57 Versículos de la Biblia sobre La esperanza, en dios

Espera, oh Israel, en Jehová desde ahora y para siempre.

A los ricos de este mundo manda que no sean altivos, ni pongan la esperanza en las riquezas inciertas, sino en el Dios vivo, quien nos da todas las cosas en abundancia para que las disfrutemos.

Esforzaos todos vosotros los que esperáis en Jehová, y Él fortalecerá vuestro corazón.

Espere Israel a Jehová; porque en Jehová hay misericordia, y abundante redención con Él.

Gozosos en la esperanza, sufridos en la tribulación, constantes en la oración.

Mantengamos firme, sin fluctuar, la profesión de nuestra fe; que fiel es el que prometió;

Los que te temen me verán, y se alegrarán; porque en tu palabra he esperado.

Y no quites de mi boca en ningún tiempo la palabra de verdad; porque en tus juicios he esperado.

Esperé yo a Jehová, esperó mi alma; en su palabra he esperado.

No se cansará, ni desmayará, hasta que haya establecido juicio en la tierra; y las islas esperarán su ley.

Y ahora, por la esperanza de la promesa que hizo Dios a nuestros padres, comparezco y soy juzgado;

Porque las cosas que antes fueron escritas, para nuestra enseñanza fueron escritas; para que por la paciencia y consolación de las Escrituras, tengamos esperanza.

por la esperanza que os está guardada en el cielo, de la cual habéis oído por la palabra verdadera del evangelio,

¿Por qué te abates, oh alma mía, y te turbas dentro de mí? Espera en Dios; porque aún he de alabarle por la ayuda de su presencia.

el cual nos libró, y nos libra; y en quien confiamos que aún nos librará de tan grande muerte;

Entonces respondió Secanías hijo de Jehiel, de los hijos Elam, y dijo a Esdras: Nosotros hemos prevaricado contra nuestro Dios, pues tomamos esposas extranjeras de los pueblos de la tierra; pero aún hay esperanza para Israel sobre esto.

por tanto, el menesteroso tiene esperanza, y la iniquidad cierra su boca.

He aquí, aunque Él me matare, en Él esperaré; pero sostendré delante de Él mis caminos.

Porque no para siempre será olvidado el pobre; ni la esperanza de los pobres perecerá perpetuamente.

Mira mis enemigos, que se han multiplicado, y con odio violento me aborrecen. Guarda mi alma, y líbrame; no sea yo avergonzado, porque en ti confié. Integridad y rectitud me guarden; porque en ti he esperado.

Susténtame conforme a tu palabra, y viviré; y no dejes que me avergüence de mi esperanza.

¿Has desechado enteramente a Judá? ¿Ha aborrecido tu alma a Sión? ¿Por qué nos hiciste herir sin que haya curación para nosotros? Esperamos paz, y no hubo bien; tiempo de sanidad, y he aquí turbación.

Y la que en verdad es viuda y sola, confíe en Dios, y permanezca en súplicas y oraciones noche y día.

Bienaventurado aquel cuya ayuda es el Dios de Jacob, cuya esperanza está en Jehová su Dios:

estarás confiado, porque hay esperanza; mirarás alrededor, y dormirás seguro.

Ciertamente ninguno de cuantos en ti esperan será confundido: Serán avergonzados los que se rebelan sin causa.

Vanidad es el caballo para salvarse; no librará por la grandeza de su fuerza. He aquí, el ojo de Jehová sobre los que le temen, sobre los que esperan en su misericordia;

Y ahora, Señor, ¿qué esperaré? Mi esperanza está en ti.

Te alabaré para siempre por lo que has hecho; y esperaré en tu nombre, porque es bueno, delante de tus santos.

Porque tú, oh Señor Jehová, eres mi esperanza; seguridad mía desde mi juventud.

Se complace Jehová en los que le temen, y en los que esperan en su misericordia.

¿Hay entre las vanidades de las naciones quien haga llover? ¿Y darán los cielos lluvias? ¿No eres tú, oh Jehová, nuestro Dios? En ti, pues, esperamos; pues tú hiciste todas estas cosas.

Esto traigo a mi memoria, por lo cual tengo esperanza. Es por la misericordia de Jehová que no hemos sido consumidos, porque nunca decayeron sus misericordias.

teniendo esperanza en Dios que ha de haber resurrección de los muertos, así de justos como de injustos, la cual también ellos esperan.

Y otra vez Isaías dice: Saldrá raíz de Isaí, y el que se levantará para reinar sobre los gentiles: Los gentiles esperarán en Él.

Que por esto también trabajamos y sufrimos oprobios, porque esperamos en el Dios viviente, el cual es el Salvador de todos los hombres, mayormente de los que creen.

Porque los malignos serán talados, mas los que esperan en Jehová, ellos heredarán la tierra.

pero los que esperan en Jehová tendrán nuevas fuerzas; levantarán las alas como águilas, correrán, y no se cansarán, caminarán, y no se fatigarán.

Y el Dios de esperanza os llene de todo gozo y paz en el creer, para que abundéis en esperanza por el poder del Espíritu Santo.

Sea tu misericordia, oh Jehová, sobre nosotros, según esperamos en ti.

Alma mía, espera solamente en Dios; porque en Él está mi esperanza.

Mas yo esperaré siempre, y aún te alabaré más y más.

Así será a tu alma el conocimiento de la sabiduría; si la hallares tendrá recompensa, y al fin tu esperanza no será cortada. Oh impío, no aceches la tienda del justo, no saquees su cámara; porque siete veces cae el justo, y vuelve a levantarse; mas los impíos caerán en el mal.

Cercana está mi justicia, ha salido mi salvación, y mis brazos juzgarán a los pueblos; las islas esperarán en mí, y en mi brazo pondrán su esperanza.

Porque yo sé los pensamientos que tengo acerca de vosotros, dice Jehová, pensamientos de paz, y no de mal, para daros el fin que esperáis.

Bueno es Jehová a los que en Él esperan, al alma que le busca.

Pero yo miraré a Jehová, esperaré en el Dios de mi salvación; el Dios mío me oirá.

Volveos a la fortaleza, oh prisioneros de esperanza; hoy también os anuncio que os restauraré el doble.

El cual creyó en esperanza contra esperanza, para venir a ser padre de muchas naciones, conforme a lo que le había sido dicho: Así será tu simiente.

por quien también tenemos entrada por la fe a esta gracia en la cual estamos firmes, y nos gloriamos en la esperanza de la gloria de Dios.

Y nuestra esperanza de vosotros es firme; sabiendo que como sois partícipes de las aflicciones, así también lo seréis de la consolación.

No gloriándonos desmedidamente en trabajos ajenos; mas teniendo esperanza de que cuando vuestra fe crezca, seremos mucho más engrandecidos entre vosotros, conforme a nuestra regla.

recordando sin cesar vuestra obra de fe, y trabajo de amor y paciencia en la esperanza en nuestro Señor Jesucristo, delante del Dios y Padre nuestro.

que con mansedumbre corrija a los que se oponen; si quizá Dios les dé que se arrepientan para conocer la verdad,

en la esperanza de la vida eterna, la cual Dios, que no puede mentir, prometió desde antes del principio de los siglos,

Porque así también se ataviaban en el tiempo antiguo aquellas santas mujeres que esperaban en Dios, siendo sujetas a sus maridos;

Y cualquiera que tiene esta esperanza en Él, se purifica a sí mismo, así como Él es puro.