'Resucitó' en la Biblia
Por eso, cuando resucitó de los muertos, sus discípulos se acordaron de que había dicho esto; y creyeron en la Escritura y en la palabra que Jesús había hablado.
Y así, la multitud que estaba con El cuando llamó a Lázaro del sepulcro y lo resucitó de entre los muertos, daba testimonio {de El.}
a quien Dios resucitó, poniendo fin a la agonía de la muerte, puesto que no era posible que El quedara bajo el dominio de ella.
A este Jesús resucitó Dios, de lo cual todos nosotros somos testigos.
y disteis muerte al Autor de la vida, al que Dios resucitó de entre los muertos, de lo cual nosotros somos testigos.
sabed todos vosotros, y todo el pueblo de Israel, que en el nombre de Jesucristo el Nazareno, a quien vosotros crucificasteis {y} a quien Dios resucitó de entre los muertos, por El, este {hombre} se halla aquí sano delante de vosotros.
El Dios de nuestros padres resucitó a Jesús, a quien vosotros habíais matado colgándole en una cruz.
A éste Dios le resucitó al tercer día e hizo que se manifestara,
no a todo el pueblo, sino a los testigos que fueron escogidos de antemano por Dios, {es decir,} a nosotros que comimos y bebimos con El después que resucitó de los muertos.
{Y en cuanto a} que le resucitó de entre los muertos para nunca más volver a corrupción, {Dios} ha hablado de esta manera: OS DARE LAS SANTAS {y} FIELES {misericordias} {prometidas} A DAVID.
Pero aquel a quien Dios resucitó no vio corrupción.
Por tanto, hemos sido sepultados con El por medio del bautismo para muerte, a fin de que como Cristo resucitó de entre los muertos por la gloria del Padre, así también nosotros andemos en novedad de vida.
Por tanto, hermanos míos, también a vosotros se os hizo morir a la ley por medio del cuerpo de Cristo, para que seáis unidos a otro, a aquel que resucitó de entre los muertos, a fin de que llevemos fruto para Dios.
Pero si el Espíritu de aquel que resucitó a Jesús de entre los muertos habita en vosotros, el {mismo} que resucitó a Cristo Jesús de entre los muertos, también dará vida a vuestros cuerpos mortales por medio de su Espíritu que habita en vosotros.
¿Quién es el que condena? Cristo Jesús es el que murió, sí, más aún, el que resucitó, el que además está a la diestra de Dios, el que también intercede por nosotros.
que si confiesas con tu boca a Jesús {por} Señor, y crees en tu corazón que Dios le resucitó de entre los muertos, serás salvo;
Porque para esto Cristo murió y resucitó, para ser Señor tanto de los muertos como de los vivos.
Y Dios, que resucitó al Señor, también nos resucitará a nosotros mediante su poder.
que fue sepultado y que resucitó al tercer día, conforme a las Escrituras;
Aún más, somos hallados testigos falsos de Dios, porque hemos testificado contra Dios que El resucitó a Cristo, a quien no resucitó, si en verdad los muertos no resucitan.
sabiendo que aquel que resucitó al Señor Jesús, a nosotros también nos resucitará con Jesús, y nos presentará juntamente con vosotros.
y por todos murió, para que los que viven, ya no vivan para sí, sino para aquel que murió y resucitó por ellos.
Pablo, apóstol (no de parte de hombres ni mediante hombre {alguno,} sino por medio de Jesucristo y de Dios el Padre que le resucitó de entre los muertos),
el cual obró en Cristo cuando le resucitó de entre los muertos y le sentó a su diestra en los {lugares} celestiales,
y con El {nos} resucitó, y con El {nos} sentó en los {lugares} celestiales en Cristo Jesús,
habiendo sido sepultados con El en el bautismo, en el cual también habéis resucitado con El por la fe en la acción {del poder} de Dios, que le resucitó de entre los muertos.
y esperar de los cielos a su Hijo, al cual resucitó de entre los muertos, {es decir,} a Jesús, quien nos libra de la ira venidera.
Porque si creemos que Jesús murió y resucitó, así también Dios traerá con El a los que durmieron en Jesús.
Y el Dios de paz, que resucitó de entre los muertos a Jesús nuestro Señor, el gran Pastor de las ovejas mediante la sangre del pacto eterno,
que por medio de El sois creyentes en Dios, que le resucitó de entre los muertos y le dio gloria, de manera que vuestra fe y esperanza sean en Dios.