'División' en la Biblia
Y yo pondré división entre mi pueblo y el tuyo. Mañana será esta señal.
Y los hijos de Israel según su número, es decir, príncipes de familias, jefes de millares y de centenas, y oficiales de los que servían al rey en todos los negocios de las divisiones que entraban y salían cada mes en todos los meses del año, eran en cada división veinticuatro mil.
Sobre la primera división del primer mes estaba Jasobam hijo de Zabdiel; y había en su división veinticuatro mil.
Sobre la división del segundo mes estaba Dodai ahohíta; y Miclot era jefe en su división, en la que también había veinticuatro mil.
El jefe de la tercera división para el tercer mes era Benaía, hijo de Joiada el sumo sacerdote; y en su división había veinticuatro mil.
Este Benaía era valiente entre los treinta y sobre los treinta; y en su división estaba Amisabad su hijo.
El cuarto jefe para el cuarto mes era Asael hermano de Joab, y después de él Zebadías su hijo; y en su división había veinticuatro mil.
El quinto jefe para el quinto mes era Samhut izrita; y en su división había veinticuatro mil.
El sexto para el sexto mes era Ira hijo de Iques, de Tecoa; y en su división veinticuatro mil.
El séptimo para el séptimo mes era Heles pelonita, de los hijos de Efraín; y en su división veinticuatro mil.
El octavo para el octavo mes era Sibecai husatita, de los zeraítas; y en su división veinticuatro mil.
El noveno para el noveno mes era Abiezer anatotita, de los benjamitas; y en su división veinticuatro mil.
El décimo para el décimo mes era Maharai netofatita, de los zeraítas; y en su división veinticuatro mil.
El undécimo para el undécimo mes era Benaía piratonita, de los hijos de Efraín; y en su división veinticuatro mil.
El duodécimo para el duodécimo mes era Heldai netofatita, de Otoniel; y en su división veinticuatro mil.
Estad en el santuario según la distribución de las familias de vuestros hermanos los hijos del pueblo, y según la división de la familia de los levitas.
pero vuestras iniquidades han hecho división entre vosotros y vuestro Dios, y vuestros pecados han hecho ocultar su rostro de vosotros, para no oír.