'Afrenta' en la Biblia
Ella concibió y dio a luz un hijo, y dijo: ``Dios ha quitado mi afrenta."
Pero Nahas el Amonita les dijo: ``{Lo} haré con esta condición: que a todos ustedes les saque yo el ojo derecho; así haré que esto sea una afrenta sobre todo Israel."
Cuando David supo que Nabal había muerto, dijo: ``Bendito sea el SEÑOR, que ha defendido la causa de mi afrenta de manos de Nabal, y ha preservado a Su siervo del mal. El SEÑOR también ha devuelto la maldad de Nabal sobre su propia cabeza." Entonces David envió un mensaje a Abigail, para tomarla para sí por mujer.
Cuando lloraba {afligiendo} con ayuno mi alma, {Eso} se convirtió en afrenta para mí.
Tú conoces mi afrenta, mi vergüenza y mi ignominia; Todos mis adversarios están delante de Ti.
La afrenta ha quebrantado mi corazón, y estoy enfermo; Esperé compasión, pero no {la} hubo; {Busqué} consoladores, pero no {los} hallé.
Sean avergonzados {y} consumidos los enemigos de mi alma; Sean cubiertos de afrenta y de ignominia los que procuran mi mal.
E hizo retroceder a Sus adversarios, Poniendo sobre ellos una afrenta perpetua.
Y devuelve a nuestros vecinos siete veces en su seno La afrenta con que Te han ofendido, Señor.
Todos los que pasan por el camino lo saquean; Ha venido a ser una afrenta para sus vecinos.
Así tendré respuesta para el que me afrenta, Pues confío en Tu palabra.
Heridas y vergüenza hallará, Y su afrenta no se borrará.
El que oprime al pobre afrenta a su Hacedor, Pero el que se apiada del necesitado Lo honra.
La justicia engrandece a la nación, Pero el pecado es afrenta para los pueblos.
El que se burla del pobre afrenta a su Hacedor; El que se regocija de la desgracia no quedará sin castigo.
Cuando llega el impío, llega también el desprecio, Y con la deshonra {viene} la afrenta.
Sé sabio, hijo mío, y alegra mi corazón, Para que yo responda al que me afrenta.
Pero el SEÑOR está conmigo como campeón temible; Por tanto, mis perseguidores tropezarán y no prevalecerán. Quedarán muy avergonzados, pues no triunfaron, {Tendrán} afrenta perpetua que nunca será olvidada.
Han oído las naciones de tu afrenta, Y tu clamor llena la tierra; Porque guerrero con guerrero ha tropezado, Y a una han caído ambos.
Estamos avergonzados porque hemos oído la afrenta; La deshonra ha cubierto nuestros rostros, Porque extranjeros han entrado En los santuarios de la casa del SEÑOR.
"Entonces volverá su rostro hacia las costas y tomará muchas {de ellas}. Pero un príncipe pondrá fin a su afrenta. Además, hará recaer sobre él su afrenta.
Cuanto más se multiplicaron, más pecaron contra Mí; Cambiaré, {pues,} su gloria en afrenta.