'Decía' en la Biblia
Abraham decía de Sara su mujer: ``Es mi hermana." Entonces Abimelec, rey de Gerar, envió y tomó a Sara.
"Si él decía: `Las moteadas serán tu salario,' entonces todo el rebaño paría moteadas; y si decía: `Las rayadas serán tu salario,' entonces todo el rebaño paría rayadas.
Pero siempre que Moisés entraba a la presencia del SEÑOR para hablar con El, se quitaba el velo hasta que salía. Siempre que él salía, decía a los Israelitas lo que el SEÑOR le había {ordenado}.
Y sucedía que cuando el arca se ponía en marcha, Moisés decía: `` ¡Levántate, oh SEÑOR! Y sean dispersados Tus enemigos, Huyan de Tu presencia los que Te aborrecen."
Y cuando {el arca} descansaba, él decía: ``Vuelve, oh SEÑOR, {A} los millares de millares de Israel."
Y se apoderaron los Galaaditas de los vados del Jordán al lado opuesto de Efraín. Cuando alguno {de} los fugitivos de Efraín decía: ``Déjenme cruzar," los hombres de Galaad le decían: `` ¿Eres Efrateo?" Si él respondía: ``No,"
entonces, le decían: ``Di, pues, {la palabra} Shibolet." Pero él decía: ``Sibolet," porque no podía pronunciarla correctamente. Entonces le echaban mano y lo mataban junto a los vados del Jordán. Y cayeron en aquella ocasión 42,000 de los de Efraín.
Además, antes de quemar la grasa, el criado del sacerdote venía y decía al hombre que ofrecía el sacrificio: ``Da al sacerdote carne para asar, pues no aceptará de ti carne cocida, sino solamente cruda."
Y si el hombre le decía: `` ¿Ciertamente deben quemar primero la grasa y después toma todo lo que quieras;" él respondía: ``No, sino que {me la} darás ahora, y si no la tomaré por la fuerza."
Entonces Elí bendecía a Elcana y a su mujer, y decía: ``Que el SEÑOR te dé hijos de esta mujer en lugar del que ella dedicó al SEÑOR." Y regresaban a su casa.
(Antiguamente en Israel, cuando uno iba a consultar a Dios, decía: ``Vengan, vamos al vidente;" porque al que hoy {se le llama} profeta, antes se le llamaba vidente.)
Entonces Saúl dijo a David: ``Mira, te daré por mujer a Merab, mi hija mayor, con tal que me seas hombre valiente y pelees las batallas del SEÑOR." Pues Saúl {se} decía: ``No será mi mano contra él, sino sea contra él la mano de los Filisteos."
Y Aquis decía: `` ¿Dónde atacaron hoy?" Y David respondía: ``Contra el Neguev (región del sur) de Judá, contra el Neguev de Jerameel y contra el Neguev de los Quenitas."
Aquis confiaba en David y se decía: ``En verdad que se ha hecho odioso a su pueblo Israel y será mi servidor para siempre."
Y él respondió: ``Mientras el niño {aún} vivía, yo ayunaba y lloraba, pues me decía: ` ¿Quién sabe si el SEÑOR tendrá compasión de mí y el niño viva?'
Estando aún ellos en el camino, llegó a David el rumor que decía: ``Absalón ha dado muerte a todos los hijos del rey, y no ha quedado ni uno de ellos."
Absalón se levantaba temprano y se situaba junto al camino de la puerta; y sucedía que todo aquél que tenía un pleito y venía al rey para juicio, Absalón lo llamaba y decía: `` ¿De qué ciudad eres?" Y {éste} respondía: ``Tu siervo es de una de las tribus de Israel."
Entonces Absalón le decía: ``Mira, tu causa es buena y justa, pero nadie te va a escuchar de parte del rey."
Decía además Absalón: `` ¡Quién me nombrara juez en la tierra! Entonces todo hombre que tuviera pleito o causa alguna podría venir a mí y yo le haría justicia."
Así decía Simei mientras maldecía: `` ¡Fuera, fuera, hombre sanguinario e indigno!
El rey se conmovió profundamente, y subió al aposento {que había} encima de la puerta y lloró. Y decía así mientras caminaba: `` ¡Hijo mío Absalón; hijo mío, hijo mío Absalón! ¡Quién me diera haber muerto yo en tu lugar! ¡Absalón, hijo mío, hijo mío!"
Entonces la mujer de quien {era} el niño vivo habló al rey, pues estaba profundamente conmovida por su hijo, y dijo: ``Oh, mi señor, déle a ella el niño vivo, y de ninguna manera lo mate." Pero la otra decía: ``No será ni mío ni tuyo; pártan{lo."}
Como al mediodía, Elías se burlaba de ellos y decía: ``Clamen en voz alta, pues es un dios; tal vez {estará} meditando o se habrá desviado, o estará de viaje, quizá esté dormido y habrá que despertarlo."
Y Sedequías, hijo de Quenaana, se había hecho unos cuernos de hierro y decía: ``Así dice el SEÑOR: `Con éstos acornearás a los Arameos hasta acabarlos.'"
"Y el SEÑOR dijo: ` ¿Quién persuadirá a Acab para que suba y caiga en Ramot de Galaad?' Y uno decía de una manera, y otro de otra.
A la puesta del sol, pasó un grito por el ejército que decía: ``Cada hombre a su ciudad y cada uno a su tierra."
También llevó al rey de Israel la carta que decía: ``Y cuando llegue a ti esta carta, {comprenderás} que te he enviado a mi siervo Naamán para que lo cures de su lepra."
Sedequías, hijo de Quenaana, se había hecho cuernos de hierro y decía: ``Así dice el SEÑOR: `Con éstos acornearás a los Arameos hasta acabarlos.'"
"Y el SEÑOR dijo: ` ¿Quién persuadirá a Acab, rey de Israel, para que suba y caiga en Ramot de Galaad?' Y uno decía de una manera, y otro de otra.
Entonces le llegó a Joram una carta del profeta Elías, que decía: ``Así dice el SEÑOR, Dios de tu padre David: `Por cuanto no has andado en los caminos de Josafat tu padre, ni en los caminos de Asa, rey de Judá,
Sacrificaba a los dioses de Damasco que lo habían derrotado, y decía: ``Por cuanto los dioses de los reyes de Aram los ayudaron, sacrificaré a ellos para que me ayuden." Pero ellos fueron su ruina y la de todo Israel.
También Senaquerib escribió cartas para insultar al SEÑOR, Dios de Israel, y para hablar contra El, en que decía: ``Como los dioses de las naciones de las tierras no han librado a sus pueblos de mi mano, así el Dios de Ezequías no librará a Su pueblo de mi mano."
Pero se decía en Judá: ``Desfallecen las fuerzas de los cargadores, Y queda mucho escombro; Nosotros no podemos Reedificar la muralla."
Cuando los días del banquete habían pasado, Job enviaba {a buscarlos} y los santificaba, y levantándose temprano, ofrecía holocaustos {conforme} al número de todos ellos. Porque Job decía: ``Quizá mis hijos hayan pecado y maldecido a Dios en sus corazones." Job siempre hacía así.
Y yo alarmado, decía: `` ¡Cortado soy de delante de Tus ojos!" Sin embargo Tú oíste la voz de mis súplicas Cuando a Ti clamaba.
Entonces él me enseñaba y me decía: ``Retenga tu corazón mis palabras, Guarda mis mandamientos y vivirás.
Y oí la voz del Señor que decía: `` ¿A quién enviaré, y quién irá por nosotros?" ``Aquí estoy; envíame a mí," le respondí.
``Yo había dicho: ` ¡Cómo quisiera ponerte entre Mis hijos, Y darte una tierra deseable, La más hermosa heredad de las naciones!' Y decía: `Padre Mío Me llamarán, Y no se apartarán de seguirme.'
{La carta que fue enviada} por mano de Elasa, hijo de Safán, y de Gemarías, hijo de Hilcías, a quienes Sedequías, rey de Judá, envió a Babilonia, a Nabucodonosor, rey de Babilonia, decía:
`` ¡Apártense! ¡Inmundos!" gritaban de sí mismos. `` ¡Apártense, apártense, no {nos} toquen!" Así que huyeron y vagaron. Entre las naciones se decía: ``No seguirán residiendo {entre nosotros."}
"Cuando llegaron a las naciones adonde fueron, profanaron Mi santo nombre, porque de ellos se decía: `Estos son el pueblo del SEÑOR, y han salido de Su tierra.'
~`En cuanto al vigilante, al santo que el rey vio, que descendía del cielo y decía: ``Derriben el árbol y destrúyanlo, pero dejen el tocón con sus raíces en la tierra, con ataduras de hierro y bronce en la hierba del campo, y que se empape con el rocío del cielo, y que comparta con las bestias del campo, hasta que pasen sobre él siete años (tiempos),"
"Entonces yo seguí mirando a causa del ruido de las palabras arrogantes que el cuerno decía. Seguí mirando hasta que mataron a la bestia, destrozaron su cuerpo y {lo} echaron a las llamas del fuego.
Devastaré sus vides y sus higueras, De las cuales decía ella: `Son la paga Que mis amantes me han dado.' Y las convertiré en matorral, Y las devorarán las bestias del campo.
Y oró al SEÑOR: `` ¡Ah SEÑOR! ¿No era esto lo que yo decía cuando aún estaba en mi tierra? Por eso me anticipé a huir a Tarsis. Porque yo sabía que Tú eres un Dios clemente y compasivo, lento para la ira y rico en misericordia, y que Te arrepientes del mal {anunciado}.
Y sucedió que al salir el sol, Dios dispuso un sofocante viento del este, y el sol hirió la cabeza de Jonás, así que él desfallecía, y con {toda} su alma deseaba morir, y decía: ``Mejor me es la muerte que la vida."
Entonces mi enemiga {lo} verá, Y se cubrirá de vergüenza la que me decía: `` ¿Dónde está el SEÑOR tu Dios?" Mis ojos la contemplarán; Entonces será pisoteada Como el lodo de las calles.
Esta es la ciudad divertida Que vivía confiada, Que decía en su corazón: ``Yo soy, y no hay otra más que yo." ¡Cómo ha sido hecha una desolación, Una guarida de fieras! Todo el que pase por ella silbará {Y} agitará su mano.