43 Versículo de la Biblia sobre la opresión

Si opresión de pobres, y extorsión de derecho y de justicia vieres en la provincia, no te maravilles de ello; porque sobre el alto está mirando otro más alto, y uno más alto está sobre ellos.

Por la opresión de los pobres, por el gemido de los necesitados, ahora me levantaré, dice Jehová; los pondré a salvo del que contra ellos se engríe.

Con justicia serás adornada; estarás lejos de opresión, porque no temerás; y del terror, porque no se acercará a ti.

Ciertamente la opresión hace enloquecer al sabio; y el soborno corrompe el corazón.

No confiéis en la violencia, ni en la rapiña; no os envanezcáis; si se aumentaren las riquezas, no pongáis el corazón en ellas.

Y me volví yo, y vi todas las violencias que se hacen debajo del sol; y he aquí las lágrimas de los oprimidos, sin tener quien los consuele; y la fuerza estaba en la mano de sus opresores, y para ellos no había consolador.

Pero cuanto más los oprimían, tanto más se multiplicaban y crecían; así que ellos estaban fastidiados de los hijos de Israel.

¡Ay de los que decretan leyes injustas, y escriben tiranía que ellos han prescrito,

A causa de la multitud de las violencias clamarán, y se lamentarán por el poderío de los grandes.

El que oprime al pobre para acrecentar su riqueza, y que da al rico, ciertamente vendrá a pobreza.

Líbrame de la violencia de los hombres; y guardaré tus mandamientos.

Por tanto el Santo de Israel dice así: Porque desechasteis esta palabra, y confiasteis en violencia y en iniquidad, y en ello os habéis apoyado;

Y codiciaron las heredades, y las robaron; y casas, y las tomaron; oprimieron al hombre y a su casa, al hombre y a su heredad.

El fruto de tu tierra y todo tu trabajo comerá pueblo que no conociste; y sólo serás oprimido y quebrantado todos los días.

Para juzgar al huérfano y al oprimido, a fin de que no vuelva más a hacer violencia el hombre de la tierra.

De engaño y de violencia redimirá sus almas; y la sangre de ellos será preciosa en sus ojos.

para apartar del juicio a los pobres, y para quitar el derecho a los afligidos de mi pueblo; para despojar a las viudas, y robar a los huérfanos!

Aprended a hacer el bien; buscad juicio, restituid al agraviado, haced justicia al huérfano, abogad por la viuda.

Y a los que te oprimen les haré comer sus propias carnes, y con su sangre serán embriagados como con vino dulce; y conocerá toda carne que yo Jehová soy tu Salvador, y tu Redentor, el Fuerte de Jacob.

Al pobre librará de su pobreza, y en la aflicción despertará su oído.

a causa de la voz del enemigo, por la opresión del impío; porque iniquidad echaron sobre mí, y con furor me aborrecen.

Mas tus ojos y tu corazón no son sino para tu avaricia, y para derramar la sangre inocente, y para opresión, y para hacer agravio.

Los opresores de mi pueblo son muchachos, y mujeres se enseñorearon de él. Pueblo mío, los que te guían te engañan, y tuercen el curso de tus caminos.

Diré a Dios: Roca mía, ¿por qué te has olvidado de mí? ¿Por qué andaré yo enlutado por la opresión del enemigo,

Entonces dijo a Abram: Ten por cierto que tu simiente será peregrina en tierra no suya, y servirá a los de allí y será afligida por cuatrocientos años.

Y vendrán a ti humillados los hijos de los que te afligieron, y se postrarán a las plantas de tus pies todos los que te escarnecían, y te llamarán Ciudad de Jehová, Sión del Santo de Israel.

Angustiado Él, y afligido, no abrió su boca; como cordero fue llevado al matadero; y como oveja delante de sus trasquiladores, enmudeció, y no abrió su boca.

Agravios hay en medio de ella, y el fraude y engaño no se apartan de sus plazas.

Jehová el que hace justicia y derecho a todos los que padecen violencia.

Y sus hijos serán como en el pasado y su congregación será afirmada delante de mí; y castigaré a todos sus opresores.

cómo Dios ungió a Jesús de Nazaret con el Espíritu Santo y con poder; el cual anduvo haciendo el bien, y sanando a todos los oprimidos del diablo; porque Dios estaba con Él.

Y luego son menoscabados y abatidos a causa de tiranía, de males y congojas.

El clamor, pues, de los hijos de Israel ha venido delante de mí, y también he visto la opresión con que los egipcios los oprimen.

Blasfeman, y hablan con maldad de hacer violencia; hablan con altanería.

Juzgará a los afligidos del pueblo, salvará los hijos del menesteroso, y quebrantará al violento.

Bien que os dará el Señor pan de congoja y agua de angustia, con todo, tus enseñadores nunca más te serán quitados, sino que tus ojos verán tus enseñadores.

Porque he sabido vuestras muchas rebeliones, y vuestros grandes pecados: que afligen al justo, y reciben cohecho, y a los pobres en la puerta hacen perder su causa.

Y le dijo Dios así: Que su simiente sería extranjera en tierra ajena, y que los reducirían a servidumbre y los maltratarían por cuatrocientos años.

El Espíritu del Señor está sobre mí: Por cuanto me ha ungido para dar buenas nuevas a los pobres: Me ha enviado para sanar a los quebrantados de corazón: Para predicar libertad a los cautivos: Y a los ciegos vista: Para poner en libertad a los quebrantados:

Pues que tú eres el Dios de mi fortaleza, ¿por qué me has desechado? ¿Por qué andaré enlutado por la opresión del enemigo?