138 casos

'Llevó' en la Biblia

Cuando la vio Siquem, hijo de Hamor Heveo, príncipe de la tierra, se la llevó y se acostó con ella y la violó.

El hombre hizo como José le dijo, y llevó a los hombres a casa de José.

Después el hombre llevó a los hombres a casa de José, y les dio agua y se lavaron los pies. También dio forraje a sus asnos.

El les llevó porciones de su propia mesa, pero la porción de Benjamín era cinco veces mayor que la de cualquiera de ellos. Bebieron, pues, y se alegraron con él.

Cuando el niño creció, ella lo llevó a la hija de Faraón, y vino a ser hijo suyo; y le puso por nombre Moisés, diciendo: ``Pues lo he sacado de las aguas."

Y el SEÑOR cambió {el viento} a un viento occidental muy fuerte que se llevó las langostas y las arrojó al Mar Rojo. Ni una langosta quedó en todo el territorio de Egipto.

Y todo el pueblo respondió a una, y dijeron: ``Haremos todo lo que el SEÑOR ha dicho." Y Moisés llevó al SEÑOR las palabras del pueblo.

~`Ustedes no harán como hacen en la tierra de Egipto en la cual moraron, ni harán como hacen en la tierra de Canaán adonde Yo los llevo; no andarán en los estatutos de ellos.

~`Guarden, por tanto, todos Mis estatutos y todas Mis ordenanzas, y cúmplanlos, a fin de que no los vomite la tierra a la cual los llevo para morar en ella.

``Habla a los Israelitas, y diles: `Cuando entren en la tierra adonde los llevo,

Moisés entonces sacó todas las varas de la presencia del SEÑOR y las llevó a los Israelitas; y ellos las miraron y cada uno tomó su vara.

Lo llevó al campo de Zofim, sobre la cumbre del Pisga, y edificó siete altares y ofreció un novillo y un carnero en {cada} altar.

Entonces Balac llevó a Balaam a la cumbre del Monte Peor, que da hacia el desierto.

y en el desierto, donde has visto cómo el SEÑOR tu Dios te llevó, como un hombre lleva a su hijo, por todo el camino que anduvieron hasta llegar a este lugar.'

"El tiempo que nos llevó para venir de Cades Barnea, hasta que cruzamos el torrente de Zered, fue de treinta y ocho años; hasta que pereció toda la generación de los hombres de guerra de en medio del campamento, como el SEÑOR les había jurado.

Como un águila que despierta su nidada, Que revolotea sobre sus polluelos, Extendió Sus alas y los tomó, Los llevó sobre Su plumaje.

Y Gedeón entró y preparó un cabrito y pan sin levadura con un efa de harina (22 litros). Puso la carne en una cesta y el caldo en un caldero, y {los} llevó y {se los} presentó al ángel debajo de la encina.

Pero Sansón permaneció acostado hasta la medianoche, y a la medianoche se levantó, y tomando las puertas de la ciudad con los dos postes, las arrancó junto con las trancas. Entonces se las echó sobre los hombros y las llevó hasta la cumbre del monte que está frente a Hebrón.

Su marido se levantó y fue tras ella para hablarle cariñosamente y hacerla volver, llevando consigo a su criado y un par de asnos. Y ella lo llevó dentro de la casa de su padre, y cuando el padre de la joven lo vio, se alegró de conocerlo.

Y se desviaron allí para entrar {y} alojarse en Guibeá. Cuando entraron, se sentaron en la plaza de la ciudad porque nadie los llevó a {su} casa para pasar la noche.

Y lo llevó a su casa y dio forraje a los asnos. Ellos se lavaron los pies, comieron y bebieron.

Después de haberlo destetado, llevó consigo al niño, y lo trajo a la casa del SEÑOR en Silo, aunque el niño era pequeño. También llevó un novillo de tres años, un efa (22 litros) de harina y un odre de vino.

Entonces Samuel tomó a Saúl y a su criado, los llevó a la sala y les dio un lugar a la cabecera de los invitados, que eran unos treinta hombres.

Y al entrar el pueblo en el bosque, vieron que la miel destilaba, pero nadie se llevó la mano a la boca, porque el pueblo temía el juramento.

Pero Jonatán no había oído cuando su padre puso al pueblo bajo juramento; por lo cual extendió la punta de la vara que {llevaba} en su mano, la metió en un panal de miel y se llevó la mano a la boca, y brillaron sus ojos.

Entonces David tomó la cabeza del Filisteo y la llevó a Jerusalén (Ciudad de Paz), pero puso sus armas en su tienda.

Cuando regresó David de matar al Filisteo, Abner lo tomó y lo llevó ante Saúl, con la cabeza del Filisteo en su mano.

Entonces Jonatán llamó a David y le comunicó todas estas palabras. Y Jonatán llevó a David ante Saúl, y estuvo en su presencia como antes.

Y David y sus hombres fueron a Keila y pelearon contra los Filisteos; y él se llevó sus ganados y los hirió con gran mortandad. Así libró David a los habitantes de Keila.

Entonces dijo David al sacerdote Abiatar, hijo de Ahimelec: ``Te ruego que me traigas el efod." Y Abiatar llevó el efod a David.

Cuando lo llevó, vieron que los Amalecitas estaban desparramados sobre toda aquella tierra, comiendo, bebiendo y bailando por el gran botín que habían tomado de la tierra de los Filisteos y de la tierra de Judá.

Pero Abner, hijo de Ner, comandante del ejército de Saúl, había tomado a Isboset, hijo de Saúl, y lo llevó a Mahanaim.

Entonces Amnón dijo a Tamar: ``Trae la comida a la alcoba para que yo coma de tu mano." Y Tamar tomó las tortas que había hecho y {las} llevó a su hermano Amnón a la alcoba.

Cuando ella se {las} llevó para que comiera, él le echó mano, y le dijo: ``Ven, acuéstate conmigo, hermana mía."

Benaía entró en la tienda del SEÑOR y le dijo: ``Así ha dicho el rey: `Sal {de ahí.}'" Pero él dijo: ``No, pues moriré aquí." Benaía llevó la respuesta al rey: ``Así Joab habló y así me respondió."

Los demás hechos de Zimri, y la conspiración que llevó a cabo, ¿no están escritos en el Libro de las Crónicas de los reyes de Israel?

``Dame a tu hijo," le respondió Elías. Y él lo tomó de su regazo y lo llevó a la cámara alta donde él vivía, y lo acostó en su propia cama.

Y el rey de Aram le dijo: ``Ve ahora, y enviaré una carta al rey de Israel." Y él fue y llevó consigo 340 kilos de plata y 6,000 {siclos} (68.4 kilos) de oro y diez mudas de ropa.

También llevó al rey de Israel la carta que decía: ``Y cuando llegue a ti esta carta, {comprenderás} que te he enviado a mi siervo Naamán para que lo cures de su lepra."

Entonces Eliseo les dijo: ``Este no es el camino, ni es ésta la ciudad; síganme y yo los guiaré al hombre que buscan." Y los llevó a Samaria.

En los días de Peka, rey de Israel, vino Tiglat Pileser, rey de Asiria, y tomó Ijón, Abel Bet Maaca, Janoa, Cedes, Hazor, Galaad y Galilea, toda la tierra de Neftalí; y se los llevó cautivos a Asiria.

El rey de Asiria lo escuchó, y el rey de Asiria subió contra Damasco y la tomó, y se llevó a {su pueblo} al destierro en Kir, y dio muerte a Rezín.

En el año noveno de Oseas, el rey de Asiria tomó Samaria y se llevó a Israel al destierro en Asiria, y los puso en Halah y en Habor, río de Gozán, y en las ciudades de los Medos.

Y el rey de Asiria llevó a Israel al destierro en Asiria, y los puso en Halah y en el Habor, río de Gozán, y en las ciudades de los Medos,

Después el rey ordenó que el sumo sacerdote Hilcías y los sacerdotes de segundo orden y los guardianes del umbral, sacaran del templo del SEÑOR todas las vasijas que se habían hecho para Baal, para la Asera (deidad femenina) y para todo el ejército de los cielos, y los quemó fuera de Jerusalén en los campos del Cedrón y llevó sus cenizas a Betel (Casa de Dios).

Faraón Necao hizo rey a Eliaquim, hijo de Josías, en lugar de Josías su padre, y cambió su nombre por el de Joacim. Pero tomó a Joacaz y {lo} llevó a Egipto, y allí murió.

Y se llevó en cautiverio a todo Jerusalén: a todos los jefes, a todos los hombres valientes, 10,000 cautivos, y a todos los artesanos y herreros. Nadie quedó, excepto la gente más pobre del país.

También se llevó a Joaquín en cautiverio a Babilonia. Asimismo se llevo en cautiverio de Jerusalén a Babilonia a la madre del rey y a las mujeres del rey, a sus oficiales y a los poderosos del país.

Todos los hombres valientes, 7,000 y los artesanos y herreros, 1,000 todos fuertes y aptos para la guerra, también a éstos el rey de Babilonia llevó en cautiverio a Babilonia.

Y degollaron a los hijos de Sedequías en su presencia, y a Sedequías le sacó los ojos, lo ató con cadenas de bronce y lo llevó a Babilonia.

y al resto del pueblo que había quedado en la ciudad, a los desertores que se habían pasado al rey de Babilonia y al resto de la multitud, {los} llevó en cautiverio Nabuzaradán, capitán de la guardia.

El capitán de la guardia se llevó además los incensarios y los tazones, lo que era de oro puro y lo que era de plata pura.

Nabuzaradán, capitán de la guardia, los tomó y se los llevó al rey de Babilonia en Ribla.

Beera su hijo, a quien Tilgat Pilneser, rey de los Asirios, se llevó al destierro; éste fue jefe de los Rubenitas.

Por lo cual el Dios de Israel movió el espíritu de Pul, rey de Asiria, o sea, el espíritu de Tilgat Pilneser, rey de Asiria, quien los llevó al destierro, es decir, a los Rubenitas, los Gaditas y a la media tribu de Manasés, llevándolos a Halah, Habor, Hara y al río de Gozán, hasta el día de hoy.

y Josadac fue al destierro cuando el SEÑOR se llevó en cautiverio a Judá y a Jerusalén por medio de Nabucodonosor.

es decir, Naamán, Ahías y Gera; éste los llevó al destierro, y fue el padre de Uza y de Ahiud.

Así que David no llevó consigo el arca a la ciudad de David, sino que la hizo llevar a la casa de Obed Edom el Geteo.

Así acabó Salomón la casa del SEÑOR y el palacio del rey, y llevó a cabo todo lo que se había propuesto hacer en la casa del SEÑOR y en su palacio.

Subió, pues, Sisac, rey de Egipto, contra Jerusalén y tomó los tesoros de la casa del SEÑOR y los tesoros del palacio del rey. De todo se apoderó; se llevó hasta los escudos de oro que había hecho Salomón.

Entonces Joás, rey de Israel, capturó en Bet Semes a Amasías, rey de Judá, hijo de Joás, hijo de Joacaz, y lo llevó a Jerusalén; y derribó la muralla de Jerusalén desde la Puerta de Efraín hasta la Puerta del Angulo, 180 metros.

y éste llevó el libro al rey y le dio más noticias: ``Todo lo que fue encomendado a sus siervos, lo están haciendo.

Y el rey de Egipto puso por rey sobre Judá y Jerusalén, a Eliaquim, hermano de Joacaz, y cambió su nombre por el de Joacim; pero a su hermano Joacaz, lo tomó Necao y lo llevó a Egipto.

Nabucodonosor también llevó {algunos} de los objetos de la casa del SEÑOR a Babilonia, y los puso en su templo en Babilonia.

Todos los objetos de la casa de Dios, grandes y pequeños, los tesoros de la casa del SEÑOR y los tesoros del rey y de sus oficiales, todo {se lo} llevó a Babilonia.

A los que habían escapado de la espada los llevó a Babilonia; y fueron siervos de él y de sus hijos hasta el dominio del reino de Persia,

~`Pero como nuestros padres provocaron a ira al Dios del cielo, El los entregó en mano de Nabucodonosor, rey de Babilonia, el Caldeo, {quien} destruyó este templo, y llevó cautivo al pueblo a Babilonia.

Y Amán tomó el manto y el caballo, vistió a Mardoqueo y lo llevó {a caballo} por la plaza de la ciudad, y anunció delante de él: ``Así se hace al hombre a quien el rey quiere honrar."

Recuerda, Señor, el oprobio de Tus siervos; {Cómo} llevo dentro de mí {el oprobio de} muchos pueblos,

Por tanto, Yo Le daré parte con los grandes Y con los fuertes repartirá despojos, Porque derramó Su alma hasta la muerte Y con los transgresores fue contado; Llevó el pecado de muchos, E intercedió por los transgresores.

Después que Nabucodonosor, rey de Babilonia, desterró a Jeconías, hijo de Joacim, rey de Judá, y a los oficiales de Judá junto con los artesanos y herreros de Jerusalén, y los llevó a Babilonia, el SEÑOR me mostró dos cestas de higos colocadas delante del templo del SEÑOR.

los cuales no tomó Nabucodonosor, rey de Babilonia, cuando llevó al destierro a Jeconías, hijo de Joacim, rey de Judá, de Jerusalén a Babilonia con todos los nobles de Judá y de Jerusalén.

~`Dentro de dos años haré volver a este lugar todos los utensilios de la casa del SEÑOR, que Nabucodonosor, rey de Babilonia, tomó de este lugar y llevó a Babilonia.

Pero Jeremías dijo: `` ¡No es verdad! No voy a pasarme a los Caldeos." Sin embargo él no le hizo caso. Apresó, pues, a Jeremías y lo llevó a los oficiales.

En cuanto al resto del pueblo que quedaba en la ciudad, a los desertores que se habían pasado a él, y los demás del pueblo que quedaban, Nabuzaradán, capitán de la guardia, {los} llevó cautivos a Babilonia.

Después sacó los ojos a Sedequías, y el rey de Babilonia lo ató con grillos de bronce y lo llevó a Babilonia y lo puso en prisión hasta el día de su muerte.

Entonces Nabuzaradán, capitán de la guardia, llevó al destierro a algunos de los más pobres del pueblo, al resto del pueblo que había quedado en la ciudad, a los desertores que se habían pasado al rey de Babilonia, y al resto de los artesanos.

El capitán de la guardia también se llevó los cuencos, los braseros, los tazones, los calderos, los candelabros, los cucharones y los tazones de libación, lo que era de oro puro y lo que era de plata pura.

Nabuzaradán, capitán de la guardia, los tomó y los llevó al rey de Babilonia en Ribla.

Este es el pueblo que Nabucodonosor llevó al destierro: en el año séptimo, 3,023 Judíos;

en el año veintitrés de Nabucodonosor, Nabuzaradán, capitán de la guardia, llevó al destierro a 745 Judíos; en total fueron 4,600 personas.

Y extendió {algo} semejante a una mano y me tomó por un mechón de mi cabello; y el Espíritu me alzó entre la tierra y el cielo y me llevó a Jerusalén en visiones de Dios, a la entrada de la puerta que mira al norte del {atrio} interior, allí donde {estaba} la morada del ídolo de los celos que provoca los celos.

Entonces me llevó a la entrada de la puerta de la casa del SEÑOR que está al norte; y {había} allí mujeres sentadas llorando a Tamuz.

Entonces me llevó al atrio interior de la casa del SEÑOR. Y a la entrada del templo del SEÑOR, entre el pórtico y el altar, {había} unos veinticinco hombres de espaldas al templo del SEÑOR y de cara al oriente, y se postraban hacia el oriente, hacia el sol.

Entonces el Espíritu me levantó y me llevó a la puerta oriental de la casa del SEÑOR que mira al oriente. Y a la entrada de la puerta {había} veinticinco hombres, y entre ellos vi a Jaazanías, hijo de Azur, y a Pelatías, hijo de Benaía, jefes del pueblo.

Y el Espíritu me levantó y me llevó a Caldea (Babilonia), a los desterrados, en visión por el Espíritu de Dios. Y se alejó de mí la visión que había visto.

``Dirás: `Así dice el Señor DIOS: ``Una gran águila de grandes alas, Largos piñones y espeso plumaje de muchos colores, Vino al Líbano y se llevó la copa del cedro;

Arrancó el más alto de sus renuevos, Lo llevó a una tierra de mercaderes Y lo puso en una ciudad de comerciantes.

``Dile ahora a la casa rebelde: ` ¿No saben lo que {significan} estas cosas?' Di: `El rey de Babilonia vino a Jerusalén, tomó a su rey y a sus príncipes y los llevó consigo a Babilonia.

~`Y tomó {a uno} de la familia real, hizo un pacto con él y le hizo prestar juramento. Se llevó también a los poderosos de la tierra,

En el año veinticinco de nuestro destierro, al principio del año, a los diez {días} del mes, catorce años después de haber sido tomada la ciudad, en aquel mismo día vino sobre mí la mano del SEÑOR, y me llevó allá.

En visiones de Dios, El me llevó a la tierra de Israel y me puso sobre un monte muy alto, sobre el cual, hacia el sur, {había} una construcción parecida a una ciudad.

Me llevó allá; y vi a un hombre cuyo aspecto era semejante al bronce, con un cordel de lino y una caña de medir (unos 3 m) en la mano, y estaba de pie en la puerta.

Entonces el hombre me llevó al atrio exterior, en el cual {había} cámaras y un pavimento construido todo alrededor del atrio; treinta cámaras {daban} al pavimento.

Resultados de Búsqueda por Versiones

Resultados de Búsqueda por Libro

Todos los Libros

Las citas bíblicas son tomadas Nueva Biblia de los Hispanos © 2005 by The Lockman Foundation, La Habra, Calif, http://www.lockman.org. Usadas con permiso