'Palabras' en la Biblia
Para el director del coro; para acompañamiento de flauta. Salmo de David.Escucha mis palabras, oh SEÑOR; Considera mi lamento.
Las palabras del SEÑOR son palabras puras, Plata probada en un crisol en la tierra, siete veces refinada.
Para el director del coro. {Salmo} de David, siervo del SEÑOR, el cual dirigió al SEÑOR las palabras de este cántico el día que el SEÑOR lo libró de la mano de todos sus enemigos, y de la mano de Saúl. Y dijo:``Yo Te amo, SEÑOR, fortaleza mía."
No hay mensaje, no hay palabras; No se oye su voz.
{Pero} por toda la tierra salió su voz, Y hasta los confines del mundo sus palabras. En ellos Dios puso una tienda para el sol,
Sean gratas las palabras de mi boca y la meditación de mi corazón delante de Ti, Oh SEÑOR, roca mía y Redentor mío.
Para el director del coro; sobre ajelet Hasahar. Salmo de David.Dios mío, Dios mío, ¿por qué me has abandonado? ¿{Por qué estás tan} lejos de mi salvación {y} de las palabras de mi clamor?
Porque ellos no hablan paz, Sino que piensan palabras engañosas contra los pacíficos de la tierra,
Las palabras de su boca son iniquidad y engaño; Ha dejado de ser sabio {y} de hacer el bien.
Este es el camino de los insensatos, Y de los que después de ellos aprueban sus palabras. (Selah)
Porque tú aborreces la disciplina, Y a tus espaldas echas Mis palabras.
Escucha mi oración, oh Dios, Presta oído a las palabras de mi boca.
Las palabras de su boca eran más blandas que la mantequilla, Pero en su corazón {había} guerra; Más suaves que el aceite eran sus palabras, Sin embargo, eran espadas desnudas.
Todo el día pervierten mis palabras; Todos sus pensamientos contra mí son para mal.
Que afilan su lengua como espada, {Y} lanzan palabras amargas {como} flecha,
Masquil de Asaf.Escucha, pueblo mío, mi enseñanza; Inclinen ustedes su oído a las palabras de mi boca.
Mandó tinieblas e hizo que se oscureciera, Pero ellos no atendieron a Sus palabras.
Entonces ellos creyeron en Sus palabras, {Y} cantaron Su alabanza.
Porque fueron rebeldes a las palabras de Dios Y despreciaron el consejo del Altísimo;
Me han rodeado también con palabras de odio, Y sin causa han luchado contra mí.
El SEÑOR es mi porción; He prometido guardar Tus palabras.
¡Cuán dulces son a mi paladar Tus palabras!, {Sí, más} que la miel a mi boca.
La exposición de Tus palabras imparte luz; Da entendimiento a los sencillos.
Mi celo me ha consumido, Porque mis adversarios han olvidado Tus palabras.
Me anticipo al alba y clamo; En Tus palabras espero.
Príncipes me persiguen sin causa, Pero mi corazón teme Tus palabras.
Sus jueces son lanzados contra los costados de la peña, Y oyen mis palabras, que son agradables.