'Braman' en la Biblia
Porque he aquí que braman tus enemigos; y tus aborrecedores han alzado cabeza.
Los leoncillos braman a la presa, y para buscar de Dios su comida.
¿Ay!, bramar de muchos pueblos que braman como el bramido de los mares; rugir de naciones que rugen como el rugido de violentas aguas.
Empuñan arco y jabalina, crueles son, no tienen misericordia; sus voces braman como el mar, y montan a caballo como hombres dispuestos para la guerra contra ti, hija de Sion.
Así dijo el SEÑOR, que da el sol para luz del día, las leyes de la luna y de las estrellas para luz de la noche; que parte el mar y sus ondas braman; el SEÑOR de los ejércitos es su Nombre: