'Aquí' en la Biblia
He aquí, yo estoy oprimido debajo de vosotros como está oprimida una carreta llena de gavillas.
El Señor DIOS ha jurado por su santidad: He aquí, vienen sobre vosotras días en que os llevarán con garfios, y a vuestro remanente con anzuelos.
Pues he aquí el que forma los montes, crea el viento y declara al hombre cuáles son sus pensamientos, el que del alba hace tinieblas y camina sobre las alturas de la tierra: el SEÑOR, Dios de los ejércitos, es su nombre.
Porque he aquí, el SEÑOR ordenará que la casa grande sea reducida a escombros y que la casa pequeña sea hecha pedazos.
Pues he aquí, levantaré contra vosotros, oh casa de Israel, --declara el SEÑOR, Dios de los ejércitos-- una nación que os afligirá desde la entrada de Hamat hasta el arroyo del Arabá.
Esto me mostró el Señor DIOS: He aquí, El formaba enjambre de langostas cuando comenzaba a brotar la cosecha de primavera. Y he aquí, la cosecha de primavera {era} después de la siega del rey.
Esto me mostró el Señor DIOS: he aquí, el Señor DIOS llamaba para juzgar{los} con fuego, y consumió el gran abismo y empezó a consumir el campo.
Esto El me mostró: He aquí, el Señor estaba junto a un muro hecho a plomo, y tenía en su mano una plomada.
Y el SEÑOR me dijo: ¿Qué ves, Amós? Y respondí: Una plomada. Entonces el Señor dijo: He aquí, pondré una plomada en medio de mi pueblo Israel. Ya no volveré a dejarlos sin castigo.
Esto me mostró el Señor DIOS: He aquí, {había} una canasta de fruta de verano,
He aquí, vienen días --declara el Señor DIOS-- en que enviaré hambre sobre la tierra, no hambre de pan, ni sed de agua, sino de oír las palabras del SEÑOR.
Y vagarán de mar a mar, y del norte hasta el oriente; andarán de aquí para allá en busca de la palabra del SEÑOR, pero no {la} encontrarán.
He aquí, los ojos del Señor DIOS están sobre el reino pecador, y yo lo destruiré de sobre la faz de la tierra; sin embargo, no destruiré totalmente a la casa de Jacob --declara el SEÑOR.
Porque he aquí, yo daré un mandato, y zarandearé a la casa de Israel entre todas las naciones, como se zarandea {el grano} en la criba, sin que caiga ni un grano en tierra.
He aquí, vienen días --declara el SEÑOR-- cuando el arador alcanzará al segador, y el que pisa la uva al que siembra la semilla; cuando destilarán vino dulce los montes, y todas las colinas se derretirán.