'Ni' en la Biblia
mas no convidó a Natán, el profeta, ni a Benaía, ni a los grandes, ni a Salomón su hermano.
Mas ni a mí tu siervo, ni a Sadoc, el sacerdote, ni a Benaía hijo de Joiada, ni a Salomón tu siervo, ha convidado.
Y Salomón dijo: Si él fuere virtuoso, ni uno de sus cabellos caerá en tierra; mas si se hallare mal en él, morirá.
Después envió el rey, e hizo venir a Simei, y le dijo: Edifícate una casa en Jerusalén, y mora ahí, y no salgas de allá a una parte ni a otra;
Ahora pues, SEÑOR Dios mío, tú me has puesto a mí tu siervo por rey en lugar de David mi padre; y yo soy muy joven, que no sé cómo entrar ni salir.
Y tu siervo está en medio de tu pueblo al cual tú elegiste; un pueblo grande, que no se puede contar ni numerar por su multitud.
Y le dijo Dios: Porque has demandado esto, y no pediste para ti muchos días, ni pediste para ti riquezas, ni pediste la vida de tus enemigos, mas demandaste para ti entendimiento para oír juicio;
he aquí lo he hecho conforme a tus palabras; he aquí que te he dado corazón sabio y entendido, tanto que no ha habido antes de ti otro como tú, ni después de ti se levantará otro como tú.
Entonces la mujer de quien era el hijo vivo, habló al rey (porque sus entrañas se le conmovieron por su hijo), y dijo: ¡Ruego, señor mío! Dad a ésta el niño vivo, y no lo matéis. Mas la otra dijo: Ni a mí ni a ti; sino partidlo.
Ahora el SEÑOR mi Dios me ha dado reposo por todas partes; que ni hay adversarios, ni mal encuentro.
Y la Casa cuando se edificó, la fabricaron de piedras perfectas que traían ya acabadas de labrar; de tal manera que cuando la edificaban, ni martillos ni hachas se oyeron en la Casa, ni ningún otro instrumento de hierro.
Y el rey Salomón, y toda la congregación de Israel que a él se había juntado, estaban con él delante del arca, sacrificando ovejas y bueyes, que por la multitud no se podían contar ni numerar.
dijo: SEÑOR Dios de Israel, no hay Dios como tú, ni arriba en los cielos ni abajo en la tierra, que guardas el pacto y la misericordia a tus siervos, los que andan delante de ti de todo su corazón;
Sea con nosotros el SEÑOR nuestro Dios, como fue con nuestros padres; y no nos desampare, ni nos deje;
mas yo no lo creía, hasta que he venido, y mis ojos han visto, que ni aun se me dijo la mitad. Tu sabiduría y bien es mayor que la fama que yo había oído.
Y de la madera de brasil hizo el rey balaustres para la Casa del SEÑOR, y para las casas reales, y arpas y salterios para los cantores; nunca vino tanta madera de brasil, ni se ha visto hasta hoy.
de los gentiles de las cuales el SEÑOR había dicho a los hijos de Israel: No entraréis a ellas, ni ellas entrarán a vosotros; porque ciertamente ellas harán inclinar vuestros corazones tras sus dioses. A éstas pues se juntó Salomón con amor.
Así dijo el SEÑOR: No vayáis, ni peleéis contra vuestros hermanos los hijos de Israel; volveos cada uno a su casa; porque este negocio yo lo he hecho. Y ellos oyeron la palabra de Dios, y volvieron, y se fueron, conforme a la palabra del SEÑOR.
Mas el varón de Dios dijo al rey: Si me dieras la mitad de tu casa, no iría contigo, ni comería pan ni bebería agua en este lugar;
porque así me está mandado por palabra del SEÑOR, diciendo: No comas pan, ni bebas agua, ni vuelvas por el camino que fueres.
Mas él respondió: No podré volver contigo, ni iré contigo; ni tampoco comeré pan ni beberé agua contigo en este lugar;
porque por palabra de Dios me ha sido dicho: No comas pan ni bebas agua allí, ni vuelvas por el camino que fueres.
sino que volviste, y comiste del pan y bebiste del agua en el lugar donde el SEÑOR te había dicho, que ni comieras pan, ni bebieras agua, no entrará tu cuerpo en el sepulcro de tus padres.
Y él fue, y halló su cuerpo tendido en el camino, y el asno y el león estaban junto al cuerpo; el león no había comido el cuerpo, ni dañado al asno.
Y subió Baasa rey de Israel contra Judá, y edificó a Ramá, para no dejar salir ni entrar a ninguno de Asa, rey de Judá.
Y luego que llegó a reinar y estuvo sentado en su trono, hirió toda la casa de Baasa, sin dejar en ella meante a la pared, ni sus parientes \'
Entonces Elías tisbita, que era de los moradores de Galaad, dijo a Acab: Vive el SEÑOR Dios de Israel, delante del cual estoy, que no habrá lluvia ni rocío en estos años, sino por mi palabra.
Porque el SEÑOR Dios de Israel dijo así: El cántaro de la harina no faltará, ni se disminuirá la vasija del aceite, hasta aquel día que el SEÑOR dará lluvia sobre la faz de la tierra.
Y el cántaro de la harina no escaseó, ni menguó la vasija del aceite, conforme a la palabra del SEÑOR que había dicho por Elías.
Vive el SEÑOR tu Dios, que no ha habido nación ni reino donde mi señor no haya enviado a buscarte; y respondiendo todos: No está aquí, él ha conjurado a reinos y naciones si te han hallado.
Elías se acercó a todo el pueblo y dijo: ¿Hasta cuándo vacilaréis entre dos opiniones? Si el SEÑOR es Dios, seguidle; y si Baal, seguidle a él. Pero el pueblo no le respondió ni una palabra.
Y ellos tomaron el buey que les fue dado, y lo aparejaron, e invocaron en el nombre de Baal desde la mañana hasta el mediodía, diciendo: ¡Baal, respóndenos! Mas no había voz, ni quien respondiera; entre tanto, ellos andaban saltando cerca del altar que habían hecho.
Y cuando pasó el mediodía, y ellos aun profetizaron hasta el tiempo del ofrecimiento del sacrificio de la tarde, y no había voz, ni quien respondiera ni escuchara;
Y todos los ancianos y todo el pueblo le respondieron: No le oigas, ni hagas lo que te pide.
Mas el rey de Siria había mandado a sus treinta y dos capitanes de los carros, diciendo: No peleéis vosotros ni con grande ni con chico, sino contra el rey de Israel.
Resultados de Búsqueda por Versiones
Resultados de Búsqueda por Libro
- Génesis (32)
- Éxodo (56)
- Levítico (75)
- Números (33)
- Deuteronomio (108)
- Josué (25)
- Jueces (28)
- Rut (4)
- 1 Samuel (44)
- 2 Samuel (30)
- 1 Reyes (35)
- 2 Reyes (30)
- 1 Crónicas (10)
- 2 Crónicas (28)
- Esdras (6)
- Nehemías (20)
- Ester (8)
- Job (52)
- Salmos (90)
- Proverbios (37)
- Eclesiastés (25)
- Cantares (4)
- Isaías (132)
- Jeremías (129)
- Lamentaciones (6)
- Ezequiel (97)
- Daniel (29)
- Oseas (20)
- Joel (2)
- Amós (11)
- Abdías (4)
- Jonás (4)
- Miqueas (7)
- Habacuc (2)
- Sofonías (5)
- Hageo (1)
- Zacarías (14)
- Malaquías (4)
- Mateo (45)
- Marcos (26)
- Lucas (44)
- Juan (24)
- Hechos (29)
- Romanos (20)
- 1 Corintios (29)
- 2 Corintios (5)
- Gálatas (12)
- Efesios (5)
- Filipenses (3)
- Colosenses (2)
- 1 Tesalonicenses (5)
- 2 Tesalonicenses (3)
- 1 Timoteo (9)
- 2 Timoteo (2)
- Tito (3)
- Hebreos (13)
- Santiago (4)
- 1 Pedro (6)
- 2 Pedro (2)
- 1 Juan (3)
- 2 Juan (1)
- Judas (1)
- Apocalipsis (23)