7
Así dice Jehová: Por tres pecados de Israel, y por el cuarto, no revocaré su castigo; porque vendieron por dinero al justo, y al pobre por un par de zapatos:
Miqueas 3:11
Sus cabezas juzgan por cohecho, y sus sacerdotes enseñan por precio, y sus profetas adivinan por dinero; y se apoyan en Jehová diciendo: ¿No está Jehová entre nosotros? No vendrá mal sobre nosotros.
Miqueas 7:3
Para completar la maldad con ambas manos, el príncipe demanda, y el juez juzga por recompensa; el grande, habla el antojo de su alma, y lo confirman.
Hechos 24:2-3
Y cuando éste fue llamado, Tértulo comenzó a acusarle, diciendo: Debido a ti gozamos de gran quietud, y muchas cosas son bien gobernadas en la nación por tu providencia;
Hechos 24:17
Mas pasados muchos años, vine a hacer limosnas a mi nación, y ofrendas.
1 Corintios 6:9
¿No sabéis que los injustos no heredarán el reino de Dios? No os engañéis: Ni los fornicarios, ni los idólatras, ni los adúlteros, ni los afeminados, ni los que se echan con varones,
Efesios 5:5-6
Porque sabéis esto, que ningún fornicario, o inmundo, o avaro, que es idólatra, tiene herencia en el reino de Cristo y de Dios.
1 Timoteo 6:9-10
Porque los que quieren enriquecerse, caen en tentación y lazo, y en muchas codicias necias y dañosas, que hunden a los hombres en perdición y muerte.
2 Pedro 2:3
y por avaricia harán mercadería de vosotros con palabras fingidas, sobre los cuales la condenación ya de largo tiempo no se tarda, y su perdición no se duerme.
2 Pedro 2:14-15
Tienen los ojos llenos de adulterio, y no pueden dejar de pecar. Seducen a las almas inestables, tienen un corazón ejercitado en la codicia; son hijos de maldición.
Tesoro del Conocimiento Bíblico no añadido