'Razón' en la Biblia

Y si alguno hiriere el ojo de su siervo, o el ojo de su sierva, y lo dañare, le dará libertad por razón de su ojo.

Dijo más Jehová a Aarón: He aquí yo te he dado también la guarda de mis ofrendas; todas las cosas consagradas de los hijos de Israel te he dado por razón de la unción, y a tus hijos, por estatuto perpetuo.

y dijeron a Moisés: Tus siervos han tomado razón de los hombres de guerra que están en nuestro poder, y ninguno ha faltado de nosotros.

Y os acercasteis a mí todos vosotros, y dijisteis: Enviemos varones delante de nosotros, que nos reconozcan la tierra y nos traigan de vuelta razón del camino por donde hemos de subir, y de las ciudades adonde hemos de llegar.

Y ella le respondió: No hay razón; mayor mal es éste de echarme fuera, que el que me has hecho. Mas él no la quiso oír.

Y ésta es la razón de la leva que el rey Salomón impuso para edificar la casa de Jehová, y su casa, y a Milo, y el muro de Jerusalén, y a Hazor, y Meguido, y Gezer.

Y como el rey pasaba, él dio voces al rey, y dijo: Tu siervo salió entre la tropa; y he aquí apartándose uno, me trajo a un hombre, diciendo: Guarda a este hombre, y si por alguna razón él llegare a faltar, tu vida será por la suya, o pagarás un talento de plata.

Tras mi palabra no replicaban, y mi razón destilaba sobre ellos.

¿He de mentir yo contra mi razón? Mi herida es incurable sin haber yo transgredido.

por la voz del que me injuria y vitupera, por razón del enemigo y del vengativo.

Por razón de tu templo en Jerusalén, los reyes te ofrecerán dones.

Más que los cabellos de mi cabeza son los sin causa que me aborrecen; Poderosos son los que quieren destruirme; Sin razón son mis enemigos; he tenido que pagar lo que no he robado.

No pleitees con alguno sin razón, si él no te ha hecho agravio.

Como zarcillo de oro en la nariz de un cerdo, es la mujer hermosa y apartada de razón.

Apliqué mi corazón al saber y a examinar; a inquirir la sabiduría y la razón; para conocer la maldad de la insensatez, y la necedad de la locura.

He aquí, esto he hallado, dice el Predicador, pesando las cosas una por una para hallar la razón.

Mujeres indolentes, levantaos, oíd mi voz; hijas confiadas, escuchad mi razón.

Porque así dice el Señor Jehová: Mi pueblo descendió a Egipto en tiempo pasado, para peregrinar allá; y el asirio lo oprimió sin razón.

Mas yo os digo que cualquiera que sin razón se enojare contra su hermano, estará en peligro del juicio; y cualquiera que dijere a su hermano: Raca, estará en peligro del concilio; y cualquiera que le dijere: Fatuo, estará expuesto al infierno de fuego.

Porque estamos en peligro de ser acusados de sedición por esto de hoy, no habiendo ninguna causa por la cual podamos dar razón de este concurso.

Porque me parece fuera de razón enviar un preso, y no informar de los cargos que haya en su contra.

sino santificad al Señor Dios en vuestros corazones, y estad siempre preparados para responder con mansedumbre y temor a todo el que os demande razón de la esperanza que hay en vosotros;