'Calle' en la Biblia

Mas el pueblo es mucho, y el tiempo lluvioso, y no hay fuerza para estar en la calle: ni la obra es de un día ni de dos, porque somos muchos los que hemos prevaricado en este negocio.

Porque quebrantaba á la gran multitud, Y el menosprecio de las familias me atemorizó, Y callé, y no salí de mi puerta:

Mientras callé, envejeciéronse mis huesos En mi gemir todo el día.

El cual pasaba por la calle, junto á la esquina de aquella, E iba camino de su casa,

Por tanto estoy lleno de saña de Jehová, trabajado he por contenerme; derramaréla sobre los niños en la calle, y sobre la reunión de los jóvenes juntamente; porque el marido también será preso con la mujer, el viejo con el lleno de días.

Mas Jehová está en su santo templo: calle delante de él toda la tierra.

Calle toda carne delante de Jehová, porque él se ha despertado de su santa morada.