'Cómo' en la Biblia
Entonces los hombres de la ciudad dijeron a Eliseo: He aquí, ahora el emplazamiento de esta ciudad es bueno, como mi señor ve, pero el agua es mala y la tierra estéril.
E hizo lo malo ante los ojos del SEÑOR, aunque no como su padre y su madre, pues quitó el pilar {sagrado} de Baal que su padre había hecho.
Entonces fue y envió {palabra} a Josafat, rey de Judá, diciendo: El rey de Moab se ha rebelado contra mí. ¿Irás conmigo a pelear contra Moab? Y él respondió: Subiré; yo soy como tú, mi pueblo como tu pueblo, mis caballos como tus caballos.
Se levantaron muy de mañana, y cuando el sol brilló sobre el agua, los moabitas vieron el agua frente {a ellos} tan roja como la sangre.
Y su sirviente dijo: ¿Cómo pondré esto delante de cien hombres? Pero él respondió: Da{los} a la gente para que coman, porque así dice el SEÑOR: ``Comerán y sobrará."
Y sucedió que cuando el rey de Israel leyó la carta, rasgó sus vestidos, y dijo: ¿Acaso soy yo Dios, para dar muerte y para dar vida, para que éste me mande {a decir} que cure a un hombre de su lepra? Pero considerad ahora, y ved cómo busca pleito conmigo.
Entonces él bajó y se sumergió siete veces en el Jordán conforme a la palabra del hombre de Dios; y su carne se volvió como la carne de un niño pequeño, y quedó limpio.
Por tanto, la lepra de Naamán se te pegará a ti y a tus descendientes para siempre. Y él salió de su presencia leproso, {blanco} como la nieve.
Y sucedió que cuando el rey oyó las palabras de la mujer, rasgó sus vestidos y como él pasaba por la muralla, la gente miró, y vio que interiormente, llevaba cilicio sobre su cuerpo.
Y Eliseo estaba sentado en su casa, y los ancianos estaban sentados con él. Y {el rey} envió a un hombre de {los que estaban en} su presencia; pero antes de que el mensajero llegara a Eliseo, {éste} dijo a los ancianos: ¿Veis cómo este hijo de asesino ha enviado a cortarme la cabeza? Mirad, cuando el mensajero llegue, cerrad la puerta y mantenedla cerrada contra él. ¿No {se oye} tras él el ruido de los pasos de su señor?
Entonces Eliseo dijo: Oíd la palabra del SEÑOR. Así dice el SEÑOR: ``Mañana como a esta hora en la puerta de Samaria, una medida de flor de harina se {venderá} a un siclo, y dos medidas de cebada a un siclo."
Si decimos: ``Vamos a entrar en la ciudad," como el hambre está en la ciudad, moriremos allí; y si nos sentamos aquí, también moriremos. Ahora pues, vayamos y pasemos al campamento de los arameos. Si nos perdonan la vida, viviremos; y si nos matan, pues moriremos.
Por lo cual se levantaron y huyeron al anochecer, y abandonaron sus tiendas, sus caballos y sus asnos {y} el campamento tal como estaba, y huyeron para {salvar} sus vidas.
Y uno de sus siervos respondió, y dijo: Deja que algunos {hombres} tomen cinco de los caballos que quedan, {de los} que quedan en la ciudad. He aquí, ya que {les sucederá} como a toda la multitud de Israel que queda en la ciudad (como a toda la multitud de Israel que {ya} ha perecido), he aquí, vamos a enviar{los} y veamos.
Y el rey puso a cargo de la puerta al oficial real en cuyo brazo se apoyaba; pero el pueblo lo atropelló a la puerta y murió, tal como había dicho el hombre de Dios, el cual habló cuando el rey descendió a él.
Aconteció tal como el hombre de Dios había hablado al rey, cuando dijo: Mañana a estas horas a la puerta de Samaria serán {vendidas} dos medidas de cebada a un siclo y una medida de flor de harina a un siclo.
Y sucedió que mientras él contaba al rey cómo había devuelto la vida a un muerto, he aquí, la mujer a cuyo hijo había devuelto la vida, imploró al rey por su casa y por su campo. Y Giezi dijo: Oh rey señor mío, ésta es la mujer y éste es su hijo, al que Eliseo devolvió la vida.
Y anduvo en el camino de los reyes de Israel, tal como había hecho la casa de Acab (porque la hija de Acab era su mujer); e hizo lo malo ante los ojos del SEÑOR.
El también anduvo en el camino de la casa de Acab, e hizo lo malo ante los ojos del SEÑOR, como {había hecho} la casa de Acab, porque era yerno de Acab.
``Y toda la casa de Acab perecerá, y cortaré de Acab todo varón, tanto siervo como libre en Israel.
``Yo pondré la casa de Acab como la casa de Jeroboam, hijo de Nabat, y como la casa de Baasa, hijo de Ahías.
Y avisó el centinela, diciendo: El llegó hasta ellos, y no regresó; y el {modo de} guiar es como el guiar de Jehú, hijo de Nimsi, porque guía alocadamente.
y el cadáver de Jezabel será como estiércol sobre la superficie del campo en la parcela de Jezreel, para que no puedan decir: `Esta es Jezabel.'"
Ahora, cuando esta carta llegue a vosotros, como los hijos de vuestro señor están con vosotros, así como también los carros y los caballos y una ciudad fortificada y las armas,
Pero ellos temieron en gran manera y dijeron: He aquí, los dos reyes no pudieron sostenerse delante de él; ¿cómo, pues, podremos sostenernos nosotros?
Cuando partió de allí, encontró a Jonadab, hijo de Recab, {que venía} a su encuentro, lo saludó y le dijo: ¿Es recto tu corazón como mi corazón es con el tuyo? Y Jonadab respondió: Lo es. {Y Jehú dijo:} Si lo es, da{me} la mano. Y le dio su mano y lo hizo subir al carro.
Y tan pronto como acabó de ofrecer el holocausto, Jehú dijo a la guardia y a los oficiales reales: Entrad, matadlos; que ninguno salga. Y los mataron a filo de espada; y la guardia y los oficiales reales {los} echaron fuera, y llegaron hasta el aposento interior de la casa de Baal.
Entonces Joás dijo a los sacerdotes: Todo el dinero de las cosas sagradas que se trae a la casa del SEÑOR en moneda corriente, {tanto} el dinero estipulado a cada persona, {como} todo el dinero que cada uno voluntariamente traiga a la casa del SEÑOR,
Entonces Joacaz imploró el favor del SEÑOR, y el SEÑOR lo oyó; porque El vio la opresión de Israel, de cómo el rey de Aram los oprimía.
Y el SEÑOR dio a Israel un libertador, y escaparon del poder de los arameos; y habitaron los hijos de Israel en sus tiendas como antes.
Pues a Joacaz no le había quedado del ejército más que cincuenta hombres de a caballo, diez carros y diez mil hombres de a pie, porque el rey de Aram los había destruido y los había hecho como polvo de trilla.
E hizo lo recto ante los ojos del SEÑOR, pero no como su padre David; hizo conforme a todo lo que su padre Joás había hecho.
Pero a los hijos de los asesinos no les dio muerte, conforme a lo que está escrito en el libro de la ley de Moisés, tal como el SEÑOR ordenó, diciendo: No se dará muerte a los padres por los hijos, ni se dará muerte a los hijos por los padres, sino que a cada uno se le dará muerte por su propio pecado.
Los demás hechos de Jeoás, cuanto hizo y su poder, y cómo peleó con Amasías, rey de Judá; ¿no están escritos en el libro de las Crónicas de los reyes de Israel?
Los demás hechos de Jeroboam y todo lo que hizo y su poder, cómo peleó y cómo recobró para Israel a Damasco y a Hamat, {que habían pertenecido} a Judá, ¿no están escritos en el libro de las Crónicas de los reyes de Israel?
E hizo lo malo ante los ojos del SEÑOR, como habían hecho sus padres; no se apartó de los pecados con que Jeroboam, hijo de Nabat, hizo pecar a Israel.
Acaz {tenía} veinte años cuando comenzó a reinar, y reinó dieciséis años en Jerusalén; pero no hizo lo recto ante los ojos del SEÑOR su Dios como su padre David {había hecho,}
E hizo lo malo ante los ojos del SEÑOR, aunque no como los reyes de Israel que habían sido antes de él.
Pero el rey de Asiria descubrió una conspiración de Oseas, quien había enviado mensajeros a So, rey de Egipto, y no había pagado tributo al rey de Asiria como {había hecho} año tras año; por tanto el rey de Asiria lo detuvo y lo encadenó en la cárcel.
y quemaron incienso allí en todos los lugares altos, como las naciones que el SEÑOR se había llevado al destierro de delante de ellos; e hicieron cosas malas provocando al SEÑOR.
Sin embargo, ellos no escucharon, sino que endurecieron su cerviz como sus padres, que no creyeron en el SEÑOR su Dios.
Desecharon sus estatutos y el pacto que El había hecho con sus padres, y sus advertencias con las cuales los había amonestado. Y siguieron la vanidad y se hicieron vanos, y {fueron} en pos de las naciones que los rodeaban, respecto de las cuales el SEÑOR les había ordenado que no hicieran como ellas.
hasta que el SEÑOR quitó a Israel de su presencia, como El había hablado por medio de todos sus siervos los profetas. E Israel fue llevado de su propia tierra al destierro, a Asiria, hasta hoy.
Y aconteció que {como} al principio de habitar ellos allí, no temieron al SEÑOR, el SEÑOR envió leones entre ellos que mataron a {muchos} de ellos.
Y vino uno de los sacerdotes que habían llevado al destierro desde Samaria, y habitó en Betel, y les enseñó cómo habían de temer al SEÑOR.
y los aveos hicieron a Nibhaz y a Tartac; y los de Sefarvaim quemaban a sus hijos en el fuego {como ofrenda} a Adramelec y Anamelec, dioses de Sefarvaim.
Confió en el SEÑOR, Dios de Israel; y después de él, no hubo ninguno como él entre todos los reyes de Judá, ni {entre los} que fueron antes de él,
` ¿Cómo, pues, puedes rechazar a un oficial de los menores de los siervos de mi señor, y confiar en Egipto para {tener} carros y hombres de a caballo?
hasta que yo venga y os lleve a una tierra como vuestra tierra, tierra de grano y de mosto, tierra de pan y de viñas, tierra de olivos y de miel, para que viváis y no muráis.' Pero no escuchéis a Ezequías porque os engaña, diciendo: `El SEÑOR nos librará.'
``Sus habitantes, faltos de fuerzas, fueron desalentados y humillados; vinieron a ser {como} la vegetación del campo y {como} la hierba verde, {como} la hierba en los techos que se quema antes de que haya crecido.
Te ruego, oh SEÑOR, que te acuerdes ahora de cómo yo he andado delante de ti en verdad y con corazón íntegro, y he hecho lo bueno ante tus ojos. Y Ezequías lloró amargamente.
Los demás hechos de Ezequías y todo su poderío, y cómo hizo el estanque y el acueducto, y trajo agua a la ciudad, ¿no están escritos en el libro de las Crónicas de los reyes de Judá?
Porque reedificó los lugares altos que su padre Ezequías había destruido; levantó también altares a Baal e hizo una Asera, como había hecho Acab, rey de Israel, y adoró a todo el ejército de los cielos y los sirvió.
``Extenderé sobre Jerusalén el cordel de Samaria y la plomada de la casa de Acab, y limpiaré a Jerusalén como se limpia un plato, limpiándolo y volviéndolo boca abajo.
E hizo lo malo ante los ojos del SEÑOR, como había hecho su padre Manasés.
Josías quitó también todas las casas de los lugares altos que {estaban} en las ciudades de Samaria, las cuales habían hecho los reyes de Israel provocando a ira al SEÑOR; les hizo tal y como había hecho en Betel.
Entonces el rey ordenó a todo el pueblo, diciendo: Celebrad la Pascua al SEÑOR vuestro Dios como está escrito en este libro del pacto.
Y antes de él no hubo rey como él que se volviera al SEÑOR con todo su corazón, con toda su alma y con todas sus fuerzas, conforme a toda la ley de Moisés, ni otro como él se levantó después de él.
Y el SEÑOR dijo: También quitaré a Judá de mi presencia, como he quitado a Israel. Y desecharé a esta ciudad que yo había escogido, a Jerusalén, y al templo del cual dije: ``Mi nombre estará allí."
Sacó de allí todos los tesoros de la casa del SEÑOR, los tesoros de la casa del rey, y destrozó todos los utensilios de oro que Salomón, rey de Israel, había hecho en el templo del SEÑOR, tal como el SEÑOR había dicho.