'Ordena' en la Biblia
Y a ti se te ordena {decirles:} ``Haced esto: tomad carretas de la tierra de Egipto para vuestros pequeños y para vuestras mujeres, y traed a vuestro padre y venid.
Y Jehová dijo a Moisés: Desciende, ordena al pueblo que no traspasen el término para ver a Jehová, porque caerá multitud de ellos.
Ordena a Aarón y a sus hijos, diciendo: ``Esta es la ley del holocausto: el holocausto mismo {permanecerá} sobre el fuego, sobre el altar, toda la noche hasta la mañana, y el fuego del altar ha de mantenerse encendido en él.
Ordena a los hijos de Israel, y diles: ``Tendréis cuidado de presentar mi ofrenda, mi alimento para mis ofrendas encendidas, aroma agradable para mí, a su tiempo señalado."
Y los hijos de Gad y los hijos de Rubén hablaron a Moisés, diciendo: Tus siervos harán tal como mi señor ordena.
Ordena a los sacerdotes que llevan el arca del testimonio que suban del Jordán.
ordena ahora nuestro señor a sus siervos que están delante de usted, que busquen un hombre que sepa tocar el arpa, y cuando el espíritu malo de parte de Dios esté sobre usted, él tocará con su mano y le pondrá bien."
Ahora pues, ordena que me corten cedros del Líbano, y mis siervos estarán con tus siervos; y te daré salarios para tus siervos conforme a todo lo que tú digas, pues sabes que no hay nadie entre nosotros que sepa labrar madera como los sidonios.
Si pudieres, respóndeme: Ordena tus palabras delante de mí, ponte de pie.
El abre sus oídos para la instrucción, y ordena que se vuelvan del mal.
El cubre {sus} manos con el relámpago, y le ordena dar en el blanco.
aquélla gira y da vueltas por su sabia dirección, para hacer todo lo que El le ordena sobre la faz de toda la tierra.
El que ofrece sacrificio de acción de gracias me honra; y al que ordena {bien su} camino, le mostraré la salvación de Dios.
Y sea la luz de Jehová nuestro Dios sobre nosotros: Y ordena en nosotros la obra de nuestras manos, La obra de nuestras manos confirma.
Ordena mis pasos con tu palabra; y ninguna iniquidad se enseñoree de mí.
El hombre impío endurece su rostro; mas el recto ordena sus caminos.
Ordena tus labores de fuera, y tenlas listas para ti en el campo; y después edifica tu casa.
Murmullo de multitud suena en los montes, como de mucho pueblo; murmullo de sonido de reinos, de gentiles reunidos; el SEÑOR de los ejércitos ordena las tropas de la batalla.
En aquellos días cayó Ezequías enfermo para morir; y vino a él Isaías Profeta, hijo de Amoz, y le dijo: El SEÑOR dice así: Ordena tu casa, porque tú morirás, y no vivirás.
Y el heraldo proclamó con fuerza: Se os ordena a vosotros, pueblos, naciones y lenguas,
Y acercándose el tentador, Le dijo: ``Si eres Hijo de Dios, ordena que estas piedras se conviertan en pan."
Y El le dijo: ¿Qué deseas? Ella le dijo*: Ordena que en tu reino estos dos hijos míos se sienten uno a tu derecha y el otro a tu izquierda.
Por eso, ordena que el sepulcro quede asegurado hasta el tercer día, no sea que vengan sus discípulos, se lo roben, y digan al pueblo: ``Ha resucitado de entre los muertos"; y el último engaño será peor que el primero.
Ordena también estas cosas, para que sean irreprochables.