'Decir' en la Biblia
Y David le dijo: Tu sangre sea sobre tu cabeza, porque tu boca ha testificado contra ti, al decir: ``Yo he matado al ungido del SEÑOR."
Volvió a decir Abner a Asael: Deja de perseguirme. ¿Por qué he de derribarte en tierra? ¿Cómo podría entonces levantar mi rostro ante tu hermano Joab?
No obstante, David conquistó la fortaleza de Sion, es decir, la ciudad de David.
Entonces David envió {a decir} a Joab: Envíame a Urías hitita. Y Joab envió a Urías a David.
Partió, pues, el mensajero, y llegó e informó a David todo lo que Joab le había enviado {a decir.}
Y la mujer dijo: ¿Por qué, pues, has pensado tal cosa contra el pueblo de Dios? Porque al decir esta palabra, el rey {se hace} como uno que es culpable, {ya que} el rey no hace volver a su desterrado.
Ahora, la razón por la cual he venido a decir esta palabra a mi señor el rey, es porque el pueblo me ha atemorizado; por eso tu sierva se dijo: ``Hablaré ahora al rey, tal vez el rey cumpla la petición de su sierva.
Y Absalón respondió a Joab: He aquí, envié por ti, diciendo: ``Ven acá, para enviarte al rey a decir{le:} ` ¿Para qué vine de Gesur? Mejor me hubiera sido estar aún allá.'" Ahora pues, vea yo el rostro del rey; y si hay iniquidad en mí, que me dé muerte.
Entonces Absalón dijo: Llama también ahora a Husai arquita y escuchemos lo que él tiene que decir.
Y Ahimaas, hijo de Sadoc, volvió a decir a Joab: Pase lo que pase, te ruego que me dejes correr tras el cusita. Y Joab dijo: ¿Por qué correrás, hijo mío, ya que no tendrás recompensa por ir?
Y la victoria aquel día se convirtió en duelo para todo el pueblo, porque el pueblo oyó decir aquel día: El rey está entristecido por su hijo.
Habló ella, diciendo: Antes acostumbraban decir: ``Ellos ciertamente pedirán {consejo} en Abel", y así terminaban {la querella.}