'Veces' en la Biblia
Y le respondió Jehová: Ciertamente que cualquiera que matare a Caín, siete veces será castigado. Entonces Jehová puso señal en Caín, para que no lo matase cualquiera que le hallara.
Si siete veces será vengado Caín, Lamec en verdad setenta veces siete lo será.
Y él respondió: Bien llamaron su nombre Jacob, que ya me ha suplantado dos veces; se apoderó de mi primogenitura, y he aquí ahora ha tomado mi bendición. Y dijo: ¿No has guardado bendición para mí?
Y vuestro padre me ha engañado, y me ha cambiado el salario diez veces; pero Dios no le ha permitido hacerme daño.
Así he estado veinte años en tu casa: catorce años te serví por tus dos hijas, y seis años por tu ganado; y has mudado mi salario diez veces.
Y él pasó delante de ellos, y se inclinó a tierra siete veces, hasta que llegó a su hermano.
Y el suceder el sueño a Faraón dos veces, significa que la cosa es firme de parte de Dios, y que Dios se apresura a hacerla.
Que si no nos hubiéramos detenido, ciertamente hubiéramos ya vuelto dos veces.
Y él tomó viandas de delante de sí para ellos; mas la porción de Benjamín era cinco veces mayor que cualquiera de las de ellos. Y bebieron y se alegraron con él.
Tres veces en el año se presentarán todos tus varones delante del Señor Jehová.
Tres veces en el año se presentarán todos tus varones delante de Jehová el Señor, Dios de Israel.
Porque yo arrojaré las naciones de tu presencia, y ensancharé tu término: y ninguno codiciará tu tierra, cuando tú subieres para presentarte delante de Jehová tu Dios tres veces en el año.
Y mojará el sacerdote su dedo en la sangre, y rociará de aquella sangre siete veces delante de Jehová, hacia el velo del santuario.
Y mojará el sacerdote su dedo en la misma sangre, y la rociará siete veces delante de Jehová hacia el velo.
Y roció de él sobre el altar siete veces, y ungió el altar y todos sus vasos, y la fuente y su base, para santificarlos.
y rociará siete veces sobre el que ha de ser purificado de la lepra, y le declarará limpio; y soltará la avecilla viva sobre la faz del campo.
Y mojará su dedo derecho en el aceite que tiene en su mano izquierda, y esparcirá del aceite con su dedo siete veces delante de Jehová:
y con su dedo derecho el sacerdote rociará del aceite que tiene en su mano izquierda, siete veces delante de Jehová.
Y tomará el palo de cedro, y el hisopo, y la grana, y la avecilla viva, y lo mojará en la sangre de la avecilla muerta y en las aguas corrientes, y rociará la casa siete veces.
Tomará luego de la sangre del becerro, y la rociará con su dedo hacia el propiciatorio al lado oriental; hacia el propiciatorio esparcirá siete veces de aquella sangre con su dedo.
Y esparcirá sobre él de la sangre con su dedo siete veces, y lo limpiará, y lo santificará de las inmundicias de los hijos de Israel.
Y te has de contar siete semanas de años, siete veces siete años; de modo que los días de las siete semanas de años vendrán a serte cuarenta y nueve años.
Y si aun con estas cosas no me oyereis, yo tornaré a castigaros siete veces más por vuestros pecados.
Y si anduviereis conmigo en oposición, y no me quisiereis oír, yo aumentaré las plagas sobre vosotros siete veces más, de acuerdo a vuestros pecados.
yo también procederé contra vosotros, en oposición y os heriré aún siete veces por vuestros pecados:
yo procederé contra vosotros, y lo haré con ira, y os castigaré aún siete veces por vuestros pecados.
porque todos los que vieron mi gloria y mis señales que he hecho en Egipto y en el desierto, y me han tentado ya diez veces, y no han oído mi voz,
Y tomará Eleazar el sacerdote de su sangre con su dedo, y rociará hacia la delantera del tabernáculo de la congregación con la sangre de ella siete veces;
Entonces alzó Moisés su mano, e hirió la roca con su vara dos veces: y salieron muchas aguas, y bebió la congregación, y sus bestias.
Entonces Jehová abrió la boca al asna, la cual dijo a Balaam: ¿Qué te he hecho, que me has herido estas tres veces?
Y el Ángel de Jehová le dijo: ¿Por qué has herido tu asna estas tres veces? he aquí yo he salido para contrarrestarte, porque tu camino es perverso delante de mí:
El asna me ha visto, y se ha apartado luego de delante de mí estas tres veces; y si de mí no se hubiera apartado, yo también ahora te mataría a ti, y a ella dejaría viva.
Entonces se encendió la ira de Balac contra Balaam, y batiendo sus palmas le dijo: Para maldecir a mis enemigos te he llamado, y he aquí los has resueltamente bendecido ya tres veces.
¡Jehová el Dios de vuestros padres os haga mil veces más de lo que sois, y os bendiga, como os ha prometido!
Tres veces cada año se presentará todo varón tuyo delante de Jehová tu Dios en el lugar que Él escogiere; en la fiesta de los panes sin levadura, y en la fiesta de las semanas, y en la fiesta de los tabernáculos. Y no te presentarás con las manos vacías delante de Jehová:
Y sucedió que en el séptimo día se levantaron temprano, al despuntar el alba, y dieron vuelta a la ciudad de la misma manera siete veces; solamente este día dieron vuelta a la ciudad siete veces.
Y ella le dijo: ¿Cómo dices: Yo te amo, cuando tu corazón no está conmigo? Ya me has engañado tres veces, y no me has revelado aún en qué consiste tu gran fuerza.
Subiendo entonces los hijos de Israel contra los hijos de Benjamín el tercer día, ordenaron la batalla delante de Gabaa, como las otras veces.
Y saliendo los hijos de Benjamín contra el pueblo, alejados que fueron de la ciudad, comenzaron a herir a algunos del pueblo, matándolos como las otras veces por los caminos, uno de los cuales sube a Betel, y el otro a Gabaa en el campo; y mataron unos treinta hombres de Israel.
Y vino Jehová, y se paró, y llamó como las otras veces: ¡Samuel, Samuel! Entonces Samuel dijo: Habla, que tu siervo oye.
Y arrojó Saúl la lanza, diciendo: Enclavaré a David en la pared. Pero David lo evadió dos veces.
Y luego que el muchacho se hubo ido, se levantó David del lado del sur, y se inclinó tres veces postrándose hasta la tierra: y besándose el uno al otro, lloraron el uno con el otro, aunque David lloró más.
Y Joab respondió al rey: Añada Jehová tu Dios al pueblo cien veces tanto de lo que son, y que lo vea mi señor el rey; mas ¿para qué quiere esto mi señor el rey?
Y ofrecía Salomón tres veces cada año holocaustos y sacrificios de paz sobre el altar que él edificó a Jehová, y quemaba incienso sobre el altar que estaba delante de Jehová. Así terminó la casa.
Y se enojó Jehová contra Salomón, por cuanto su corazón se había desviado de Jehová Dios de Israel, que le había aparecido dos veces,
Y se tendió sobre el niño tres veces, y clamó a Jehová, y dijo: Jehová Dios mío, te ruego que el alma de este niño vuelva a él.
Y dijo a su criado: Sube ahora, y mira hacia el mar. Y él subió, y miró, y dijo: No hay nada. Y él le volvió a decir: Vuelve siete veces.
Y el rey le dijo: ¿Hasta cuántas veces he de hacerte jurar que no me digas sino la verdad en el nombre de Jehová?
Volviéndose luego, se paseó por la casa a una parte y a otra, y después subió, y se tendió sobre él; y el niño estornudó siete veces, y abrió sus ojos.
Entonces Eliseo le envió un mensajero, diciendo: Ve, y lávate siete veces en el Jordán, y tu carne se te restaurará, y serás limpio.
Él entonces descendió, y se zambulló siete veces en el Jordán, conforme a la palabra del varón de Dios; y su carne se volvió como la carne de un niño, y fue limpio.
Y le dijo: Toma las saetas. Y luego que el rey de Israel las hubo tomado, le dijo: Hiere la tierra. Y él hirió tres veces, y se detuvo.
Entonces el varón de Dios, enojado contra él, le dijo: Al herir cinco o seis veces, habrías herido a Siria, hasta no quedar ninguno: Pero ahora herirás a Siria sólo tres veces.
Y volvió Joás hijo de Joacaz, y tomó de mano de Benadad hijo de Hazael, las ciudades que él había tomado de mano de Joacaz su padre en guerra. Tres veces lo batió Joás, y restituyó las ciudades a Israel.
Y dijo Joab: Añada Jehová a su pueblo cien veces más. Rey señor mío, ¿no son todos éstos siervos de mi señor? ¿Para qué procura mi señor esto, que será pernicioso a Israel?
para que ofreciesen cada cosa en su día, conforme al mandamiento de Moisés, en los sábados, en las nuevas lunas, y en las fiestas solemnes, tres veces en el año, esto es, en la fiesta de los panes sin levadura, en la fiesta de las semanas, y en la fiesta de los tabernáculos.
Y el rey le dijo: ¿Hasta cuántas veces te conjuraré por el nombre de Jehová que no me hables sino la verdad?
Pero sucedió que cuando vinieron los judíos que habitaban entre ellos, nos dijeron diez veces: De todos los lugares de donde volviereis a nosotros, ellos vendrán sobre vosotros.
Y enviaron a mí con el mismo asunto por cuatro veces, y yo les respondí de la misma manera.
Pero una vez que tenían reposo, volvían a hacer lo malo delante de ti; por lo cual los abandonaste en mano de sus enemigos, que se enseñorearon de ellos; mas cuando se volvían y clamaban otra vez a ti, tú desde los cielos los oías, y muchas veces los libraste según tus misericordias.
Y se quedaron fuera de Jerusalén una y dos veces los negociantes, y los que vendían toda especie de mercancía.
Muchas veces he oído cosas como éstas: Consoladores molestos sois todos vosotros.
Ya me habéis vituperado diez veces: ¿No os avergonzáis de injuriarme?
¡Oh cuántas veces la lámpara de los impíos es apagada, y viene sobre ellos su quebranto, y Dios en su ira les reparte dolores!
Unas veces por azote, otras por causa de su tierra, otras por misericordia las hará venir.
Una vez hablé, mas no responderé: Aun dos veces, pero no añadiré más.
Las palabras de Jehová son palabras puras; como plata refinada en horno de tierra, purificada siete veces.
Una vez habló Dios; dos veces he oído esto; que de Dios es el poder.
Pero Él, misericordioso, perdonaba la maldad, y no los destruía; y apartó muchas veces su ira, y no despertó todo su enojo.
¡Cuántas veces lo provocaron en el desierto, lo enojaron en la soledad!
Muchas veces los libró; mas ellos se rebelaron contra su consejo y fueron humillados por su iniquidad.
Siete veces al día te alabo sobre los juicios de tu justicia.
unas veces está afuera, otras veces en las plazas, acechando por todas las esquinas.
porque siete veces cae el justo, y vuelve a levantarse; mas los impíos caerán en el mal.
El hombre que reprendido muchas veces endurece su cerviz, de repente será quebrantado, y no habrá para él remedio.
El hombre iracundo levanta contiendas; y el furioso muchas veces peca.
Aunque aquél viviere mil años dos veces, sin haber gozado del bien, ¿no van todos a un mismo lugar?
Pues tu corazón sabe que muchas veces tú también has hablado mal de otros.
Bien que el pecador haga mal cien veces, y sus días le sean prolongados, con todo yo también sé que los que a Dios temen tendrán bien, los que temen ante su presencia;
Y la luz de la luna será como la luz del sol, y la luz del sol siete veces mayor, como la luz de siete días, el día que vendare Jehová la quebradura de su pueblo, y curare la llaga de su herida.
Y en todo asunto de sabiduría e inteligencia que el rey les demandó, los halló diez veces mejores que todos los magos y astrólogos que había en todo su reino.
Entonces Nabucodonosor se llenó de ira, y se demudó el aspecto de su rostro contra Sadrac, Mesac, y Abed-nego; por lo cual habló, y ordenó que el horno se calentase siete veces más de lo que solían calentarlo.
Y Daniel, cuando supo que la escritura estaba firmada, entró en su casa, y abiertas las ventanas de su cámara que estaban hacia Jerusalén, se hincaba de rodillas tres veces al día, y oraba, y daba gracias delante de su Dios, como lo solía hacer antes.
Entonces respondieron y dijeron delante del rey: Ese Daniel, que es de los hijos de la cautividad de los judíos, no ha hecho cuenta de ti, oh rey, ni del edicto que confirmaste; antes tres veces al día hace su petición.
¿Qué tramáis contra Jehová? Él hará consumación; la tribulación no se levantará dos veces.
Entonces vinieron a Él los discípulos de Juan, diciendo: ¿Por qué nosotros y los fariseos ayunamos muchas veces, y tus discípulos no ayunan?
Señor, ten misericordia de mi hijo, que es lunático, y padece mucho, porque muchas veces cae en el fuego, y muchas en el agua.
Entonces Pedro viniendo a Él, dijo: Señor, ¿cuántas veces perdonaré a mi hermano que pecare contra mí? ¿Hasta siete?
Jesús le dijo: No te digo hasta siete, sino aun hasta setenta veces siete.
¡Ay de vosotros, escribas y fariseos, hipócritas! porque recorréis mar y tierra para hacer un prosélito, y una vez hecho, lo hacéis dos veces más hijo del infierno que vosotros.
¡Jerusalén, Jerusalén, que matas a los profetas y apedreas a los que te son enviados! ¡Cuántas veces quise juntar tus hijos, como la gallina junta sus polluelos debajo de sus alas, y no quisiste!
Jesús le dijo: De cierto te digo que esta noche, antes que el gallo cante, me negarás tres veces.
Y Pedro se acordó de las palabras de Jesús, que le dijo: Antes que el gallo cante, me negarás tres veces. Y saliendo fuera, lloró amargamente.
Porque muchas veces había sido atado con grillos y cadenas, mas las cadenas habían sido hechas pedazos por él, y desmenuzados los grillos, y nadie le podía domar.
Porque los fariseos y todos los judíos, guardando la tradición de los ancianos, si muchas veces no se lavan las manos, no comen.
Y muchas veces le echa en el fuego y en el agua para matarle; pero si puedes hacer algo, ten compasión de nosotros, y ayúdanos.
Y Jesús le dijo: De cierto te digo que tú, hoy, en esta noche, antes de que el gallo haya cantado dos veces, me negarás tres veces.
Y el gallo cantó la segunda vez. Entonces Pedro se acordó de las palabras que Jesús le había dicho: Antes que el gallo cante dos veces, me negarás tres veces. Y pensando en esto, lloraba.