Mateo 8:15 Y tocó su mano, y la fiebre la dejó; y ella se levantó, y les servía.

Y aconteció que cuando estaban sepultando a un hombre, súbitamente vieron una banda de hombres, y arrojaron al hombre en el sepulcro de Eliseo: y cuando llegó a tocar el muerto los huesos de Eliseo, revivió, y se levantó sobre sus pies.

Isaías 6:7

Y tocando con él sobre mi boca, dijo: He aquí que esto tocó tus labios, y es quitada tu culpa, y limpio tu pecado.

Mateo 8:3

Y Jesús extendiendo su mano le tocó, diciendo: Quiero; sé limpio. Y al instante quedó limpio de su lepra.

Mateo 9:20

Y he aquí una mujer que estaba enferma de flujo de sangre por ya doce años, se le acercó por detrás y tocó el borde de su manto.

Mateo 9:29

Entonces les tocó los ojos, diciendo: Conforme a vuestra fe os sea hecho.

Mateo 14:36

y le rogaban que les dejase tocar tan sólo el borde de su manto; y todos los que le tocaban, quedaban sanos.

Mateo 20:34

Entonces Jesús, teniendo compasión de ellos, tocó sus ojos, y al instante sus ojos recibieron la vista; y le siguieron.

Marcos 1:41

Y Jesús, teniendo compasión de él, extendió su mano y le tocó, y le dijo: Quiero, sé limpio.

Lucas 4:38-39

Y levantándose, salió de la sinagoga, y entró en casa de Simón. Y la suegra de Simón estaba con una gran fiebre; y le rogaron por ella.

Lucas 8:54

Mas Él echó fuera a todos, y tomándola de la mano, le habló, diciendo: Muchacha, levántate.

Juan 12:1-3

Entonces Jesús, seis días antes de la pascua, vino a Betania, donde estaba Lázaro, el que había estado muerto, a quien había resucitado de los muertos.

Hechos 19:11-13

Y hacía Dios milagros incomparables por mano de Pablo;

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Lecturas contextuales

¹⁴ Y vino Jesús a casa de Pedro, y vio a la suegra de éste, postrada, y con fiebre. ¹⁵ Y tocó su mano, y la fiebre la dejó; y ella se levantó, y les servía. ¹⁶ Y caída la tarde, trajeron a Él muchos endemoniados; y con su palabra echó fuera a los espíritus, y sanó a todos los que estaban enfermos;