'Fuera' en la Biblia
Y yo no le conocía; más para que fuera manifestado a Israel, por eso vine yo bautizando con agua.
Todo lo que el Padre me da, vendrá a mí; y al que a mí viene, no le echo fuera.
Jesús entonces les dijo: Si vuestro padre fuera Dios, ciertamente me amaríais; porque yo de Dios he salido, y he venido; que no he venido de mí mismo, mas él me envió.
Les dijo Jesús: De cierto, de cierto os digo: Antes que Abraham fuera, YO SOY.
Esto dijeron sus padres, porque tenían miedo de los judíos; porque ya los judíos habían conspirado, que si alguno confesaba ser él el Cristo, fuera expulsado de la sinagoga.
Si éste no fuera venido de Dios, no pudiera hacer nada.
Respondieron, y le dijeron: En pecados eres nacido del todo, ¿y tú nos enseñas? Y le echaron fuera.
Oyó Jesús que le habían echado fuera; y hallándole, le dijo: ¿Crees tú en el Hijo de Dios?
Y cuando ha sacado fuera sus ovejas, va delante de ellas; y las ovejas le siguen, porque conocen su voz.
Y muchos de ellos decían: Demonio tiene, y está fuera de sí; ¿para qué le oís?
Y habiendo dicho estas cosas, clamó a gran voz: Lázaro, ven fuera.
Ahora es el juicio de este mundo; ahora el príncipe de este mundo será echado fuera.
El que no permanece en mí, será echado fuera como mal pámpano, y se secará; y los cogen, y los echan en el fuego, y arden.
Ahora pues, Padre, clarifícame tú cerca de ti mismo de aquella claridad que tuve cerca de ti antes que el mundo fuera.
mas Pedro estaba fuera a la puerta. Y salió aquel discípulo que era conocido del sumo sacerdote, y habló a la portera, y metió dentro a Pedro.
Entonces salió Pilato a ellos fuera, y dijo: ¿Qué acusación traéis contra este hombre?
Respondieron y le dijeron: Si éste no fuera malhechor, no te lo habríamos entregado.
Respondió Jesús: Mi Reino no es de este mundo; si de este mundo fuera mi Reino, mis servidores pelearían para que yo no fuera entregado a los judíos; ahora, pues, mi Reino no es de aquí.
Entonces Pilato salió otra vez fuera, y les dijo: He aquí, os lo traigo fuera, para que entendáis que ningún crimen hallo en él.
Así salió Jesús fuera, llevando la corona de espinas y la ropa de grana. Y les dice Pilato: He aquí el hombre.
Respondió Jesús: Ninguna potestad tendrías contra mí, si no te fuera dada de arriba; por tanto, el que a ti me ha entregado, mayor pecado tiene.
Entonces Pilato, oyendo este dicho, llevó fuera a Jesús, y se sentó en el tribunal en el lugar que se dice el Enlosado, y en hebreo Gábata.
Así que entonces lo entregó a ellos para que fuera colgado de un madero. Y tomaron a Jesús, y le llevaron.
Pero María estaba fuera llorando junto al sepulcro; y estando llorando, se bajó y miró al sepulcro;