'Del' en la Biblia
Y a Heber nacieron dos hijos; el nombre del uno fue Peleg, por cuanto en sus días fue dividida la tierra; y el nombre de su hermano fue Joctán.
Hijo de Salomón fue Roboam, cuyo hijo fue Abías, del cual fue hijo Asa, cuyo hijo fue Josafat;
de quien fue hijo Joram, cuyo hijo fue Ocozías, hijo del cual fue Joás;
del cual fue hijo Amasías, cuyo hijo fue Azarías, e hijo de éste, Jotam;
e hijo del cual fue Acaz, del que fue hijo Ezequías, cuyo hijo fue Manasés;
Los hijos de Joacim: Jeconías su hijo, hijo del cual fue Sedequías.
Y éstas son las del padre de Etam: Jezreel, Isma e Ibdas. Y el nombre de su hermana fue Haslelponi.
Los hijos de Sela, hijo de Judá: Er, padre de Leca, y Laada, padre de Maresa, y de la familia de la casa del oficio del lino en la casa de Asbea;
Y llegaron hasta la entrada de Gedor hasta el oriente del valle, buscando pastos para sus ganados.
Habitó también desde el oriente hasta la entrada del desierto desde el río Éufrates; porque su ganado se había multiplicado en la tierra de Galaad.
Éstos son a los que David puso sobre el servicio del canto en la casa de Jehová, después que el arca tuvo reposo:
Los cuales servían delante de la tienda del tabernáculo de la congregación en el canto, hasta que Salomón edificó la casa de Jehová en Jerusalén; después estuvieron en su ministerio según su costumbre.
Y sus hermanos los levitas fueron puestos sobre todo el ministerio del tabernáculo de la casa de Dios.
Mas Aarón y sus hijos quemaban ofrendas sobre el altar del holocausto, y sobre el altar del incienso, en toda la obra del lugar santísimo, y para hacer las expiaciones sobre Israel, conforme a todo lo que Moisés siervo de Dios había mandado.
De la media tribu de Manasés, a Aner con sus ejidos, y a Bilam con sus ejidos, para los del linaje de los hijos de Coat que habían quedado.
Y del otro lado del Jordán, frente a Jericó, al oriente del Jordán, dieron de la tribu de Rubén, a Beser en el desierto con sus ejidos; y a Jahaza con sus ejidos.
Y Maquir tomó por esposa la hermana de Hupim y Supim, cuya hermana tuvo por nombre Maaca; y el nombre del segundo fue Zelofehad. Y Zelofehad tuvo hijas.
Y la heredad y habitación de ellos fue Betel con sus aldeas; y hacia el oriente Naarán, y a la parte del occidente Gezer y sus aldeas; asimismo Siquem con sus aldeas, hasta Gaza y sus aldeas.
Y en Gabaón habitaron el padre de Gabaón, la esposa del cual se llamó Maaca,
y Mosa engendró a Bina, hijo del cual fue Rafa, hijo del cual fue Elasa, cuyo hijo fue Azel.
Los primeros moradores que entraron en sus posesiones en sus ciudades, fueron los israelitas, los sacerdotes, los levitas y los servidores del templo.
y sus hermanos, cabezas de las casas de sus padres, en número de mil setecientos sesenta, hombres de gran eficacia en la obra del ministerio en la casa de Dios.
Y hasta ahora entre las cuadrillas de los hijos de Leví han sido estos los porteros en la puerta del Rey que está al oriente.
Y Salum hijo de Coré, hijo de Ebiasaf, hijo de Coré, y sus hermanos los coreítas por la casa de su padre, tuvieron cargo de la obra del ministerio, guardando las puertas del tabernáculo; así como sus padres fueron guardas de la entrada del campamento de Jehová.
Y Zacarías hijo de Meselemías era portero de la puerta del tabernáculo del testimonio.
Así ellos y sus hijos eran porteros por sus turnos a las puertas de la casa de Jehová, y de la casa del tabernáculo.
Algunos de ellos tenían a su cargo los utensilios del ministerio, los cuales se metían por cuenta, y por cuenta se sacaban.
Y otros de ellos tenían el cargo de la vajilla, y de todos los utensilios del santuario, de la harina, del vino, del aceite, del incienso, y de las especias.
Y Mosa engendró a Bina, cuyo hijo fue Refaías, del que fue hijo Elasa, cuyo hijo fue Azel.
se levantaron todos los hombres valientes, y tomaron el cuerpo de Saúl, y los cuerpos de sus hijos, y los trajeron a Jabes; y enterraron sus huesos debajo del alcornoque en Jabes, y ayunaron siete días.
David deseó entonces, y dijo: ¡Quién me diera de beber de las aguas del pozo de Belén, que está a la puerta!
Y aquellos tres irrumpieron por el campamento de los filisteos, y sacaron agua del pozo de Belén, que está a la puerta, y tomaron y la trajeron a David; mas él no la quiso beber, sino que la derramó a Jehová, y dijo:
El mismo venció a un egipcio, hombre de cinco codos de estatura: y el egipcio traía una lanza como un rodillo de tejedor; mas él descendió a él con un palo, y arrebató la lanza de la mano del egipcio, y lo mató con su propia lanza.
Éstos fueron capitanes del ejército de los hijos de Gad. El menor tenía cargo de cien hombres, y el mayor de mil.
asimismo Joiada, príncipe de los del linaje de Aarón, y con él tres mil setecientos;
Y del otro lado del Jordán, de los rubenitas y de los gaditas y de la media tribu de Manasés, ciento veinte mil con todo tipo de armas de guerra.
Y con ellos a sus hermanos del segundo orden, a Zacarías, Ben, Jaaziel, Semiramot, Jehiel, Uni, Eliab, Benaía, Maasías, Matatías, Elifelehu, Micnías, Obed-edom y Jeiel, los porteros.
Y Sebanías, Josafat, Natanael, Amasai, Zacarías, Benaía, y Eliezer, sacerdotes, tocaban las trompetas delante del arca de Dios: Obed-edom y Jehías eran también porteros del arca.
David, pues, y los ancianos de Israel, y los capitanes de millares, fueron a traer el arca del pacto de Jehová, de casa de Obed-edom, con alegría.
Y sucedió que cuando Dios ayudó a los levitas que llevaban el arca del pacto de Jehová, ellos sacrificaron siete novillos y siete carneros.
De esta manera llevaba todo Israel el arca del pacto de Jehová, con júbilo y sonido de bocinas, y trompetas, y címbalos, y al son de salterios y arpas.
Y aconteció que cuando el arca del pacto de Jehová llegó a la ciudad de David, Mical, hija de Saúl, mirando por una ventana, vio al rey David que saltaba y danzaba; y lo menospreció en su corazón.
Y puso delante del arca de Jehová ministros de los levitas, para que recordasen y dieran gracias y loasen a Jehová Dios de Israel.
También los sacerdotes Benaía y Jahaziel, tocaban continuamente las trompetas delante del arca del pacto de Dios.
del pacto que concertó con Abraham, y de su juramento a Isaac;
Y dejó allí, delante del arca del pacto de Jehová, a Asaf y a sus hermanos, para que ministrasen de continuo delante del arca, cada cosa en su día:
Asimismo a Sadoc el sacerdote, y a sus hermanos los sacerdotes, delante del tabernáculo de Jehová en el alto que estaba en Gabaón,
para que sacrificasen continuamente, a mañana y tarde, holocaustos a Jehová en el altar del holocausto, conforme a todo lo que está escrito en la ley de Jehová, que Él prescribió a Israel;
Y aconteció que morando David en su casa, dijo David al profeta Natán: He aquí yo habito en casa de cedro, y el arca del pacto de Jehová debajo de cortinas.
Por tanto, ahora dirás a mi siervo David: Así dice Jehová de los ejércitos: Yo te tomé del redil, de detrás del rebaño, para que fueses príncipe sobre mi pueblo Israel;
Y Joab hijo de Sarvia era general del ejército; y Josafat hijo de Ahilud, cronista.
Y Benaía hijo de Joiada era sobre los cereteos y peleteos; y los hijos de David eran los príncipes cerca del rey.
Y viendo los sirios que habían caído delante de Israel, enviaron embajadores, y trajeron a los sirios que estaban al otro lado del río, cuyo capitán era Sofac, general del ejército de Hadad-ezer.
Pero los sirios huyeron delante de Israel; y mató David de los sirios siete mil hombres de los carros, y cuarenta mil hombres de a pie; asimismo mató a Sofac, general del ejército.
Y aconteció a la vuelta del año, en el tiempo que suelen los reyes salir a la guerra, que Joab sacó las fuerzas del ejército, y destruyó la tierra de los hijos de Amón, y vino y sitió a Rabá. Mas David estaba en Jerusalén; y Joab batió a Rabá, y la destruyó.
Entonces David tomó la corona del rey de ellos de sobre su cabeza, y la halló de peso de un talento de oro, y había en ella piedras preciosas; y fue puesta sobre la cabeza de David. Y además de esto sacó de la ciudad muy grande botín.
Después de esto aconteció que se levantó guerra en Gezer contra los filisteos; e hirió Sibecai husatita a Sipai, del linaje de los gigantes; y fueron humillados.
Éstos fueron hijos del gigante de Gat, los cuales cayeron por mano de David y de sus siervos.
Y dijo David a Joab y a los príncipes del pueblo: Id, contad a Israel desde Beerseba hasta Dan, y traedme el número de ellos para que yo lo sepa.
Mas el mandamiento del rey pudo más que Joab. Salió, por tanto, Joab y recorrió todo Israel, y volvió a Jerusalén.
Y Joab dio la cuenta del número del pueblo a David. Y había en todo Israel un millón cien mil que sacaban espada, y de Judá cuatrocientos setenta mil hombres que sacaban espada.
Entre éstos no fueron contados los levitas, ni los hijos de Benjamín, porque Joab abominaba el mandamiento del rey.
Entonces dijo David a Ornán: Dame este lugar de la era, para que edifique un altar a Jehová, y dámelo por su cabal precio, para que cese la plaga del pueblo.
Y edificó allí David un altar a Jehová, en el que ofreció holocaustos y ofrendas de paz, e invocó a Jehová, el cual le respondió por fuego desde los cielos en el altar del holocausto.
Y el tabernáculo de Jehová que Moisés había hecho en el desierto, y el altar del holocausto, estaban entonces en el alto de Gabaón:
Pero David no pudo ir allá a consultar a Dios, porque estaba espantado a causa de la espada del ángel de Jehová.
Y dijo David: Ésta será la casa de Jehová Dios, y éste será el altar del holocausto para Israel.
He aquí, yo en mi aflicción he preparado para la casa de Jehová cien mil talentos de oro, y un millar de millares de talentos de plata; y del bronce y del hierro no hay peso, porque es mucho. Asimismo he preparado madera y piedra, a lo cual tú añadirás.
Del oro, de la plata, del bronce, y del hierro, no hay número. Levántate, pues, y manos a la obra, y Jehová sea contigo.
Poned, pues, ahora vuestros corazones y vuestros ánimos en buscar a Jehová vuestro Dios; y levantaos, y edificad el santuario de Jehová Dios, para traer el arca del pacto de Jehová, y los utensilios sagrados de Dios, a la casa edificada al nombre de Jehová.
Y estaban bajo la mano de los hijos de Aarón, para ministrar en la casa de Jehová, en los atrios y en las cámaras, y en la purificación de toda cosa santificada, y en la demás obra del ministerio de la casa de Dios.
Y para que tuviesen la guarda del tabernáculo de la congregación, y la guarda del santuario, y las órdenes de los hijos de Aarón sus hermanos, en el ministerio de la casa de Jehová.
Los repartieron, pues, por suerte los unos con los otros; porque de los hijos de Eleazar y de los hijos de Itamar hubo príncipes del santuario, y príncipes de la casa de Dios.
Y Semaías escriba, hijo de Natanael, de los levitas, los escribió delante del rey y de los príncipes, y delante de Sadoc el sacerdote, y de Ahimelec hijo de Abiatar, y de los príncipes de las familias de los sacerdotes y levitas, asignaban una familia para Eleazar, y otra para Itamar.
Éstos también echaron suertes, como sus hermanos los hijos de Aarón, delante del rey David, y de Sadoc y de Ahimelec, y de los príncipes de las familias de los sacerdotes y levitas; el principal de los padres igualmente que el menor de sus hermanos.
Asimismo David y los príncipes del ejército apartaron para el ministerio a los hijos de Asaf, y de Hemán, y de Jedutún, para que profetizasen con arpas, salterios, y címbalos; y el número de ellos, hombres idóneos para la obra de su ministerio respectivo fue:
De los hijos de Asaf: Zacur, José, Netanías y Asareela, hijos de Asaf, bajo la dirección de Asaf, el cual profetizaba a la orden del rey.
Todos éstos fueron hijos de Hemán, vidente del rey en palabras de Dios, para exaltar su poder; y dio Dios a Hemán catorce hijos y tres hijas.
Y todos éstos estaban bajo la dirección de su padre en la música, en la casa de Jehová, con címbalos, salterios y arpas, para el ministerio del templo de Dios, por disposición del rey acerca de Asaf, de Jedutún, y de Hemán.
Y echaron suertes para los turnos del servicio, entrando el pequeño con el grande, lo mismo el maestro que el discípulo.
En orden a su hermano Eliezer, hijo de éste era Rehabía, hijo de éste Jesahías, hijo de éste Joram, hijo de éste Zicri, del que fue hijo Selomit.
Este Selomit y sus hermanos tenían cargo de todos los tesoros de todas las cosas santificadas, que había consagrado el rey David, y los príncipes de las familias, y los capitanes de millares y de centenas, y los jefes del ejército;
De los hebronitas, Hasabías y sus hermanos, hombres de vigor, mil setecientos, gobernaban a Israel al otro lado del Jordán, al occidente, en toda la obra de Jehová, y en el servicio del rey.
De los hebronitas, Jerías era el principal entre los hebronitas repartidos en sus linajes por sus familias. En el año cuarenta del reinado de David se registraron, y se hallaron entre ellos fuertes y vigorosos en Jazer de Galaad.
Y sus hermanos, hombres valientes, eran dos mil setecientos, cabezas de familias, los cuales el rey David constituyó sobre los rubenitas, gaditas, y sobre la media tribu de Manasés, para todas las cosas de Dios, y los negocios del rey.
Y los hijos de Israel según su número, es decir, príncipes de familias, jefes de millares y de centenas, y oficiales de los que servían al rey en todos los negocios de las divisiones que entraban y salían cada mes en todos los meses del año, eran en cada división veinticuatro mil.
Sobre la primera división del primer mes estaba Jasobam hijo de Zabdiel; y había en su división veinticuatro mil.
De los hijos de Fares era el jefe de todos los capitanes de las compañías del primer mes.
Sobre la división del segundo mes estaba Dodai ahohíta; y Miclot era jefe en su división, en la que también había veinticuatro mil.
Y no tomó David el número de los que eran de veinte años abajo, por cuanto Jehová había dicho que Él había de multiplicar a Israel como las estrellas del cielo.
Joab hijo de Sarvia había comenzado a contar, mas no acabó, pues por esto vino la ira sobre Israel; y así el número no fue puesto en el registro de las crónicas del rey David.
Y Azmavet hijo de Adiel tenía a su cargo los tesoros del rey; y de los tesoros de los campos, y de las ciudades, y de las aldeas y castillos, Jonatán hijo de Uzías;
Y de las viñas Simeí ramatita; y del fruto de las viñas para las bodegas, Zabdi sifmita;
Y de los olivares y de los sicómoros del valle, Baal-hanán gederita; y de los almacenes del aceite, Joás;
Y de las ovejas, Jaziz agareno. Todos éstos eran superintendentes de la hacienda del rey David.
Y Jonatán, tío de David, era consejero, varón prudente y escriba; y Jehiel hijo de Hacmoni estaba con los hijos del rey.
Y también Ahitofel era consejero del rey; y Husai arquita amigo del rey.
Después de Ahitofel era Joiada hijo de Benaía, y Abiatar. Y Joab era el general del ejército del rey.