'Responder' en la Biblia
Y nadie le podía responder palabra; ni osó alguno desde aquel día preguntarle más.
Y cuando os trajeren a las sinagogas, y ante los magistrados y potestades, no os preocupéis de cómo o qué habéis de responder, o qué habéis de decir;
Proponed, pues, en vuestros corazones no pensar antes cómo habéis de responder;
Pues no nos recomendamos otra vez a vosotros, sino os damos ocasión de gloriaros por nosotros, para que tengáis qué responder a los que se glorían en la apariencia y no en el corazón.
Sea vuestra palabra siempre con gracia, sazonada con sal, para que sepáis cómo debéis responder a cada uno.
sino santificad al Señor Dios en vuestros corazones, y estad siempre preparados para responder con mansedumbre y temor a todo el que os demande razón de la esperanza que hay en vosotros;