'Morada' en la Biblia
Y creará el SEÑOR sobre toda la morada del Monte de Sion, y sobre los lugares de sus convocaciones, nube y oscuridad de día, y de noche resplandor de fuego que eche llamas; porque sobre toda gloria habrá cobertura.
Acontecerá en aquel día que las naciones acudirán a la raíz de Isaí, que estará puesta como señal para los pueblos, y será gloriosa su morada.
Porque el SEÑOR me dijo así: me reposaré, y miraré desde mi morada; como sol claro después de la lluvia, y como nube cargada de rocío en el calor de la siega.
¿Qué tienes tú aquí, o a quién tienes tú aquí, que labraste aquí sepulcro para ti, como el que en lugar alto labra su sepultura, o el que esculpe para sí morada en una peña?
De otra manera la ciudad fortalecida será asolada; la morada será desamparada, y dejada como un desierto; allí se apacentará el becerro, allí tendrá su majada, y acabará sus ramas.
Y mi pueblo habitará en morada de paz: y en habitaciones seguras, y en refrigerios de reposo.
Verás a Sion, ciudad de nuestras solemnidades; tus ojos verán a Jerusalén, morada de quietud; tienda que no será desarmada, ni sus estacas serán arrancadas, ni ninguna de sus cuerdas será rota.
En sus alcázares crecerán espinas, y ortigas; y cardos, en sus fortalezas; y serán morada de dragones, patio para los pollos de los avestruces.
Las fieras del desierto se encontrarán con las hienas, y la cabra del monte gritará a su compañero; la lechuza también tendrá allí morada, y hallará para sí lugar de reposo.
Entonces Senaquerib rey de Asiria partiéndose se fue, y se tornó, e hizo su morada en Nínive.
Mi morada ha sido movida, y traspasada de mí, como tienda de pastor, cortó mi vida como el tejedor; me ha cortado con la enfermedad; entre el día y la noche me consumirás.
Porque así dijo el Alto y Sublime, el que habita en eternidad, y cuyo nombre es El Santo, que tengo por morada la altura y la santidad; y con el quebrantado y abatido de espíritu habito, para hacer vivir el espíritu de los abatidos, y para hacer vivir el corazón de los quebrantados.
Mira desde el cielo, desde la morada de tu santidad, y de tu gloria. ¿Dónde está tu celo, y tu fortaleza, la conmoción de tus entrañas, y de tus miseraciones para conmigo? ¿Se han estrechado?
Resultados de Búsqueda por Versiones
Resultados de Búsqueda por Libro
- Génesis (1)
- Éxodo (9)
- Levítico (3)
- Números (9)
- Deuteronomio (4)
- Josué (1)
- 1 Samuel (3)
- 2 Samuel (1)
- 1 Reyes (5)
- 2 Reyes (1)
- 1 Crónicas (2)
- 2 Crónicas (8)
- Esdras (1)
- Job (7)
- Salmos (16)
- Proverbios (2)
- Eclesiastés (1)
- Isaías (13)
- Jeremías (15)
- Ezequiel (2)
- Daniel (5)
- Amós (1)
- Abdías (1)
- Nahúm (1)
- Sofonías (1)
- Zacarías (1)