Mateo 26:8

Lo cual viendo sus discípulos, se enojaron, diciendo: ¿Por qué se pierde esto?

Éxodo 5:17

Y él respondió: Estáis ociosos, sí, ociosos, y por eso decís: Vamos y sacrifiquemos á Jehová.

Y oyéndole hablar Eliab su hermano mayor con aquellos hombres, Eliab se encendió en ira contra David, y dijo: ¿Para qué has descendido acá? ¿y á quién has dejado aquellas pocas ovejas en el desierto? Yo conozco tu soberbia y la malicia de tu corazón, que

Eclesiastés 4:4

Visto he asimismo que todo trabajo y toda excelencia de obras mueve la envidia del hombre contra su prójimo. También esto es vanidad y aflicción de espíritu.

Amós 8:5

Diciendo: ¿Cuándo pasará el mes, y venderemos el trigo; y la semana, y abriremos los alfolíes del pan, y achicaremos la medida, y engrandeceremos el precio, y falsearemos el peso engañoso;

Hageo 1:2-4

Jehová de los ejércitos habla así, diciendo: Este pueblo dice: No es aún venido el tiempo, el tiempo de que la casa de Jehová sea reedificada.

Malaquías 1:7-10

Que ofrecéis sobre mi altar pan inmundo. Y dijisteis: ¿En qué te hemos amancillado? En que decís: La mesa de Jehová es despreciable.

Malaquías 1:13

Habéis además dicho: Oh qué trabajo! y lo desechasteis, dice Jehová de los ejércitos; y trajisteis lo hurtado, ó cojo, ó enfermo, y presentasteis ofrenda. ¿Seráme acepto eso de vuesta mano? dice Jehová.

Marcos 14:4

Y hubo algunos que se enojaron dentro de sí, y dijeron: ¿Para qué se ha hecho este desperdicio de ungüento?

Juan 12:4-6

Y dijo uno de sus discípulos, Judas Iscariote, hijo de Simón, el que le había de entregar:

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