Hechos 3:13
El Dios de Abraham, de Isaac y de Jacob; el Dios de nuestros padres ha glorificado a su Hijo Jesús, a quien vosotros entregasteis, y negasteis delante de Pilato, cuando éste había determinado dejarle en libertad.
Mateo 22:32
Yo soy el Dios de Abraham, y el Dios de Isaac, y el Dios de Jacob? Dios no es Dios de muertos, sino de vivos.
Mateo 27:2
Y le llevaron atado, y le entregaron a Poncio Pilato, el gobernador.
Hechos 7:32
diciendo: Yo soy el Dios de tus padres, el Dios de Abraham, y el Dios de Isaac, y el Dios de Jacob. Y Moisés, temblando, no se atrevía a mirar.
Juan 19:15
Pero ellos dieron voces: ¡Fuera, fuera, crucifícale! Pilato les dijo: ¿A vuestro Rey he de crucificar? Los principales sacerdotes respondieron: No tenemos rey sino a César.
Éxodo 3:6
Y dijo: Yo soy el Dios de tu padre, Dios de Abraham, Dios de Isaac, Dios de Jacob. Entonces Moisés cubrió su rostro, porque tuvo miedo de mirar a Dios.
Salmos 2:6-12
Pero yo he puesto a mi Rey sobre Sión, mi santo monte.
Salmos 105:6-10
oh vosotros, simiente de Abraham su siervo, hijos de Jacob, sus escogidos.
Salmos 110:1-2
«Salmo de David» Jehová dijo a mi Señor: Siéntate a mi diestra, hasta que ponga a tus enemigos por estrado de tus pies.
Mateo 11:27
Todas las cosas me son entregadas por mi Padre; y nadie conoce al Hijo, sino el Padre, ni nadie conoce al Padre, sino el Hijo, y aquel a quien el Hijo lo quisiere revelar.
Mateo 20:19
y le entregarán a los gentiles para ser escarnecido, azotado, y crucificado, mas al tercer día resucitará.
Mateo 27:17-25
Y reuniéndose ellos, Pilato les dijo: ¿A quién queréis que os suelte; a Barrabás, o a Jesús que es llamado el Cristo?
Mateo 28:18
Y Jesús vino y les habló, diciendo: Toda potestad me es dada en el cielo y en la tierra.
Marcos 15:11
Mas los príncipes de los sacerdotes incitaron a la multitud, para que les soltase más bien a Barrabás.
Lucas 23:4
Y Pilato dijo a los príncipes de los sacerdotes, y a la gente: Ninguna falta hallo en este hombre.
Lucas 23:16-23
Le castigaré, pues, y le soltaré.
Juan 3:35-36
El Padre ama al Hijo y todas las cosas ha dado en su mano.
Juan 5:22-23
Porque el Padre a nadie juzga, sino que todo juicio encomendó al Hijo;
Juan 7:39
(Esto dijo del Espíritu Santo que habían de recibir los que creyesen en Él; porque el Espíritu Santo aún no había sido dado; porque Jesús no había sido aún glorificado.)
Juan 12:16
Estas cosas no las entendieron sus discípulos al principio; pero cuando Jesús fue glorificado, entonces se acordaron de que estas cosas estaban escritas de Él, y que le habían hecho estas cosas.
Juan 13:31-32
Entonces, cuando él hubo salido, Jesús dijo: Ahora es glorificado el Hijo del Hombre, y Dios es glorificado en Él.
Juan 16:14-15
Él me glorificará; porque tomará de lo mío, y os lo hará saber.
Juan 17:1-5
Estas cosas habló Jesús, y levantando los ojos al cielo, dijo: Padre, la hora ha llegado; glorifica a tu Hijo, para que tu Hijo también te glorifique a ti.
Juan 18:40
Entonces todos dieron voces otra vez, diciendo: No a Éste, sino a Barrabás. Y Barrabás era ladrón.
Juan 19:12
Desde entonces procuraba Pilato soltarle; pero los judíos daban voces, diciendo: Si a Éste sueltas, no eres amigo de César; cualquiera que se hace rey, se declara contra César.
Hechos 2:23-24
A Éste, entregado por determinado consejo y presciencia de Dios, prendisteis y matasteis por manos de los inicuos, crucificándole;
Hechos 2:33-36
Así que, exaltado por la diestra de Dios, y habiendo recibido del Padre la promesa del Espíritu Santo, ha derramado esto que ahora vosotros veis y oís.
Hechos 5:30-31
El Dios de nuestros padres resucitó a Jesús, al cual vosotros matasteis colgándole en un madero.
Hechos 13:27-28
Pues los que habitaban en Jerusalén, y sus príncipes, no conociendo a Éste, ni las palabras de los profetas que se leen todos los sábados, al condenarle, las cumplieron.
Hechos 22:14
Y él dijo: El Dios de nuestros padres te ha escogido, para que conozcas su voluntad, y veas al Justo, y oigas la voz de su boca.
Efesios 1:20-23
la cual operó en Cristo, resucitándole de los muertos, y sentándole a su diestra en los lugares celestiales,
Filipenses 2:9-11
Por lo cual Dios también le exaltó hasta lo sumo, y le dio un nombre que es sobre todo nombre;
Hebreos 2:9
Pero vemos a Jesús coronado de gloria y de honra, el cual fue hecho un poco menor que los ángeles, por el padecimiento de su muerte, para que por la gracia de Dios gustase la muerte por todos.
Hebreos 11:9-16
Por fe habitó en la tierra prometida como en tierra ajena, morando en tiendas con Isaac y Jacob, coherederos de la misma promesa:
Apocalipsis 1:5
y de Jesucristo, el testigo fiel, el primogénito de los muertos, y príncipe de los reyes de la tierra. Al que nos amó, y nos lavó de nuestros pecados con su propia sangre,
Apocalipsis 1:18
y el que vivo, y estuve muerto; y he aquí que vivo para siempre, amén. Y tengo las llaves de la muerte y del infierno.
Tesoro del Conocimiento Bíblico no añadido