'Declara' en la Biblia
No saben hacer lo recto --declara el SEÑOR-- los que acumulan violencia y destrucción en sus palacios.
Oíd y testificad contra la casa de Jacob --declara el Señor DIOS, el Dios de los ejércitos.
Derribaré también la casa de invierno junto con la casa de verano; también perecerán las casas de marfil, y muchas casas serán destruidas --declara el SEÑOR.
Saldréis {por} las brechas, una tras otra, y seréis expulsadas al Harmón --declara el SEÑOR.
Ofreced también pan leudado en ofrenda de gratitud, y proclamad ofrendas voluntarias, dad{las} a conocer, puesto que así os place, hijos de Israel --declara el Señor DIOS.
Yo también os he dado dientes limpios en todas vuestras ciudades, y falta de pan en todos vuestros lugares; pero os no habéis vuelto a mí --declara el SEÑOR.
Así que de dos {o} tres ciudades iban tambaleándose a otra ciudad para beber agua, y no se saciaban; pero no os habéis vuelto a mí --declara el SEÑOR.
Os herí con {viento} abrasador y con añublo; y la oruga ha devorado vuestros muchos huertos y viñedos, vuestras higueras y vuestros olivos; pero no os habéis vuelto a mí --declara el SEÑOR.
Envié contra vosotros una plaga, como la {plaga} de Egipto, maté a espada a vuestros jóvenes, junto con vuestros caballos capturados, e hice subir hasta vuestras narices el hedor de vuestro campamento; pero no os habéis vuelto a mí --declara el SEÑOR.
Os destruí como Dios destruyó a Sodoma y a Gomorra, y fuisteis como tizón arrebatado de la hoguera; pero no os habéis vuelto a mí --declara el SEÑOR.
Pues he aquí el que forma los montes, crea el viento y declara al hombre cuáles son sus pensamientos, el que del alba hace tinieblas y camina sobre las alturas de la tierra: el SEÑOR, Dios de los ejércitos, es su nombre.
Pues he aquí, levantaré contra vosotros, oh casa de Israel, --declara el SEÑOR, Dios de los ejércitos-- una nación que os afligirá desde la entrada de Hamat hasta el arroyo del Arabá.
Los cantos del palacio se convertirán en gemido en aquel día --declara el Señor DIOS. Muchos {serán} los cadáveres; en todo lugar {los} echarán fuera en silencio.
Y sucederá que en aquel día --declara el Señor DIOS-- yo haré que el sol se ponga al mediodía y que la tierra en pleno día se oscurezca.
He aquí, vienen días --declara el Señor DIOS-- en que enviaré hambre sobre la tierra, no hambre de pan, ni sed de agua, sino de oír las palabras del SEÑOR.
¿No sois vosotros para mí como hijos de Etiopía, oh hijos de Israel? --declara el SEÑOR. ¿No hice yo subir a Israel de la tierra de Egipto y a los filisteos de Caftor y a los arameos de Kir?
He aquí, los ojos del Señor DIOS están sobre el reino pecador, y yo lo destruiré de sobre la faz de la tierra; sin embargo, no destruiré totalmente a la casa de Jacob --declara el SEÑOR.
para que tomen posesión del remanente de Edom y de todas las naciones donde se invoca mi nombre --declara el SEÑOR, que hace esto.
He aquí, vienen días --declara el SEÑOR-- cuando el arador alcanzará al segador, y el que pisa la uva al que siembra la semilla; cuando destilarán vino dulce los montes, y todas las colinas se derretirán.
Aunque te remontes como el águila, y aunque entre las estrellas pongas tu nido, de allí te derribaré --declara el SEÑOR.
¿No destruiré en aquel día --declara el SEÑOR-- a los sabios de Edom y el entendimiento del monte de Esaú?
En aquel día --declara el SEÑOR-- reuniré a la coja y recogeré a la perseguida, a las que yo había maltratado.
Y sucederá en aquel día --declara el SEÑOR-- que exterminaré tus caballos de en medio de ti, y destruiré tus carros.
Heme aquí contra ti --declara el SEÑOR de los ejércitos. Quemaré y reduciré a humo tus carros, la espada devorará tus leoncillos, arrancaré de la tierra tu presa, y no se oirá más la voz de tus mensajeros.
Heme aquí contra ti --declara el SEÑOR de los ejércitos. Levantaré tus faldas sobre tu rostro, y mostraré a las naciones tu desnudez y a los reinos tu vergüenza.
Eliminaré por completo todo de la faz de la tierra --declara el SEÑOR.
Eliminaré hombres y animales, eliminaré las aves del cielo y los peces del mar, y haré tropezar a los impíos; extirparé al hombre de la faz de la tierra --declara el SEÑOR.
Y habrá aquel día --declara el SEÑOR-- gritos de auxilio desde la puerta del Pescado, y gemidos desde el segundo distrito, y gran estruendo desde las colinas.
Por tanto, vivo yo --declara el SEÑOR de los ejércitos, Dios de Israel-- que Moab será como Sodoma, y los hijos de Amón como Gomorra: campo de ortigas y mina de sal, una desolación perpetua. El remanente de mi pueblo los saqueará, y el resto de mi nación los heredará.
Por tanto, esperadme --declara el SEÑOR-- hasta el día en que me levante como testigo, porque mi decisión es reunir a las naciones, juntar a los reinos, para derramar sobre ellos mi indignación, todo el ardor de mi ira; porque por el fuego de mi celo toda la tierra será consumida.
Esperáis mucho, pero he aquí, {hay} poco; y lo que traéis a casa, yo lo aviento. ¿Por qué? --declara el SEÑOR de los ejércitos--. Por causa de mi casa que está desolada, mientras cada uno de vosotros corre a su casa.
Entonces Hageo, mensajero del SEÑOR, por mandato del SEÑOR, habló al pueblo, diciendo: Yo estoy con vosotros --declara el SEÑOR.
``Pero ahora, esfuérzate, Zorobabel" --declara el SEÑOR-- ``esfuérzate tú también, Josué, hijo de Josadac, sumo sacerdote, y esforzaos todos vosotros, pueblo de la tierra" --declara el SEÑOR-- ``y trabajad, porque yo estoy con vosotros" --declara el SEÑOR de los ejércitos.
``Mía es la plata y mío es el oro" --declara el SEÑOR de los ejércitos.
``La gloria postrera de esta casa será mayor que la primera" --dice el SEÑOR de los ejércitos-- ``y en este lugar daré paz" --declara el SEÑOR de los ejércitos.
Entonces volvió a hablar Hageo y dijo: ``Así es este pueblo y así es esta nación delante de mí" --declara el SEÑOR-- ``y así es toda obra de sus manos; y lo que aquí ofrecen, inmundo es.
``Os herí con {viento} abrasador, con añublo y con granizo en toda obra de vuestras manos; pero ninguno de vosotros {se volvió} a mí" --declara el SEÑOR.
``En aquel día" --declara el SEÑOR de los ejércitos-- ``te tomaré a ti, Zorobabel, hijo de Salatiel, siervo mío" --declara el SEÑOR-- ``y te pondré como {anillo de} sello, porque yo te he escogido" --declara el SEÑOR de los ejércitos.
Diles, pues: ``Así dice el SEÑOR de los ejércitos: `Volveos a mí' --declara el SEÑOR de los ejércitos-- `y yo me volveré a vosotros' --dice el SEÑOR de los ejércitos.
`No seáis como vuestros padres, a quienes los antiguos profetas proclamaron, diciendo: ``Así dice el SEÑOR de los ejércitos: `Volveos ahora de vuestros malos caminos y de vuestras malas obras.'" Pero no me escucharon ni me hicieron caso' --declara el SEÑOR.
``Por tanto, así dice el SEÑOR: `Me volveré a Jerusalén con compasión; en ella será reedificada mi casa' --declara el SEÑOR de los ejércitos-- `y el cordel será tendido sobre Jerusalén.'"
``Y yo seré para ella" --declara el SEÑOR-- ``una muralla de fuego en derredor, y gloria seré en medio de ella."
¿Ea, ea! Huid de la tierra del norte --declara el SEÑOR-- porque como a los cuatro vientos del cielo os dispersé yo --declara el SEÑOR.
Canta de júbilo y alégrate, oh hija de Sion; porque he aquí, vengo, y habitaré en medio de ti --declara el SEÑOR.
``Porque he aquí la piedra que he puesto delante de Josué, sobre {esta} única piedra hay siete ojos. He aquí, yo grabaré una inscripción en ella" --declara el SEÑOR de los ejércitos-- ``y quitaré la iniquidad de esta tierra en un solo día.
``Aquel día" --declara el SEÑOR de los ejércitos-- ``convidaréis cada uno a su prójimo bajo {su} parra y bajo {su} higuera."
La haré salir --declara el SEÑOR de los ejércitos-- y entrará en casa del ladrón y en casa del que jura por mi nombre en falso; y pasará la noche dentro de su casa y la consumirá junto con sus maderas y sus piedras.
Así dice el SEÑOR de los ejércitos: ``Si en aquellos días {esto} parece muy difícil a los ojos del remanente de este pueblo, ¿será también muy difícil a mis ojos?" --declara el SEÑOR de los ejércitos.
``Pero ahora yo no {trataré} al remanente de este pueblo como en los días pasados" --declara el SEÑOR de los ejércitos.
no traméis en vuestro corazón el mal uno contra otro, ni améis el juramento falso; porque todas estas cosas son las que odio" --declara el SEÑOR.
Yo los fortaleceré en el SEÑOR, y en su nombre andarán --declara el SEÑOR.
Pues yo no me compadeceré más de los habitantes de esta tierra --declara el SEÑOR-- sino que he aquí, haré que los hombres caigan cada uno en manos de otro y en manos de su rey; y ellos herirán la tierra y yo no {los} libraré de sus manos.
Profecía de la palabra del SEÑOR acerca de Israel. El SEÑOR que extiende los cielos, pone los cimientos de la tierra y forma el espíritu del hombre dentro de él, declara:
Aquel día --declara el SEÑOR-- heriré a todo caballo de espanto, y a su jinete, de locura. Pero sobre la casa de Judá abriré mis ojos, mientras hiero de ceguera a todo caballo de los pueblos.
Y sucederá aquel día --declara el SEÑOR de los ejércitos-- que eliminaré de la tierra los nombres de los ídolos, y nunca más serán recordados; también yo quitaré de la tierra a los profetas y al espíritu inmundo.
Despierta, espada, contra mi pastor, y contra el hombre compañero mío --declara el SEÑOR de los ejércitos. Hiere al pastor y se dispersarán las ovejas, y volveré mi mano contra los pequeños.
Y sucederá en toda la tierra --declara el SEÑOR-- que dos partes serán cortadas en ella, {y} perecerán; pero la tercera quedará en ella.
Yo os he amado --dice el SEÑOR--. Pero vosotros decís: ¿En qué nos has amado? ¿No {era} Esaú hermano de Jacob? --declara el SEÑOR--. Sin embargo, yo amé a Jacob,
Por tanto, habiendo pasado por alto los tiempos de ignorancia, Dios declara ahora a todos los hombres, en todas partes, que se arrepientan,