'Los' en la Biblia
Elcana tenía dos mujeres: el nombre de una {era} Ana y el de la otra Penina. Penina tenía hijos, pero Ana no los tenía.
Todos los años aquel hombre subía de su ciudad para adorar y ofrecer sacrificio al SEÑOR de los ejércitos en Silo. Allí los dos hijos de Elí, Ofni y Finees, eran sacerdotes del SEÑOR.
Entonces hizo voto y dijo: ``Oh SEÑOR de los ejércitos, si Te dignas mirar la aflicción de Tu sierva, Te acuerdas de mí y no Te olvidas de Tu sierva, sino que das un hijo a Tu sierva, yo lo dedicaré al SEÑOR por todos los días de su vida y nunca pasará navaja sobre su cabeza."
"Por lo cual yo también lo he dedicado al SEÑOR. Todos los días de su vida estará dedicado al SEÑOR." Y adoró allí al SEÑOR.
Quebrados son los arcos de los fuertes, Pero los débiles se ciñen de poder.
Los que estaban saciados se alquilan por pan, Y dejan {de tener hambre} los que estaban hambrientos. Aun la estéril da a luz a siete, Pero la que tiene muchos hijos desfallece.
El SEÑOR da muerte y da vida; Hace bajar al Seol (región de los muertos) y hace subir.
Levanta del polvo al pobre, Del muladar levanta al necesitado Para hacer{los} sentar con los príncipes, Y heredar un sitio de honor; Pues las columnas de la tierra son del SEÑOR, Y sobre ellas ha colocado el mundo.
El guarda los pies de Sus santos, Pero los malvados son acallados en tinieblas, Pues no por la fuerza ha de prevalecer el hombre.
Los que se oponen al SEÑOR serán quebrantados, El tronará desde los cielos contra ellos. El SEÑOR juzgará los confines de la tierra, Dará fortaleza a Su rey, Y ensalzará el poder de Su ungido."
Pero los hijos de Elí {eran} hombres indignos; no conocían al SEÑOR
ni la costumbre de los sacerdotes con el pueblo: cuando alguien ofrecía sacrificio, venía el criado del sacerdote con un tenedor de tres dientes en su mano mientras se cocía la carne,
lo introducía en la cazuela, la olla, la caldera o el caldero, y todo lo que el tenedor sacaba, lo tomaba el sacerdote para sí. Así hacían ellos en Silo con todos los Israelitas que iban allí.
El pecado de los jóvenes era muy grande delante del SEÑOR, porque despreciaban la ofrenda del SEÑOR.
Y el niño Samuel crecía en estatura y en gracia para con el SEÑOR y para con los hombres.
` ¿{No} los escogí de entre todas las tribus (la de Leví) de Israel para ser Mis sacerdotes, para subir a Mi altar, para quemar incienso, para llevar un efod delante de Mí? ¿{No} le di a la casa de tu padre todas las ofrendas encendidas de los Israelitas?
"Por tanto, el SEÑOR, Dios de Israel, declara: `Ciertamente Yo había dicho que tu casa y la casa de tu padre andarían delante de Mí para siempre;' pero ahora el SEÑOR declara: `Lejos esté esto de Mí, porque Yo honraré a los que Me honran, y los que Me desprecian serán tenidos en poco.
~`Sin embargo, a algunos de los tuyos no cortaré de Mi altar para que tus ojos se consuman {llorando} y tu alma sufra; pero todos los nacidos en tu casa morirán en la flor de la juventud.
~`Y para ti, ésta será la señal que vendrá en cuanto a tus dos hijos, Ofni y Finees: en el mismo día morirán los dos.
~`Pero levantaré para Mí un sacerdote fiel que hará conforme a {los deseos} de Mi corazón y de Mi alma; y le edificaré una casa duradera, y él andará siempre delante de Mi ungido.
~`Y todo aquél que haya quedado de tu casa vendrá y se postrará ante él por una moneda de plata o una torta de pan, y le dirá: ``Asígname a uno de los oficios sacerdotales para {que pueda} comer un bocado de pan."'"
"Porque le he hecho saber que estoy a punto de juzgar su casa para siempre a causa de la iniquidad de la cual él sabía, pues sus hijos trajeron sobre sí una maldición, y él no los reprendió.
La palabra de Samuel llegaba a todo Israel. Cuando Israel salió para enfrentarse en batalla con los Filisteos, acampó junto a Ebenezer, mientras que los Filisteos habían acampado en Afec.
Los Filisteos se pusieron en orden de batalla para enfrentarse a Israel. Entablado el combate, Israel fue derrotado delante de los Filisteos, quienes mataron como a 4,000 hombres en el campo de batalla.
Cuando el pueblo volvió al campamento, los ancianos de Israel dijeron: `` ¿Por qué nos ha derrotado hoy el SEÑOR delante de los Filisteos? Tomemos con nosotros, de Silo, el arca del pacto del SEÑOR, para que vaya en medio de nosotros y nos libre del poder de nuestros enemigos."
El pueblo envió gente a Silo, y trajeron de allí el arca del pacto del SEÑOR de los ejércitos que está {sobre} los querubines. Los dos hijos de Elí, Ofni y Finees, {estaban} allí con el arca del pacto de Dios.
Al oír los Filisteos el ruido del clamor, dijeron: `` ¿Qué {significa} el ruido de este gran clamor en el campamento de los Hebreos?" Entonces comprendieron que el arca del SEÑOR había llegado al campamento.
Y los Filisteos tuvieron temor, pues dijeron: ``Dios ha venido al campamento." Y añadieron: `` ¡Ay de nosotros! Porque nada como esto ha sucedido antes.
" ¡Ay de nosotros! ¿Quién nos librará de la mano de estos dioses poderosos? Estos son los dioses que hirieron a los Egipcios en el desierto con toda {clase de} plagas.
"Cobren ánimo y sean hombres, oh Filisteos, para que no lleguen a ser esclavos de los Hebreos como ellos han sido esclavos de ustedes. Sean hombres, pues, y peleen."
Los Filisteos pelearon, Israel fue derrotado y cada cual huyó a su tienda; la mortandad fue muy grande, pues de Israel cayeron 30,000 soldados de a pie.
El arca de Dios fue capturada, y murieron Ofni y Finees, los dos hijos de Elí.
Al oír Elí el ruido de los gritos, dijo: `` ¿Qué {significa} el ruido de este tumulto?" Entonces el hombre se acercó apresuradamente y dio la noticia a Elí.
El que trajo la noticia respondió: ``Israel ha huido delante de los Filisteos, además ha habido gran matanza entre el pueblo, también han muerto tus dos hijos, Ofni y Finees, y el arca de Dios ha sido tomada."
Su nuera, la mujer de Finees, estaba encinta y a punto de dar a luz, y al oír la noticia que el arca de Dios había sido tomada y que su suegro y su marido habían muerto, se arrodilló y dio a luz, porque le sobrevinieron los dolores {de parto.}
Los Filisteos tomaron el arca de Dios y la llevaron de Ebenezer a Asdod.
Entonces los Filisteos tomaron el arca de Dios y la introdujeron en el templo de Dagón, y la pusieron junto a Dagón.
A la mañana siguiente, cuando los de Asdod se levantaron temprano, vieron que Dagón había caído rostro en tierra delante del arca del SEÑOR. Así que tomaron a Dagón y lo pusieron otra vez en su lugar.
Por tanto, hasta hoy, ni los sacerdotes de Dagón ni ninguno de los que entran en el templo de Dagón, pisan el umbral de Dagón en Asdod.
Y la mano del SEÑOR se hizo pesada sobre los de Asdod, y los desoló y los hirió con tumores, tanto a Asdod como a sus territorios.
Cuando los hombres de Asdod vieron lo que les sucedía, dijeron: ``El arca del Dios de Israel no debe quedar con nosotros, pues su mano es dura sobre nosotros y sobre Dagón nuestro dios."
Así que enviaron a buscar e hicieron venir a todos los príncipes de los Filisteos, y les dijeron: `` ¿Qué haremos con el arca del Dios de Israel?" ``Que se traslade el arca del Dios de Israel a Gat," respondieron ellos. Y trasladaron el arca del Dios de Israel.
Pero después que la habían trasladado, la mano del SEÑOR estuvo contra la ciudad {causando} gran confusión; e hirió a los hombres de la ciudad, desde el menor hasta el mayor, saliéndoles tumores.
Entonces enviaron el arca de Dios a Ecrón. Y sucedió que cuando el arca de Dios llegó a Ecrón, los Ecronitas clamaron y dijeron: ``Han traído el arca del Dios de Israel hasta nosotros para matarnos a nosotros y a nuestro pueblo."
Por tanto, mandaron a reunir a todos los príncipes de los Filisteos, y les dijeron: ``Saquen de aquí el arca del Dios de Israel, y que vuelva a su sitio, para que no nos mate a nosotros y a nuestro pueblo." Porque había un pánico mortal por toda la ciudad; la mano de Dios se hizo muy pesada allí.
Y los hombres que no murieron fueron heridos con tumores, y el clamor de la ciudad subió hasta el cielo.
El arca del SEÑOR había estado siete meses en la tierra de los Filisteos.
Entonces los Filisteos llamaron a los sacerdotes y a los adivinos y les preguntaron: `` ¿Qué haremos con el arca del SEÑOR? Dígannos cómo la hemos de enviar a su lugar."
Y {los Filisteos} preguntaron: `` ¿Cuál será la ofrenda por la culpa que Le hemos de devolver?" Y ellos dijeron: ``Cinco tumores de oro y cinco ratones de oro {conforme} al número de los príncipes de los Filisteos, porque la misma plaga {estuvo} sobre todos ustedes y sobre sus príncipes.
" ¿Por qué entonces endurecen sus corazones, como endurecieron sus corazones los Egipcios y Faraón? Cuando El los trató severamente, ¿no dejaron ir al pueblo, y ellos se fueron?
"Tomen el arca del SEÑOR y colóquenla en el carro; y pongan en una caja a su lado los objetos de oro que Le entregarán como ofrenda por la culpa. Luego, déjenla ir, y que se vaya.
Entonces los hombres lo hicieron así. Tomaron dos vacas con crías, las ataron al carro y encerraron sus becerros en casa.
Colocaron el arca del SEÑOR en el carro, y la caja con los ratones de oro y las semejanzas de sus tumores.
Y las vacas tomaron el camino recto en dirección a Bet Semes. Iban por el camino, mugiendo mientras iban, y no se desviaron ni a la derecha ni a la izquierda. Los príncipes de los Filisteos las siguieron hasta el límite de Bet Semes.
Los Levitas bajaron el arca del SEÑOR y la caja que estaba con ella, en la cual estaban los objetos de oro, y las colocaron sobre la piedra grande. Entonces los hombres de Bet Semes ofrecieron holocaustos e hicieron sacrificios aquel día al SEÑOR.
Cuando los cinco príncipes de los Filisteos vieron {esto,} regresaron a Ecrón el mismo día.
Estos son los tumores de oro que los Filisteos entregaron como ofrenda por la culpa al SEÑOR: uno por Asdod, uno por Gaza, uno por Ascalón, uno por Gat y uno por Ecrón;
y ratones de oro {conforme} al número de todas las ciudades de los Filisteos que pertenecían a los cinco príncipes, tanto de ciudades fortificadas como de aldeas sin murallas. La piedra grande sobre la cual colocaron el arca del SEÑOR {es testigo} hasta el día de hoy en el campo de Josué el Bet Semita.
{El Señor} hirió a los hombres de Bet Semes porque habían mirado dentro del arca del SEÑOR. De todo el pueblo hirió a 50,070 hombres, y el pueblo lloró porque el SEÑOR había herido al pueblo con gran mortandad.
Y los hombres de Bet Semes dijeron: `` ¿Quién puede estar delante del SEÑOR, este Dios santo? ¿Y a quién subirá {al alejarse} de nosotros?"
Entonces enviaron mensajeros a los habitantes de Quiriat Jearim y le dijeron: ``Los Filisteos han devuelto el arca del SEÑOR; desciendan, {y} llévenla con ustedes."
Los hombres vinieron de Quiriat Jearim, tomaron el arca del SEÑOR y la llevaron a la casa de Abinadab en la colina, y consagraron a Eleazar su hijo para que guardara el arca del SEÑOR.
Entonces Samuel habló a toda la casa de Israel: ``Si es que ustedes se vuelven al SEÑOR con todo su corazón, entonces quiten de entre ustedes los dioses extranjeros y a Astarot, y dirijan su corazón al SEÑOR, y sírvanle sólo a El; y El los librará de la mano de los Filisteos."
Los Israelitas quitaron a los Baales y a Astarot, y sirvieron sólo al SEÑOR.
Se reunieron los Israelitas en Mizpa, y sacaron agua y {la} derramaron delante del SEÑOR, ayunaron aquel día y dijeron allí: ``Hemos pecado contra el SEÑOR." Y Samuel juzgó a los Israelitas en Mizpa.
Cuando los Filisteos oyeron que los Israelitas se habían reunido en Mizpa, los príncipes de los Filisteos subieron contra Israel. Cuando oyeron esto los Israelitas, tuvieron temor de los Filisteos.
Entonces los Israelitas dijeron a Samuel: ``No dejes de clamar al SEÑOR nuestro Dios por nosotros, para que El nos libre de la mano de los Filisteos."
Mientras Samuel estaba ofreciendo el holocausto, los Filisteos se acercaron para pelear con Israel. Pero el SEÑOR tronó con gran estruendo aquel día contra los Filisteos y los confundió, y fueron derrotados delante de Israel.
Saliendo de Mizpa los hombres de Israel, persiguieron a los Filisteos, hiriéndolos hasta más allá de Bet Car.
Los Filisteos fueron sometidos y no volvieron más dentro de los límites de Israel. Y la mano del SEÑOR estuvo contra los Filisteos todos los días de Samuel.
Las ciudades que los Filisteos habían tomado de Israel fueron restituidas a Israel, desde Ecrón hasta Gat, e Israel libró su territorio de la mano de los Filisteos. Y hubo paz entre Israel y los Amorreos.
Samuel juzgó a Israel todos los días de su vida.
Pero sus hijos no anduvieron en los caminos de su padre, sino que se desviaron tras ganancias deshonestas, aceptaron sobornos y pervirtieron el derecho.
Entonces se reunieron todos los ancianos de Israel y fueron a Samuel en Ramá,
Pero fue desagradable a los ojos de Samuel que dijeran: ``Danos un rey que nos juzgue." Y Samuel oró al SEÑOR.
"Así como todas las obras que han hecho desde el día en que los saqué de Egipto hasta hoy, abandonándome y sirviendo a otros dioses, así lo están haciendo contigo también.
Y dijo: ``Así será el proceder del rey que reinará sobre ustedes: tomará a sus hijos, {los} pondrá a su servicio en sus carros y entre su gente de a caballo, y correrán delante de sus carros reales.
"Les tomará lo mejor de sus campos, de sus viñedos y de sus olivares y {se los} dará a sus siervos.
"Les tomará también sus siervos y sus siervas, sus mejores jóvenes y sus asnos, y {los} usará para su servicio.
Y el SEÑOR dijo a Samuel: ``Escúchalos y nómbrales un rey." Entonces Samuel dijo a los hombres de Israel: ``Váyase cada uno a su ciudad."
Tenía un hijo que se llamaba Saúl, joven y bien parecido. No había nadie más bien parecido que él entre los Israelitas; de los hombros arriba sobrepasaba a cualquiera del pueblo.
Las asnas de Cis, padre de Saúl, se habían perdido, por lo cual Cis dijo a su hijo Saúl: ``Toma ahora contigo uno de los criados, levántate, y ve en busca de las asnas."
{Saúl} pasó por la región montañosa de Efraín y recorrió la tierra de Salisa, pero no {las} hallaron. Luego pasaron por la tierra de Saalim, pero no {estaban allí.} Después atravesaron la tierra de los Benjamitas, pero tampoco {las} encontraron.
"Cuando entren en la ciudad lo encontrarán antes que suba al lugar alto a comer, pues el pueblo no comerá hasta que él llegue, porque él tiene que bendecir el sacrificio; después comerán los convidados. Suban ahora, que lo encontrarán enseguida."
``Mañana como a esta hora te enviaré un hombre de la tierra de Benjamín, lo ungirás para que sea príncipe sobre Mi pueblo Israel, y él librará a Mi pueblo del dominio de los Filisteos. Porque Yo he visto la aflicción de Mi pueblo, pues su clamor ha llegado hasta Mí."
Entonces Samuel tomó a Saúl y a su criado, los llevó a la sala y les dio un lugar a la cabecera de los invitados, que eran unos treinta hombres.
"Después llegarás a la colina de Dios donde está la guarnición de los Filisteos; y sucederá que cuando llegues a la ciudad, allá encontrarás a un grupo de profetas que descienden del lugar alto con arpa, pandero, flauta y lira delante de ellos, y estarán profetizando.
Cuando todos los que lo conocían de antes vieron que ahora profetizaba con los profetas, los del pueblo se decían unos a otros: `` ¿Qué le ha sucedido al hijo de Cis? ¿Está Saúl también entre los profetas?"
Un hombre de allí respondió: `` ¿Y quién es el padre de ellos?" Por lo cual esto se hizo proverbio: `` ¿Está Saúl también entre los profetas?"
y dijo a los hijos de Israel: ``Así dice el SEÑOR, Dios de Israel: `Yo saqué a Israel de Egipto, y los libré del poder de los Egipcios y del poder de todos los reinos que los oprimían.'
"Pero ustedes han rechazado hoy a su Dios, que los libra de todas sus calamidades y sus angustias, y han dicho: `No, sino pon un rey sobre nosotros.' Ahora pues, preséntense delante del SEÑOR por sus tribus y por sus familias."
Corrieron y lo trajeron de allí. Cuando estuvo en medio del pueblo, de los hombros arriba sobrepasaba a todos.
Saúl también se fue a su casa en Guibeá, y con él fueron los valientes cuyos corazones Dios había tocado.
Y subió Nahas el Amonita y sitió a Jabes de Galaad, y todos los hombres de Jabes dijeron a Nahas: ``Haz un pacto con nosotros y te serviremos."
Y los ancianos de Jabes le dijeron: ``Danos siete días para que enviemos mensajeros por todo el territorio de Israel. Y si no hay quien nos libre, nos entregaremos a ti."
Entonces los mensajeros fueron a Guibeá de Saúl y hablaron estas palabras a oídos del pueblo, y todo el pueblo alzó la voz y lloró.
Y sucedió que Saúl regresaba del campo detrás de los bueyes, y dijo: `` ¿Qué {pasa} con el pueblo que está llorando?" Entonces le contaron las palabras de los mensajeros de Jabes.
Tomando una yunta de bueyes, los cortó en pedazos y {los} mandó por todo el territorio de Israel por medio de mensajeros, diciendo: ``Así se hará a los bueyes del que no salga en pos de Saúl y en pos de Samuel." Entonces el terror del SEÑOR cayó sobre el pueblo, y salieron como un solo hombre.
Y Saúl los contó en Bezec, y los Israelitas eran 300,000 y los hombres de Judá 30,000.
Y dijeron a los mensajeros que habían venido: ``Así dirán a los hombres de Jabes de Galaad: `Mañana cuando caliente el sol serán librados.' Entonces los mensajeros fueron y {lo} anunciaron a los hombres de Jabes, y {éstos} se regocijaron.