'No' en la Biblia
No os fijéis en que soy morena, porque el sol me ha quemado. Los hijos de mi madre se enojaron conmigo; me pusieron a guardar las viñas, {y} mi propia viña no guardé.
Si tú no lo sabes, ¿oh la más hermosa de las mujeres!, sal tras las huellas del rebaño, y apacienta tus cabritas junto a las cabañas de los pastores.
Yo os conjuro, oh hijas de Jerusalén, por las gacelas o por las ciervas del campo, que no levantéis ni despertéis a {mi} amor, hasta que quiera.
En mi lecho, por las noches, he buscado al que ama mi alma; lo busqué, mas no lo hallé.
``Me levantaré ahora, y andaré por la ciudad; por las calles y por las plazas buscaré al que ama mi alma." Lo busqué, mas no lo hallé.
Apenas los había pasado cuando hallé al que ama mi alma; lo agarré y no quise soltarlo, hasta que lo introduje en la casa de mi madre y en la alcoba de la que me concibió.
Yo os conjuro, oh hijas de Jerusalén, por las gacelas o por las ciervas del campo, que no levantéis ni despertéis a {mi} amor, hasta que quiera.
Toda tú eres hermosa, amada mía, y no hay defecto en ti.
Abrí yo a mi amado, pero mi amado se había retirado, se había ido. Tras su hablar salió mi alma. Lo busqué, y no lo hallé; lo llamé, y no me respondió.
¿Ah, si tú fueras como mi hermano, amamantado a los pechos de mi madre! {Si} te encontrara afuera, te besaría, y no me despreciarían.
Quiero que juréis, oh hijas de Jerusalén: que no despertaréis ni levantaréis a {mi} amor, hasta que quiera.
Las muchas aguas no pueden extinguir el amor, ni los ríos lo anegarán; si el hombre diera todos los bienes de su casa por amor, de cierto lo menospreciarían.
Tenemos una hermana pequeña, y todavía no tiene pechos; ¿qué haremos por nuestra hermana el día en que sea pedida?