'Inmundo' en la Biblia
Asimismo la persona que hubiere tocado cualquier cosa inmunda, sea cuerpo muerto de bestia inmunda, o cuerpo muerto de animal inmundo, o cuerpo muerto de serpiente inmunda, bien que no lo supiere, será inmunda y será culpable.
O si tocare a hombre inmundo en cualquier inmundicia suya de que es inmundo, y no lo echare de ver; si después llegare a saberlo, será culpable.
Además, la persona que tocare alguna cosa inmunda, en inmundicia de hombre, o en animal inmundo, o en cualquier abominación inmunda, y comiere de la carne del sacrificio de la paz, el cual es del SEÑOR, aquella persona será cortada de su pueblo.
y esto para poder discernir entre lo santo y lo profano, y entre lo inmundo y lo limpio;
Estos sin embargo, no comeréis de los que rumian y de los que tienen pezuña: el camello, porque rumia mas no tiene pezuña hendida, habéis de tenerlo por inmundo;
también el conejo, porque rumia, mas no tiene pezuña, lo tendréis por inmundo;
también el puerco, porque tiene pezuñas, y es de pezuñas hendidas, mas no rumia, lo tendréis por inmundo.
Y por estas cosas seréis inmundos: cualquiera que tocare sus cuerpos muertos, será inmundo hasta la tarde;
y cualquiera que llevare algo de sus cuerpos muertos, lavará sus vestidos, y será inmundo hasta la tarde.
Todo animal de pezuña, pero que no tiene pezuña hendida, ni rumia, tendréis por inmundo; cualquiera que tocare sus cuerpos muertos será inmundo.
Y de todos los animales que andan en cuatro patas, lo tendréis por inmundo cualquiera que ande sobre sus garras; cualquiera que tocare sus cuerpos muertos, será inmundo hasta la tarde.
Y el que llevare sus cuerpos muertos, lavará sus vestidos, y será inmundo hasta la tarde; habéis de tenerlos por inmundos.
Estos tendréis por inmundos de todos los animales; cualquiera que los tocare, cuando estuvieren muertos, será inmundo hasta la tarde.
Y todo aquello sobre lo que cayere alguno de ellos después de muertos, será inmundo; así vaso de madera, como vestido, o piel, o saco, cualquier instrumento con que se hace obra, será metido en agua, y será inmundo hasta la tarde, y así será limpio.
Y todo vaso de barro dentro del cual cayere alguno de ellos, todo lo que estuviere en él será inmundo, y quebraréis el vaso.
Y todo aquello sobre lo que cayere algo del cuerpo muerto de ellos, será inmundo; el horno y la chimenea serán derribados; son inmundos, y por inmundos los tendréis.
Con todo, la fuente y la cisterna donde se recogen aguas, serán limpias; mas lo que hubiere tocado en sus cuerpos muertos será inmundo.
Y si algún animal que tuviereis para comer se muriere, el que tocare su cuerpo muerto será inmundo hasta la tarde;
y el que comiere de su cuerpo muerto, lavará sus vestidos, y será inmundo hasta la tarde; asimismo el que sacare su cuerpo muerto, lavará sus vestidos, y será inmundo hasta la tarde.
para hacer diferencia entre lo inmundo y lo limpio, y entre los animales que se pueden comer y los animales que no se pueden comer.
y el sacerdote mirará la llaga en la piel de la carne; si el pelo en la llaga se ha vuelto blanco, y pareciere la llaga más hundida que la tez de la carne, llaga de lepra es; y el sacerdote le reconocerá, y le dará por inmundo.
y si reconociéndolo el sacerdote, ve que la postilla ha crecido en la piel, el sacerdote lo dará por inmundo: es lepra.
lepra es envejecida en la piel de su carne; y le dará por inmundo el sacerdote, y no le encerrará, porque es inmundo.
Mas el día que apareciere en él la carne viva, será inmundo.
Y el sacerdote mirará la carne viva, y lo dará por inmundo. Es inmunda la carne viva: es lepra.
y el sacerdote mirará; y si pareciere estar más baja que su piel, y su pelo se hubiere vuelto blanco, lo dará el sacerdote por inmundo; es llaga de lepra que se originó en la postema.
y si se fuere extendiendo por la piel, entonces el sacerdote lo dará por inmundo: es llaga.
el sacerdote la mirará; y si el pelo se hubiere vuelto blanco en la mancha, y pareciere estar más hundida que la piel, es lepra que salió en la quemadura; y el sacerdote lo dará por inmundo; llaga de lepra es.
y al séptimo día el sacerdote la reconocerá; si se hubiere ido extendiendo por la piel, el sacerdote lo dará por inmundo; es llaga de lepra.
el sacerdote mirará la llaga; y si pareciere estar más profunda que la tez, y el pelo en ella fuera rubio y adelgazado, entonces el sacerdote lo dará por inmundo; es tiña, es lepra de la cabeza o de la barba.
entonces el sacerdote la mirará; y si la tiña hubiere cundido en la piel, no busque el sacerdote el pelo rubio, es inmundo.
hombre leproso es, es inmundo; el sacerdote lo dará por completamente inmundo; en su cabeza tiene su llaga.
Y el leproso en quien hubiere tal llaga, sus vestidos serán deshechos y su cabeza descubierta, y embozado pregonará: ¡Inmundo! ¡Inmundo!
Todo el tiempo que la llaga estuviere en él, será inmundo; estará impuro: habitará solo; fuera del campamento será su morada.
entonces mandará el sacerdote, y arrancarán las piedras en que estuviere la plaga, y las echarán fuera de la ciudad, en un lugar inmundo;
y hará raspar todo el interior de la casa, y derramarán el polvo que raspen fuera de la ciudad en un lugar inmundo;
Entonces derribará la casa, sus piedras, y sus maderos, y toda la mezcla de la casa; y lo sacará fuera todo de la ciudad a un lugar inmundo.
Y cualquiera que entrare en aquella casa todos los días que la mandó cerrar, será inmundo hasta la tarde.
para enseñar cuándo es inmundo, y cuándo es limpio. Esta es la ley de la lepra.
Hablad a los hijos de Israel, y decidles: Cualquier varón, cuando su simiente manare de su carne, será inmundo.
Y esta será su inmundicia en su flujo; sea que su carne destiló por causa de su flujo, o que su carne se cerró por causa de su flujo, él será inmundo.
Y cualquiera que tocare su cama, lavará sus vestidos; se lavará también a sí mismo con agua, y será inmundo hasta la tarde.
Y el que se sentare sobre aquello en que se hubiere sentado el que tiene flujo, lavará sus vestidos, se lavará también a sí mismo con agua, y será inmundo hasta la tarde.
Asimismo el que tocare la carne del que tiene flujo, lavará sus vestidos, y a sí mismo se lavará con agua, y será inmundo hasta la tarde.
Y si el que tiene flujo escupiere sobre el limpio, éste lavará sus vestidos, y después de haberse lavado con agua, será inmundo hasta la tarde.
Y todo aparejo sobre que cabalgare el que tuviere flujo, será inmundo.
Y cualquiera que tocare cualquier cosa que haya estado debajo de él, será inmundo hasta la tarde; y el que la llevare, lavará sus vestidos, y después de lavarse con agua, será inmundo hasta la tarde.
Y todo aquel a quien tocare el que tiene flujo, y no lavare con agua sus manos, lavará sus vestidos, y a sí mismo se lavará con agua, y será inmundo hasta la tarde.
Y el hombre, cuando de él saliere derramamiento de simiente, lavará en agua toda su carne, y será inmundo hasta la tarde.
Y cuando la mujer tuviere flujo de sangre, y su flujo fuere en su carne, siete días estará apartada; y cualquiera que la tocare, será inmundo hasta la tarde.
Y todo aquello sobre lo que ella se acostare mientras su separación, será inmundo; y todo aquello sobre lo que se sentare, será inmundo.
Y cualquiera que tocare su cama, lavará sus vestidos, y a sí mismo se lavará con agua, y será inmundo hasta la tarde.
También cualquiera que tocare cualquier mueble sobre lo que ella se hubiere sentado, lavará sus vestidos; se lavará luego a sí mismo con agua, y será inmundo hasta la tarde.
Y si alguna cosa estuviere sobre la cama, o sobre la silla en que ella se hubiere sentado, el que lo tocare será inmundo hasta la tarde.
Y si alguno durmiere con ella, y la inmundicia de ella fuere sobre él, será inmundo por siete días; y toda cama sobre la que durmiere, será inmunda.
Toda cama en que durmiere todo el tiempo de su flujo, le será como la cama de su costumbre; y todo mueble sobre el que se sentare, será inmundo, como la inmundicia de su costumbre.
Cualquiera que tocare esas cosas será inmundo; y lavará sus vestidos, y a sí mismo se lavará con agua, y será inmundo hasta la tarde.
Esta es la ley del que tiene flujo, y del que sale derramamiento de simiente, viniendo a ser inmundo a causa de ello;
Y cualquier persona que comiere cosa mortecina o despedazada por fiera, así de los naturales como de los extranjeros, lavará sus vestidos, y a sí mismo se lavará con agua, y será inmundo hasta la tarde; y se limpiará.
Por tanto, vosotros haréis diferencia entre animal limpio e inmundo, y entre ave inmunda y limpia; y no ensuciéis vuestras personas en los animales, ni en las aves, ni en ninguna cosa que se va arrastrando por la tierra, las cuales os he apartado por inmundas.
o el varón que hubiere tocado cualquier reptil, por el cual será inmundo, u hombre por el cual venga a ser inmundo, conforme a cualquier inmundicia suya;
Y si fuere algún animal inmundo, de que no se ofrece ofrenda al SEÑOR, entonces el animal será puesto delante del sacerdote,